El presidente de Vox, Santiago Abascal Conde, ha explicado que su partido ha enviado un requerimiento a Twitter para que la red social le reintegre inmediatamente su cuenta, suspendida desde hace varios días por un presunto "delito de odio". Si Twitter no lo hace así, el partido conservador, tercera formación política de España, acudirá a los tribunales en defensa de su derecho a la libertad de expresión.

Vox ha comunicado en numerosas ocasiones la negativa del partido a eliminar el tuit que ha desencadenado el cierre de la página por parte de la empresa norteamericana, ya que no se reconoce que promueva delito de odio alguno. “Por este motivo consideramos que con el bloqueo de la cuenta de Vox, Twitter está vulnerando derechos fundamentales especialmente protegidos en nuestra Constitución, como son la libertad de expresión, recogida en el artículo 20, el derecho de participación política, recogido en el artículo 23, la libertad ideológica, recogida en el artículo 16 de mismo texto legal, y del principio de igualdad y pluralismo político, recogido en los artículos 14 y 6 respectivamente de nuestro texto constitucional, tanto en cuanto Vox como partido político es la vía de representación de muchos ciudadanos, al igual que otros partidos que libremente pueden utilizar la libertad de expresión, como no puede ser de otra manera”, ha recogido el texto presentado.

Asimismo, el presidente ha comunicado que, en caso de que Twitter persista en su actitud, Vox se verá obligado a tomar las medidas legales pertinentes. Entre las que se barajan están acudir a los tribunales tanto españoles como estadounidenses y solicitar allí la reactivación.