Arnaldo Otegi saldrá de la cárcel el próximo 1 de marzo
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha adelantado del 28 al 1 de marzo la puesta en libertad del ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi.
La defensa de Otegi había solicitado al Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria que se le tuvieran en cuenta una serie de comparecencias (apud acta) que había realizado a dependencias judiciales. El nuevo cómputo ha sido realizado por servicio común de ejecutorias y ha concluido que debe ser excarcelado el 1 de marzo, en vez del 28, como estaba previsto.
El adelanto de su excarcelación no afecta a la pena de inhabilitación impuesta. El pasado día 18, la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Nacional confirmó que esta pena le impide presentarse a unas elecciones ni ocupar un cargo público hasta el 28 de febrero de 2021.
Otegi fue condenado en septiembre de 2011 por la Audiencia Nacional a diez años de cárcel por intentar reconstruir Batasuna bajo la dirección de ETA. En mayo del año siguiente el Tribunal Supremo rebajó la pena a seis años y medio de prisión e inhabilitación especial.
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha adelantado del 28 al 1 de marzo la puesta en libertad del ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi.
La defensa de Otegi había solicitado al Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria que se le tuvieran en cuenta una serie de comparecencias (apud acta) que había realizado a dependencias judiciales. El nuevo cómputo ha sido realizado por servicio común de ejecutorias y ha concluido que debe ser excarcelado el 1 de marzo, en vez del 28, como estaba previsto.
El adelanto de su excarcelación no afecta a la pena de inhabilitación impuesta. El pasado día 18, la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Nacional confirmó que esta pena le impide presentarse a unas elecciones ni ocupar un cargo público hasta el 28 de febrero de 2021.
Otegi fue condenado en septiembre de 2011 por la Audiencia Nacional a diez años de cárcel por intentar reconstruir Batasuna bajo la dirección de ETA. En mayo del año siguiente el Tribunal Supremo rebajó la pena a seis años y medio de prisión e inhabilitación especial.









