El clima frío, el aire seco y los vientos ásperos suelen causar estragos en el cabello, sobre todo si tienes pelo seco. Además del clima, es común que sigas algunas prácticas que causan daños notables. Quizá crees que estás haciendo algo provechoso, pero te sorprenderás con algunos tratamientos que provocan deterioros en tu cabello:

1. Lavado frecuente

Lavar tu cabello es perjudicial. ¡Incluso solo mojar el cabello puede provocar más roturas! Cuando el cabello se moja, el tallo se hincha, resultando en un cabello más elástico y más fácil de romper.

Además, los champús a veces pueden ayudar a ello, eliminando los aceites que produce naturalmente su cabello, lo que da como resultado un cabello opaco y seco.

Ante esto, opta por lavarte menos el pelo. Si debes lavarlo diariamente, usa un champú suave y concéntrate en las raíces donde el cabello es más graso y, generalmente, tiene más acumulación de producto.

2. Cepillarse el cabello mojado

El cabello mojado es más susceptible al daño que el cabello seco porque tiene más elasticidad, y es más probable que se rompa. Incluso cepillar el cabello seco en exceso es perjudicial, ya que los cepillos y peines pueden romper el cabello.

Procura, por lo tanto, ser suave con el pelo mojado. Usa tus dedos o un peine de dientes anchos para eliminar los enredos y evitar más daños.

3. Frotarse con toallas

Las toallas pueden dañar tu cabello. Frotar la cabellera con una toalla puede dañar la cutícula, que es la capa exterior del cabello, lo que hace que se vea muy rizado o esponjoso y, potencialmente, provoque una mayor rotura.

Para evitar esto, seca el cabello con una toalla de forma suave en lugar de frotarlo para eliminar la humedad. Además, invertir en una toalla bastante absorbente puede ser una buena idea, especialmente si tienes el cabello muy grueso.

4. Usar el secador

El calor causa daños. El secador causa un efecto de secado instantáneo que no solo elimina la humedad de la superficie, sino que también elimina el agua que está unida al cabello y lo hidrata.

El efecto de este secado instantáneo es que las cutículas se vuelven secas, rígidas y quebradizas. Cuando el cabello se flexiona, la presión hace que las cutículas se agrieten. El peinado del cabello con este grado de agrietamiento de la cutícula provoca una rotura significativa.

Lo ideal sería no secarte el cabello. Aunque si no vas a dejar de hacerlo, para reducir parte del daño, usa un spray protector contra el calor o un acondicionador sin enjuague que contenga glicerina para reducir la evaporación del agua.

5. Planchar el cabello

Si no son de alta calidad tipo la GHD Platinum que puedes encontrar en planchasghd.es, las planchas de pelo dañan tu cabello de manera diferente a los secadores. Planchar el cabello puede causar dos tipos diferentes de daño, dependiendo de si el cabello está planchado en seco o mojado.

Planchar el cabello seco causa agrietamiento a lo largo de los bordes de las cutículas, lo que puede provocar astillas. Por otra parte, al planchar el cabello mojado, la humedad se revienta en pequeñas explosiones de vapor. Esto causa un burbujeo y pandeo de la cutícula que provocan roturas y puntas abiertas.

Este daño puede reducirse mediante el uso de acondicionadores formulados con ingredientes especiales que aumenten la fuerza y hagan que sea más difícil de romper. De esta manera también podrás usar un rizador de pelo para conseguir una mejor apariencia.

Si bien es casi imposible prevenir todo tipo de daños en el pelo, hay algunas soluciones simples que pueden hacer que su cabello se vea y se sienta más saludable sin sacrificar las prácticas que normalmente tienes en tu vida.