Declaraciones del Lehendakari
"No se puede mantener el Estado de Alarma de esta manera"
Hoy hemos celebrado la séptima reunión del LABI, el órgano de Coordinación Institucional para hacer frente a la emergencia sanitaria en Euskadi.
Desde el inicio de la crisis hemos analizado la situación, planificado los recursos y compartido la información para hacer frente a la pandemia desde la colaboración.
Hoy hemos constatado la evolución positiva de la situación. El incremento del número de test nos está ayudando a tener un mayor conocimiento de la enfermedad y a mejorar la respuesta sanitaria. La capacidad hospitalaria y de UCI está mejorando con el descenso de ingresos y el incremento de altas. Hemos estabilizado el suministro de material. La ratio de transmisión de la enfermedad se sitúa, ya, por debajo de uno de forma estable.
En la reunión hemos compartido también la base del plan vasco para la recuperación de la actividad económica y social. El “Plan BiziBerri” define nuestra estrategia de acción compartida para los próximos meses. Es un plan ajustado a la realidad de la situación sanitaria, social, territorial y económica de Euskadi.
Hace varias semanas acordé con el presidente Sánchez la creación de dos grupos de trabajo, uno por cada Gobierno. El objetivo era abordar, de forma coordinada, el plan de transición. El Gobierno Vasco va a hacer su aportación en este marco.
Este sigue siendo el modelo de trabajo compartido y colaborativo de las instituciones vascas. El Gobierno español está aplicando otro modelo que NO comparto.
Ayer tuvimos el último ejemplo. Conocimos, a través de la comparecencia pública del presidente Pedro Sánchez, el denominado “Plan de transición hacia una nueva normalidad”.
Desde el primer día ofrecí toda la colaboración y rechacé cualquier intento de imposición. No voy a renunciar a la colaboración y la coordinación. Creo en ese modelo. Es el más efectivo y práctico.
En Euskadi predicamos con el ejemplo.
Vamos a plantear, contrastar, decidir y evaluar las medidas que se necesiten en cada momento. Siempre bajo el criterio de coordinación y colaboración, también con el Estado.
Esta es nuestra respuesta: colaboración.
Nuestra respuesta es seguir mejorando la atención sanitaria eficiente en Euskadi. Algo que, durante casi cuatro décadas, también durante estas semanas, ha sido posible gracias a la estrategia, liderazgo, gestión y compromiso del Sistema Vasco de Salud y Osakidetza.
Nuestra respuesta es seguir tomando medidas compartidas para recuperar la vida social y económica de Euskadi. Seguir garantizando la salud y la seguridad en la actividad económica. Algo que se ha realizado aplicando las recomendaciones y protocolos elaborados por el Gobierno Vasco.
Nuestra respuesta es seguir ofreciendo certezas a las personas, familias, negocios, comercios y empresas. Nuestra respuesta es fortalecer el modelo vasco de gobernanza colaborativa.
Al presidente Pedro Sánchez, ya hasta ahora, le he transmitido que contamos con plena capacidad para gestionar las decisiones, ritmos y fases de la transición a la normalidad en Euskadi.
Le he transmitido que no se puede mantener el mando único y el estado de alarma de esta manera. Lo importante es compartir, aunar criterios y colaborar, no mantener un estado de tutela permanente.
El mando único y el estado de alarma se están ejerciendo sin tener en cuenta la capacidad demostrada de autogobierno de cada Comunidad. En Euskadi, llevamos décadas gestionando correctamente la Sanidad, la Educación o la Protección Social. Somos una referencia en el Estado. El mando único no está ofreciendo un modelo mejor y más eficaz. Al contrario.
Apelo a analizar la plena capacidad de la legislación ordinaria. En concreto la Ley Orgánica de Salud Pública de 1986 y la Ley 33/2011 General de Salud Pública. Constituyen un marco para gestionar esta crisis a partir de ahora, sin necesidad de prorrogar más la situación de excepcionalidad que representa el Estado de Alarma.
El Gobierno Español, en lugar de avanzar en la construcción común desde el respeto a la pluralidad, plantea un “modelo de Estado provincial” que representa un retroceso centralizador y una anomalía incomprensible. Un modelo que no respeta ni reconoce la plurinacionalidad ni el Estado autonómico; y menos, la capacidad de nuestro autogobierno singular.
La gestión de esta crisis se puede desarrollar de forma armónica con el modelo autonómico, el autogobierno y el espíritu de coordinación y cooperación. Se ha tomado la decisión contraria. De forma improcedente. Sin comunicación. Sin atender a razones de eficacia y gestión.
El Gobierno y las instituciones vascas instamos al presidente Pedro Sánchez y al Gobierno español a establecer un mecanismo de interlocución bilateral para coordinar la toma de decisiones que afecten a Euskadi.
El desarrollo de cualquier Plan en Euskadi solo será posible con el liderazgo, implicación y gestión de las instituciones vascas. Estamos planteando, desde el primer día, Coordinación, Colaboración y Corresponsabilidad. Es el modelo que conocemos y ejercemos en Euskadi.
Este es el modelo más eficaz para vencer al virus y reconstruir nuestro país.
Hoy hemos celebrado la séptima reunión del LABI, el órgano de Coordinación Institucional para hacer frente a la emergencia sanitaria en Euskadi.
Desde el inicio de la crisis hemos analizado la situación, planificado los recursos y compartido la información para hacer frente a la pandemia desde la colaboración.
Hoy hemos constatado la evolución positiva de la situación. El incremento del número de test nos está ayudando a tener un mayor conocimiento de la enfermedad y a mejorar la respuesta sanitaria. La capacidad hospitalaria y de UCI está mejorando con el descenso de ingresos y el incremento de altas. Hemos estabilizado el suministro de material. La ratio de transmisión de la enfermedad se sitúa, ya, por debajo de uno de forma estable.
En la reunión hemos compartido también la base del plan vasco para la recuperación de la actividad económica y social. El “Plan BiziBerri” define nuestra estrategia de acción compartida para los próximos meses. Es un plan ajustado a la realidad de la situación sanitaria, social, territorial y económica de Euskadi.
Hace varias semanas acordé con el presidente Sánchez la creación de dos grupos de trabajo, uno por cada Gobierno. El objetivo era abordar, de forma coordinada, el plan de transición. El Gobierno Vasco va a hacer su aportación en este marco.
Este sigue siendo el modelo de trabajo compartido y colaborativo de las instituciones vascas. El Gobierno español está aplicando otro modelo que NO comparto.
Ayer tuvimos el último ejemplo. Conocimos, a través de la comparecencia pública del presidente Pedro Sánchez, el denominado “Plan de transición hacia una nueva normalidad”.
Desde el primer día ofrecí toda la colaboración y rechacé cualquier intento de imposición. No voy a renunciar a la colaboración y la coordinación. Creo en ese modelo. Es el más efectivo y práctico.
En Euskadi predicamos con el ejemplo.
Vamos a plantear, contrastar, decidir y evaluar las medidas que se necesiten en cada momento. Siempre bajo el criterio de coordinación y colaboración, también con el Estado.
Esta es nuestra respuesta: colaboración.
Nuestra respuesta es seguir mejorando la atención sanitaria eficiente en Euskadi. Algo que, durante casi cuatro décadas, también durante estas semanas, ha sido posible gracias a la estrategia, liderazgo, gestión y compromiso del Sistema Vasco de Salud y Osakidetza.
Nuestra respuesta es seguir tomando medidas compartidas para recuperar la vida social y económica de Euskadi. Seguir garantizando la salud y la seguridad en la actividad económica. Algo que se ha realizado aplicando las recomendaciones y protocolos elaborados por el Gobierno Vasco.
Nuestra respuesta es seguir ofreciendo certezas a las personas, familias, negocios, comercios y empresas. Nuestra respuesta es fortalecer el modelo vasco de gobernanza colaborativa.
Al presidente Pedro Sánchez, ya hasta ahora, le he transmitido que contamos con plena capacidad para gestionar las decisiones, ritmos y fases de la transición a la normalidad en Euskadi.
Le he transmitido que no se puede mantener el mando único y el estado de alarma de esta manera. Lo importante es compartir, aunar criterios y colaborar, no mantener un estado de tutela permanente.
El mando único y el estado de alarma se están ejerciendo sin tener en cuenta la capacidad demostrada de autogobierno de cada Comunidad. En Euskadi, llevamos décadas gestionando correctamente la Sanidad, la Educación o la Protección Social. Somos una referencia en el Estado. El mando único no está ofreciendo un modelo mejor y más eficaz. Al contrario.
Apelo a analizar la plena capacidad de la legislación ordinaria. En concreto la Ley Orgánica de Salud Pública de 1986 y la Ley 33/2011 General de Salud Pública. Constituyen un marco para gestionar esta crisis a partir de ahora, sin necesidad de prorrogar más la situación de excepcionalidad que representa el Estado de Alarma.
El Gobierno Español, en lugar de avanzar en la construcción común desde el respeto a la pluralidad, plantea un “modelo de Estado provincial” que representa un retroceso centralizador y una anomalía incomprensible. Un modelo que no respeta ni reconoce la plurinacionalidad ni el Estado autonómico; y menos, la capacidad de nuestro autogobierno singular.
La gestión de esta crisis se puede desarrollar de forma armónica con el modelo autonómico, el autogobierno y el espíritu de coordinación y cooperación. Se ha tomado la decisión contraria. De forma improcedente. Sin comunicación. Sin atender a razones de eficacia y gestión.
El Gobierno y las instituciones vascas instamos al presidente Pedro Sánchez y al Gobierno español a establecer un mecanismo de interlocución bilateral para coordinar la toma de decisiones que afecten a Euskadi.
El desarrollo de cualquier Plan en Euskadi solo será posible con el liderazgo, implicación y gestión de las instituciones vascas. Estamos planteando, desde el primer día, Coordinación, Colaboración y Corresponsabilidad. Es el modelo que conocemos y ejercemos en Euskadi.
Este es el modelo más eficaz para vencer al virus y reconstruir nuestro país.