Múltiples instituciones y organizaciones están llevanda a cabo un llamamiento generalizado para que todos los ciudadanos neozelandeses, y especialmente las mujeres, utilicen el velo islámico el próximo viernes 22 de marzo para "mostrar a los musulmanes en Nueva Zelanda que no están solos”, según ha explicado la responsable de la iniciativa, Anna Thomas.

La gran movilización, que cuenta con el apoyo de los laboristas y de los principales movimientos de izquierda de las grandes islas australes, se ha puesto en marcha bajo el lema #scarvesinsolidarity y según su propaganda intenta mostrar al mundo que las mujeres islámicas han de poder vestir su velo “sin miedo”.

La campaña, que cuenta con el apoyo del Consejo de Mujeres Islámicas de Nueva Zelanda, también está recibiendo fuertes críticas de quienes consideran que “#scarvesinsolidarity no trata sobre solidaridad sino sobre cómo someterse al Islam para conseguir que las sociedades abiertas y democráticas occidentales se flagelen a sí mismas como responsables del reciente atentado terrorista contra una mezquita que acabó con la vida de 49 personas.