La amenaza de la extrema-izquierda, consentida por el pensamiento único socialdemócrata, no cesa.  Un grupo feminista radical que se hace llamar "Suvbersives Castelló" ha realizado varias pintadas en las calles de Castellón en las que se observa una imagen del líder de Vox, Santiago Abascal, con un disparo en la cabeza.

La imagen amenazadora recuerda a las realizadas habitualmente por los acólitos de la banda terrorista ETA en el País Vasco para "señalar" objetivos a los asesinos. De hecho, Santiago Abascal también fue víctima de "mensajes" similares en su tierra natal.

Ayer mismo, el líder de Vox había transmitido públicamente su honda preocupación "por la demonización a la que Vox se ve sometido por el resto de los partidos y los medios de comunicación".