Palabras malditas
Quién iba a decirnos que iba a llegar el día en el que tuviesemos temor e incluso miedo cerval a pronunciar ciertas palabras y buscar precipitadamente un eufemismo. Tal vez la más característica sea "negro" cuando se refiere al color de una raza. A decir verdad, pronunciarla a día de hoy es tanto como pisar un cable de alta tensión; de las veinte acepciones de dicho vocablo en el DLE ninguna de ellas se considera peyorativa, despectiva o malsonante. ¿A qué se debe esta censura y autocensura?. Sucede lo mismo respecto a defectos físicos o trastornos mentales donde frente a la contundencia, exactitud y ahorro, se usa únicamente una palabra, nos vemos obligados a ser sumisos con la corrección política y a utilizar dos o tres para edulcorar determinados defectos y taras. Si algo caracteriza al idioma español es su inmensa riqueza. Dicho con respeto, admitiendo una realidad, las palabras no son balas. Digamos cada cosa por su nombre en aras a preservar ese legado que es el idioma y al que debemos mimar.
Francisco Javier Sáenz Martínez
FJS.
Lasarte-Oria
Quién iba a decirnos que iba a llegar el día en el que tuviesemos temor e incluso miedo cerval a pronunciar ciertas palabras y buscar precipitadamente un eufemismo. Tal vez la más característica sea "negro" cuando se refiere al color de una raza. A decir verdad, pronunciarla a día de hoy es tanto como pisar un cable de alta tensión; de las veinte acepciones de dicho vocablo en el DLE ninguna de ellas se considera peyorativa, despectiva o malsonante. ¿A qué se debe esta censura y autocensura?. Sucede lo mismo respecto a defectos físicos o trastornos mentales donde frente a la contundencia, exactitud y ahorro, se usa únicamente una palabra, nos vemos obligados a ser sumisos con la corrección política y a utilizar dos o tres para edulcorar determinados defectos y taras. Si algo caracteriza al idioma español es su inmensa riqueza. Dicho con respeto, admitiendo una realidad, las palabras no son balas. Digamos cada cosa por su nombre en aras a preservar ese legado que es el idioma y al que debemos mimar.
Francisco Javier Sáenz Martínez
FJS.
Lasarte-Oria