Exaltación comunista en el Congreso
Pablo Iglesias amenaza a una diputada de Vox y a los cuatro millones de españoles que ésta representa, y revela el pozo de miseria moral en el que vive el Gobierno PSOE-Podemos
El Gobierno de extrema izquierda de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, después de paralizar el Parlamento, tras mandar a la Guardia Civil a perseguir la libertad de expresión, una vez puesta la Fiscalía a su servicio y doblegada la Abogacía del Estado, trata ahora de acabar con el último reducto democrático que queda en la España bolivariana que han creado en apenas unos meses silenciando, insultando y amenazando a la oposición. Así lo ha dejado de manifiesto el líder de Podemos y vicepresidente segundo del Ejecutivo, Pablo Iglesias, en un belicoso y agresivo ataque verbal que pasará a la historia de la infamia parlamentaria por su carácter intensamente barriobajero, miserable y violento.
Y es que con un vocabulario acometedor y miserable, indigno de alguien que come y se cobija en casonas de lujo gracias al esfuerzo de todo los españoles, Pablo Iglesias ha acusado a Vox, y a los casi cuatro millones de ciudadanos demócratas que apoyan a esta formación política, de ser una “inmundicia”, de ser “parásitos” y de “representar el odio y la hipocresía”.
El único objetivo del vicepresidente bolivariano con sus insultos: evitar responder sobre la responsabilidad del Gobierno del que forma parte en la gestión de las residencias de mayores, donde han fallecido unos 15.000 ancianos víctimas del Covid-19, según los datos de la diputada María Ruiz.
En su primera intervención parlamentaria, la diputada de Vox afirmó que “el Gobierno debería haber puesto en marcha toda la maquinaria del Estado para evitar una muerte más en estos centros, pero incomprensiblemente no lo hicieron, dejaron las residencias a su suerte, sabiendo que no tenían ni los medios, ni los recursos para hacer frente a esta situación. Dejaron a miles de nuestros mayores encerrados y condenados a muerte”. la parlamentaria de Podemos narró en su turno de palabra cómo se impidió que a los mayores se les trasladara a los hospitale y cómo se les denegaba la ayuda porque no cumplían con los criterios. “Olvidados, solos y sufriendo, así están viviendo nuestros mayores en nuestras residencias”.
En su réplica, Iglesias afirmó que las residencias de ancianos están en manos “de corruptos y fondos buitres”, acusando a Vox de ser “antipatriota” y de representar a “gente con mucho apellido y poca vergüenza”. “No son fascistas, son simplemente, parásitos”, insultó el líder de Podemos a la diputada de Vox. Ésta, por su parte, le pidió en su contestación que “no me hable de buitres, sino de personas mayores que se están muriendo y es su responsabilidad”.
Pero Iglesias volvío a la carga y calificó de “miserable que utilice la muerte para hacer política”, afirmó que Vox representa “el odio, la hipocresía y la miseria moral” y aseguró, en una clara amenaza, “que España se quitará de encima la inmundicia que ustedes representan”.
El Gobierno de extrema izquierda de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, después de paralizar el Parlamento, tras mandar a la Guardia Civil a perseguir la libertad de expresión, una vez puesta la Fiscalía a su servicio y doblegada la Abogacía del Estado, trata ahora de acabar con el último reducto democrático que queda en la España bolivariana que han creado en apenas unos meses silenciando, insultando y amenazando a la oposición. Así lo ha dejado de manifiesto el líder de Podemos y vicepresidente segundo del Ejecutivo, Pablo Iglesias, en un belicoso y agresivo ataque verbal que pasará a la historia de la infamia parlamentaria por su carácter intensamente barriobajero, miserable y violento.
Y es que con un vocabulario acometedor y miserable, indigno de alguien que come y se cobija en casonas de lujo gracias al esfuerzo de todo los españoles, Pablo Iglesias ha acusado a Vox, y a los casi cuatro millones de ciudadanos demócratas que apoyan a esta formación política, de ser una “inmundicia”, de ser “parásitos” y de “representar el odio y la hipocresía”.
El único objetivo del vicepresidente bolivariano con sus insultos: evitar responder sobre la responsabilidad del Gobierno del que forma parte en la gestión de las residencias de mayores, donde han fallecido unos 15.000 ancianos víctimas del Covid-19, según los datos de la diputada María Ruiz.
En su primera intervención parlamentaria, la diputada de Vox afirmó que “el Gobierno debería haber puesto en marcha toda la maquinaria del Estado para evitar una muerte más en estos centros, pero incomprensiblemente no lo hicieron, dejaron las residencias a su suerte, sabiendo que no tenían ni los medios, ni los recursos para hacer frente a esta situación. Dejaron a miles de nuestros mayores encerrados y condenados a muerte”. la parlamentaria de Podemos narró en su turno de palabra cómo se impidió que a los mayores se les trasladara a los hospitale y cómo se les denegaba la ayuda porque no cumplían con los criterios. “Olvidados, solos y sufriendo, así están viviendo nuestros mayores en nuestras residencias”.
En su réplica, Iglesias afirmó que las residencias de ancianos están en manos “de corruptos y fondos buitres”, acusando a Vox de ser “antipatriota” y de representar a “gente con mucho apellido y poca vergüenza”. “No son fascistas, son simplemente, parásitos”, insultó el líder de Podemos a la diputada de Vox. Ésta, por su parte, le pidió en su contestación que “no me hable de buitres, sino de personas mayores que se están muriendo y es su responsabilidad”.
Pero Iglesias volvío a la carga y calificó de “miserable que utilice la muerte para hacer política”, afirmó que Vox representa “el odio, la hipocresía y la miseria moral” y aseguró, en una clara amenaza, “que España se quitará de encima la inmundicia que ustedes representan”.