No había acordado nada con el Ejecutivo central, a pesar de ser socio preferente del mismo
El Gobierno Vasco dice ahora que los alumnos no volverán a las aulas hasta el 25 de mayo
El Gobierno Vasco se suma al caos institucional, político, social y económico creado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, del que es socio preferente, y ha decidido retrasar al 25 de mayo la vuelta a las aulas de manera presencial de los alumnos de Bachillerato que estaba prevista para el próximo lunes día 18.
Desde la Administración encabezada por Iñigo Urkullu, que parece más empeñada en garantizar la celebración de las próximas elecciones autónómicas que en gestionar las consecuencias dramáticas de la pandemia de Covid-19 en Euskadi, se argumenta que el cambio de fecha se realiza para no "tensionar más" a la comunidad educativa y no trasladarle la "incertidumbre jurídica" que existe. Pero lo único seguro es que apenas cuatro días antes del hipotético comienzo de las clases, el Ejecutivo autonómico todavía no había acordado con el Gobierno de extrema-izquierda de PSOE-Podemos el regreso de las aulas.
El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha echado balones fuera y ha explicado que, en su opinión, y después de dos meses, resulta "pertinente" retrasar el calendario de apertura de las aulas una semana más porque el Gobierno español todavía no ha concretado en una norma el acuerdo alcanzado con el vasco para abordar con garantías jurídicas esa vuelta. ”Preferimos posponer una semana la propuesta inicial y trabajar a lo largo de la semana que viene con más tranquilidad y sosiego para planificar el regreso a las aulas de manera más razonable y pausada", ha indicado.
Antes de este nuevo cambio que desconcierta nuevamente a los ciudadanos y a la comunidad educativa, el Departamento de Educación del Gobierno Vasco había fijado para el próximo lunes la vuelta a las clases presenciales de los alumnos de Bachillerato, aunque había dado libertad a los centros para decidir si retomaban la asistencia presencial a las aulas, a la par que establecía una serie de medidas de prevención para evitar el contagio del coronavirus.
El Gobierno Vasco se suma al caos institucional, político, social y económico creado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, del que es socio preferente, y ha decidido retrasar al 25 de mayo la vuelta a las aulas de manera presencial de los alumnos de Bachillerato que estaba prevista para el próximo lunes día 18.
Desde la Administración encabezada por Iñigo Urkullu, que parece más empeñada en garantizar la celebración de las próximas elecciones autónómicas que en gestionar las consecuencias dramáticas de la pandemia de Covid-19 en Euskadi, se argumenta que el cambio de fecha se realiza para no "tensionar más" a la comunidad educativa y no trasladarle la "incertidumbre jurídica" que existe. Pero lo único seguro es que apenas cuatro días antes del hipotético comienzo de las clases, el Ejecutivo autonómico todavía no había acordado con el Gobierno de extrema-izquierda de PSOE-Podemos el regreso de las aulas.
El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha echado balones fuera y ha explicado que, en su opinión, y después de dos meses, resulta "pertinente" retrasar el calendario de apertura de las aulas una semana más porque el Gobierno español todavía no ha concretado en una norma el acuerdo alcanzado con el vasco para abordar con garantías jurídicas esa vuelta. ”Preferimos posponer una semana la propuesta inicial y trabajar a lo largo de la semana que viene con más tranquilidad y sosiego para planificar el regreso a las aulas de manera más razonable y pausada", ha indicado.
Antes de este nuevo cambio que desconcierta nuevamente a los ciudadanos y a la comunidad educativa, el Departamento de Educación del Gobierno Vasco había fijado para el próximo lunes la vuelta a las clases presenciales de los alumnos de Bachillerato, aunque había dado libertad a los centros para decidir si retomaban la asistencia presencial a las aulas, a la par que establecía una serie de medidas de prevención para evitar el contagio del coronavirus.