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Domingo, 21 de Junio de 2020 Tiempo de lectura:
Obituario

En recuerdo de Pepe "el Ferreiro"

Con días de retraso, me entero de la muerte de Pepe "el Ferreiro" (13 de junio de 2020). Lejos de mi querida Asturias, y con las cargas cotidianas encima, a veces parece que la patria me está más lejos de lo que indican los mapas.

 

No conocí personalmente a "Pepe el Ferreiro", don José Naveiras [https://es.wikipedia.org/wiki/Pepe_el_Ferreiro], el gran etnógrafo que, con su propio empeño y esfuerzo, puso en marcha un gran museo, el de Grandas de Salime, en Asturias, un centro que es ejemplo a seguir de verdadero amor a la patria, de cultivo y cuidado de las raíces. Sirvan estas líneas -demasiado cortas- para rendir tributo a quien cuidó de las raíces de los asturianos y, muy especialmente, las raíces del maravilloso Occidente de la región, una parte del Principado donde queda gente que ama su tierra y se mantiene unida umbilicalmente con la patria que le vio nacer. A Pepe "el Ferreiro" no le traté, pero su Museo Etnográfico, cuya visita recomiendo y, casi diría, exijo, sí lo pude visitar. El personal amabilísimo que guía al turista nos transmite su orgullo por tan magna obra (al menos 20.000 piezas recogidas por él), su devoción hacia quien fue su fundador y director, la incomprensión y desconcierto ante la destitución y ante los ataques que sufrió, años ha. En España la gente suele ser desagradecida.

 

Mi tributo y agradecimiento ante gentes como ésta, como Pepe, que rescatan todo un modo de vida que se eclipsa y ponen amor en lo que hacen, en medio de horteras modernidades, aflamencamientos sin cuento, globalización a tutiplén y, en medio, en definitiva, de la pérdida galopante de identidad. Recopilar, custodiar, defender… esa es la labor en tiempos de barbarie y vendaval etnocida. Eso, rescatar y cuidar, y no lo que pretende el nacionalismo agresivo de banderas inventadas. Eso es lo que merece la pena. Adiós, Pepe.

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