Los pensionistas vascos cobran 217 euros más que los pensionistas de otros lugares de España
UGT Euskadi: “Las pensiones de los vascos las pagan el resto de los españoles”
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El secretario general de UGT-Euskadi, Raúl Arza, ha dicho a los que "alegremente" piden la transferencia de las pensiones al País Vasco que éstas sufren en Euskadi un déficit de 2.300 millones de euros anuales, de manera que se pagan "porque el resto de comunidades autónomas nos ayudan a soportar el gasto".
El problema de las pensiones en España, ha indicado Arza, es un problema de ingresos, no de gasto, ya que los pagos son el 11,4% del PIB, frente al 13,5% de los países del entorno.
La situación se ha agudizado en los últimos años, en los que se ha echado mano del fondo de reserva de la Seguridad Social para cubrir el déficit -la diferencia entre los ingresos por las cotizaciones y lo que se paga por las prestaciones-, lo que ha llevado a que el fondo baje de 66.000 millones a los 24.000 millones actuales.
El desfase entre los ingresos y gastos es especialmente grave en Euskadi: según los datos del INSS y UGT, la Seguridad Social ingresó en Euskadi en el año 2015 un total de 5.874 millones de euros, y pagó 8.145 millones, es decir, un déficit de 2.271 millones de euros.
Esa cifra de ingresos es la más baja desde 2008, cuando se recaudaron 5.816 millones. En cambio, los pagos han aumentado año a año: en 2008 se abonaron 6.044 millones, es decir, el déficit ese año -hace ocho-, fue de 228 millones de euros. Ahora es de dos mil millones más.
De hecho, Euskadi no tiene superávit en las pensiones desde el año 2005. El envejecimiento de la población, la precariedad laboral -a pesar de haber 32.000 cotizantes en los dos últimos años, los ingresos no han subido- y el hecho de que Euskadi tenga las pensiones más altas, 217 euros más que la media del Estado, han llevado a que el déficit vasco cada día sea mayor.
Un déficit de 2.300 millones de euros que supondría el 22% del presupuesto del Gobierno vasco, por lo que Arza ha avisado a los que "alegremente" piden la transferencia que el problema "no es quien gestiona sino de dónde se sacan los ingresos". Dado que el sistema sobrevive porque "el resto de autonomías nos ayudan a soportar la carga", Arza ha planteado que la mejor solución sería "ir a un sistema cada vez más amplio, incluso a nivel europeo".
El secretario general de UGT-Euskadi, Raúl Arza, ha dicho a los que "alegremente" piden la transferencia de las pensiones al País Vasco que éstas sufren en Euskadi un déficit de 2.300 millones de euros anuales, de manera que se pagan "porque el resto de comunidades autónomas nos ayudan a soportar el gasto".
El problema de las pensiones en España, ha indicado Arza, es un problema de ingresos, no de gasto, ya que los pagos son el 11,4% del PIB, frente al 13,5% de los países del entorno.
La situación se ha agudizado en los últimos años, en los que se ha echado mano del fondo de reserva de la Seguridad Social para cubrir el déficit -la diferencia entre los ingresos por las cotizaciones y lo que se paga por las prestaciones-, lo que ha llevado a que el fondo baje de 66.000 millones a los 24.000 millones actuales.
El desfase entre los ingresos y gastos es especialmente grave en Euskadi: según los datos del INSS y UGT, la Seguridad Social ingresó en Euskadi en el año 2015 un total de 5.874 millones de euros, y pagó 8.145 millones, es decir, un déficit de 2.271 millones de euros.
Esa cifra de ingresos es la más baja desde 2008, cuando se recaudaron 5.816 millones. En cambio, los pagos han aumentado año a año: en 2008 se abonaron 6.044 millones, es decir, el déficit ese año -hace ocho-, fue de 228 millones de euros. Ahora es de dos mil millones más.
De hecho, Euskadi no tiene superávit en las pensiones desde el año 2005. El envejecimiento de la población, la precariedad laboral -a pesar de haber 32.000 cotizantes en los dos últimos años, los ingresos no han subido- y el hecho de que Euskadi tenga las pensiones más altas, 217 euros más que la media del Estado, han llevado a que el déficit vasco cada día sea mayor.
Un déficit de 2.300 millones de euros que supondría el 22% del presupuesto del Gobierno vasco, por lo que Arza ha avisado a los que "alegremente" piden la transferencia que el problema "no es quien gestiona sino de dónde se sacan los ingresos". Dado que el sistema sobrevive porque "el resto de autonomías nos ayudan a soportar la carga", Arza ha planteado que la mejor solución sería "ir a un sistema cada vez más amplio, incluso a nivel europeo".