"Manuel de Irujo se lavó las manos ante lo que estaba ocurriendo"
Un libro acusa al PNV de ser cómplice en las matanzas de Paracuellos
Acaba de aparecer, ahora en la Editorial Raíces, la segunda edición de la polémica novela “Con la piel de cordero” en la que el escritor y periodista Josele Sánchez se adentra en el pasado más oculto del ex dirigente comunista Santiago Carrillo, acusando a éste de haber asesinado a su propia mujer y haberla enterrado en el chalé parisino de Dolores Ibarruri, “La Pasionaria”.
Por si no fueran bastantes las documentadas acusaciones que Josele Sánchez vierte en su novela sobre Santiago Carrillo, involucrándole en el asesinato de León Trotski y en la condena a muerte de José Antonio Primo de Rivera, el escritor abre ahora en un nuevo frente acusando a los nacionalistas vascos de complicidad en las matanzas de Paracuellos del Jarama.
“El PNV fue cómplice, por acción o por omisión, de las matanzas que Santiago Carrillo ordenó en Paracuellos”, explica el escritor valenciano. “Manuel de Irujo, ministro nacionalista del gobierno del Frente Popular, fue un cobarde que, como Poncio Pilatos, se lavó las manos sabiendo lo que estaba ocurriendo”.
Según Josele Sánchez, la actitud el nacionalismo vasco en las matanzas de Paracuellos “fue bastarda y cómplice, la misma que ha mantenido con el terrorismo etarra durante tantos años”.
El escritor añade que “ese mirar hacia otro lado y seguir comulgando es inherente al nacionalismo vasco, forma parte de una cultura que no ha cambiado a lo largo de los años y que tantas muertes ha visto pasar con su silencio cómplice y cobarde”.
Acaba de aparecer, ahora en la Editorial Raíces, la segunda edición de la polémica novela “Con la piel de cordero” en la que el escritor y periodista Josele Sánchez se adentra en el pasado más oculto del ex dirigente comunista Santiago Carrillo, acusando a éste de haber asesinado a su propia mujer y haberla enterrado en el chalé parisino de Dolores Ibarruri, “La Pasionaria”.
Por si no fueran bastantes las documentadas acusaciones que Josele Sánchez vierte en su novela sobre Santiago Carrillo, involucrándole en el asesinato de León Trotski y en la condena a muerte de José Antonio Primo de Rivera, el escritor abre ahora en un nuevo frente acusando a los nacionalistas vascos de complicidad en las matanzas de Paracuellos del Jarama.
“El PNV fue cómplice, por acción o por omisión, de las matanzas que Santiago Carrillo ordenó en Paracuellos”, explica el escritor valenciano. “Manuel de Irujo, ministro nacionalista del gobierno del Frente Popular, fue un cobarde que, como Poncio Pilatos, se lavó las manos sabiendo lo que estaba ocurriendo”.
Según Josele Sánchez, la actitud el nacionalismo vasco en las matanzas de Paracuellos “fue bastarda y cómplice, la misma que ha mantenido con el terrorismo etarra durante tantos años”.
El escritor añade que “ese mirar hacia otro lado y seguir comulgando es inherente al nacionalismo vasco, forma parte de una cultura que no ha cambiado a lo largo de los años y que tantas muertes ha visto pasar con su silencio cómplice y cobarde”.












