Indignación entre la oposición
Denuncias, acusaciones y reclamaciones masivas ante el Gobierno “negligente y sectario” de Pedro Sánchez
Las reiteradas y propagandísticas intervenciones televisivas del Gobierno sociocomunista de Pedro Sánchez levantan, semana a semana, más indignación entre los partidos líderes de la oposición.
Pablo Montesinos, vicesecretario de Comunicación del PP, ha explicado que, en opinión de su partido, todo lo que dice Sánchez “es un teatro para intentar ocultar las mentiras del Gobierno de España”. Por ejemplo, “no es de recibo que el Gobierno de España, que hace unos días nos aseguraba que no eran necesarias las mascarillas, ahora nos diga que, para ir a trabajar, hay que utilizarlas. Unas mascarillas que el propio Gobierno reconoce que no tiene”.
El PP reitera que “el PP va a estar al lado del Gobierno para tomar todas las medidas que sean necesarias para salvar vidas”, pero advierte que “no vamos a estar al lado del Gobierno para ser cómplices de las mentiras, ni de las nocivas medidas económicas del Gobierno”. Montesinos también ha trasladado el apoyo del PP a todos los familiares de los fallecidos por el virus y lamenta que “el Gobierno se resista a decretar el luto oficial”.
Por su parte, Santiago Abascal, líder de Vox, ha asegurado que su partido está estudiando presentar una querella contra el Gobierno "negligente y sectario" de Pedro Sánchez por la gestión de la crisis del coronavirus. Para el diputado vasco, el Ejecutivo de extrema-izquierda de PSOE-Podemos se está volviendo "más agresivo y peligroso" contra las libertades debido a su miedo por tener que rendir cuentas ante los españoles, según ha asegurado en una entrevista emitida en el programa Sin Complejos de esRadio. "Las querellas se están elaborando", ha explicado.
Abascal afirma que desde Vox han pedido la dimisión de un Gobierno "absolutamente incapacitado" que ya "ha bajado los brazos en la lucha contra la epidemia y en evitar la destrucción del tejido productivo en España", algo que podría afrontarse si el Estado "asume las nóminas y los ingresos de los españoles a los que no se permite trabajar".
Para Abascal, "los Pactos de la Moncloa no son más que una huida hacia adelante y un intento de hacer una trampa a la oposición para amordazarla con una falsa unidad" y obligarla a vender los relatos del Gobierno, que son los que "han comprado la inmensa mayoría de los medios de comunicación, sobornados con dinero público público confiscado previamente a los autónomos, a las pymes y los trabajadores a los que no se permite trabajar”.
Abascal ha denunciado también que el Ejecutivo socialcomunista "en este momento dedica una parte de sus esfuerzos a la persecución de bulos, cuando el Gobierno es el principal propagador de mentiras en España" y ya "no se conforman con controlar los medios de comunicación, sino que quieren controlar las redes sociales" porque sólo les preocupa que "el único recuerdo que quede de esta triste pandemia sean los aplausos a los sanitarios”.
Pero las críticas no llegan solamente desde la oposición. Desde las fuerzas que apoyan al Gobierno radical de Sánchez, como el PNV, también comienzan a lanzarse algunas protestas. El lehendakari, Iñigo Urkullu, que ha participado en la reunión de presidentes autonómicos convocada por Pedro Sánchez para abordar la situación creada por el coronavirus Covid-19, ha esbozado algunas quejas.
Aunque primero ha realizado una radiografía de la situación actual de Euskadi. "Los datos de contagio, hospitalización y ocupación de UCIs siguen evolucionando de forma favorable. Segunda: hemos atravesado carencias de suministros que estamos intentando solventar, día a día; y tercera, los fallecimientos siguen constituyendo un mazazo diario, especialmente en las residencias de mayores. Esta es una prioridad como lo siguen siendo la homogeneización de los datos y la información".
Pero el Lehendakari ha solicitado una colaboración efectiva y eficiente al Gobierno central y ha puesto de manifiesto que la certeza es la clave de la coordinación entre comunidades autónomas y el Estado. Ha afirmado que "primero coordinación, y luego, comunicación, y no al revés". Según ha explicado, "necesitamos gestionar certezas y, especialmente, comunicar certezas a la sociedad". De este modo, Urkullu ha solictado a Sánchez certezas en los siguiente ámbitos: infraestructuras, mascarillas, tests, llegada y distribución de suministros, sobre los datos de evolución de la pandemia y la información, sobre los escenarios de aislamiento social, los protocolos de salud en el trabajo, la desescalada o “Plan de vuelta a la normalidad”, los planes de ayuda orientados al empleo y los Acuerdos de Estado que se llevan planteando esta semana.
Las reiteradas y propagandísticas intervenciones televisivas del Gobierno sociocomunista de Pedro Sánchez levantan, semana a semana, más indignación entre los partidos líderes de la oposición.
Pablo Montesinos, vicesecretario de Comunicación del PP, ha explicado que, en opinión de su partido, todo lo que dice Sánchez “es un teatro para intentar ocultar las mentiras del Gobierno de España”. Por ejemplo, “no es de recibo que el Gobierno de España, que hace unos días nos aseguraba que no eran necesarias las mascarillas, ahora nos diga que, para ir a trabajar, hay que utilizarlas. Unas mascarillas que el propio Gobierno reconoce que no tiene”.
El PP reitera que “el PP va a estar al lado del Gobierno para tomar todas las medidas que sean necesarias para salvar vidas”, pero advierte que “no vamos a estar al lado del Gobierno para ser cómplices de las mentiras, ni de las nocivas medidas económicas del Gobierno”. Montesinos también ha trasladado el apoyo del PP a todos los familiares de los fallecidos por el virus y lamenta que “el Gobierno se resista a decretar el luto oficial”.
Por su parte, Santiago Abascal, líder de Vox, ha asegurado que su partido está estudiando presentar una querella contra el Gobierno "negligente y sectario" de Pedro Sánchez por la gestión de la crisis del coronavirus. Para el diputado vasco, el Ejecutivo de extrema-izquierda de PSOE-Podemos se está volviendo "más agresivo y peligroso" contra las libertades debido a su miedo por tener que rendir cuentas ante los españoles, según ha asegurado en una entrevista emitida en el programa Sin Complejos de esRadio. "Las querellas se están elaborando", ha explicado.
Abascal afirma que desde Vox han pedido la dimisión de un Gobierno "absolutamente incapacitado" que ya "ha bajado los brazos en la lucha contra la epidemia y en evitar la destrucción del tejido productivo en España", algo que podría afrontarse si el Estado "asume las nóminas y los ingresos de los españoles a los que no se permite trabajar".
Para Abascal, "los Pactos de la Moncloa no son más que una huida hacia adelante y un intento de hacer una trampa a la oposición para amordazarla con una falsa unidad" y obligarla a vender los relatos del Gobierno, que son los que "han comprado la inmensa mayoría de los medios de comunicación, sobornados con dinero público público confiscado previamente a los autónomos, a las pymes y los trabajadores a los que no se permite trabajar”.
Abascal ha denunciado también que el Ejecutivo socialcomunista "en este momento dedica una parte de sus esfuerzos a la persecución de bulos, cuando el Gobierno es el principal propagador de mentiras en España" y ya "no se conforman con controlar los medios de comunicación, sino que quieren controlar las redes sociales" porque sólo les preocupa que "el único recuerdo que quede de esta triste pandemia sean los aplausos a los sanitarios”.
Pero las críticas no llegan solamente desde la oposición. Desde las fuerzas que apoyan al Gobierno radical de Sánchez, como el PNV, también comienzan a lanzarse algunas protestas. El lehendakari, Iñigo Urkullu, que ha participado en la reunión de presidentes autonómicos convocada por Pedro Sánchez para abordar la situación creada por el coronavirus Covid-19, ha esbozado algunas quejas.
Aunque primero ha realizado una radiografía de la situación actual de Euskadi. "Los datos de contagio, hospitalización y ocupación de UCIs siguen evolucionando de forma favorable. Segunda: hemos atravesado carencias de suministros que estamos intentando solventar, día a día; y tercera, los fallecimientos siguen constituyendo un mazazo diario, especialmente en las residencias de mayores. Esta es una prioridad como lo siguen siendo la homogeneización de los datos y la información".
Pero el Lehendakari ha solicitado una colaboración efectiva y eficiente al Gobierno central y ha puesto de manifiesto que la certeza es la clave de la coordinación entre comunidades autónomas y el Estado. Ha afirmado que "primero coordinación, y luego, comunicación, y no al revés". Según ha explicado, "necesitamos gestionar certezas y, especialmente, comunicar certezas a la sociedad". De este modo, Urkullu ha solictado a Sánchez certezas en los siguiente ámbitos: infraestructuras, mascarillas, tests, llegada y distribución de suministros, sobre los datos de evolución de la pandemia y la información, sobre los escenarios de aislamiento social, los protocolos de salud en el trabajo, la desescalada o “Plan de vuelta a la normalidad”, los planes de ayuda orientados al empleo y los Acuerdos de Estado que se llevan planteando esta semana.