Entre 1.200 y 2.000 "combatientes" habrían viajado a Siria desde la UE
Los “yihadistas” retornados de Siria provocan una profunda preocupación en la UE
El último informe sobre actividad terrorista en Europa, elaborado por Europol, ha provocado una honda preocupación en el Consejo de la Unión Europea que, en estos momentos, considera que los “combatientes europeos”, en la mayor parte de los casos musulmanes, que han viajado a Siria para participar en la guerra contra Bashar al-Asad son, a su vuelta, una amenaza cierta para los Estados miembros de la UE. Según Europol, estas personas, de regreso a sus países de origen, pueden tratar de crear células terroristas de carácter logístico, financiero o de reclutamiento, y pueden servir de modelo a otros miembros dentro de las comunidades extremistas.
La Oficina Europa de Policía considera que es muy probable que la determinación de los “yihadistas” retornados para cometer atentados en Europa se haya reforzado en Siria, país donde, además, han podido adquirir con relativa facilidad habilidades y contactos para llevar a cabo ataques en el interior de la UE.
No existe una cifra oficial sobre el número de ciudadanos comunitarios que han viajado a Siria para participar en el conflicto bélico que sacude a este país, pero las estimaciones más fiables indican que, a finales de 2013, serían entre 1.200 y 2.000 personas las que habrían cruzado la frontera del país del Tigris y el Éufrates.
De hecho, la relativamente sencilla accesibilidad de Siria a través de la frontera turca es, para las fuerzas de seguridad europeas, el principal motivo por el que los “combatientes” islamistas afincados en la UE viajan a este país en vez de a otros como Afganistán, Malí, Somalia o Yemen.
La amenaza islamista formada por los “lobos solitarios” (terroristas que trabajan por su cuenta y con apenas conexión con otras organizaciones delictivas) se hizo real el pasado año en la Unión Europea con la desarticulación de planes terroristas en países como Bélgica, Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido. Entre los detenidos, solamente un pequeño número parecía estar conectado a grupos terroristas de fuera de la UE y varios de ellos tenían antecedentes penales.
Europol recuerda que, entre junio y septiembre de 2013, nueve personas fueron detenidas en Ceuta (España), bajo sospecha de pertenecer a una red dedicada al envío de voluntarios a Siria para luchar junto a grupos como “Jabhat al- Nusra” o el “Estado Islámico en Irak y el Levante (ISIL)”. La red había tenido vínculos con cómplices en Marruecos, Bélgica y Turquía, y había enviado con éxito al menos a 12 jóvenes de España y Marruecos a Siria, algunos de los cuales murieron en ataques suicidas o de combate.
El año pasado se produjo una serie importante de arrestos y condenas judiciales en toda Europa, en países como Bélgica, Francia, Alemania, Países Bajos o el Reino Unido, en relación a la organización de viajes a Siria para participar en el conflicto bélico. La Policía Europea cree que muchas de estas personas se habían autofinanciado su viaje a Siria, utilizando para el mismo vehículos alquilados que posteriormente fueron robados y utilizados como medio de transporte hacia la zona de conflicto. En otras ocasiones, los “yihadistas” han viajado utilizando los servicios de bandas delictivas organizadas, que les facilitan documentos falsos; otras veces se han infiltrado en misiones legales de ayuda humanitaria, y en no pocos casos han contado con el apoyo de redes específicas de colaboradores que son las encargadas de introducir a los “combatientes” en los grupos de lucha más radicales.
El último informe sobre actividad terrorista en Europa, elaborado por Europol, ha provocado una honda preocupación en el Consejo de la Unión Europea que, en estos momentos, considera que los “combatientes europeos”, en la mayor parte de los casos musulmanes, que han viajado a Siria para participar en la guerra contra Bashar al-Asad son, a su vuelta, una amenaza cierta para los Estados miembros de la UE. Según Europol, estas personas, de regreso a sus países de origen, pueden tratar de crear células terroristas de carácter logístico, financiero o de reclutamiento, y pueden servir de modelo a otros miembros dentro de las comunidades extremistas.
La Oficina Europa de Policía considera que es muy probable que la determinación de los “yihadistas” retornados para cometer atentados en Europa se haya reforzado en Siria, país donde, además, han podido adquirir con relativa facilidad habilidades y contactos para llevar a cabo ataques en el interior de la UE.
No existe una cifra oficial sobre el número de ciudadanos comunitarios que han viajado a Siria para participar en el conflicto bélico que sacude a este país, pero las estimaciones más fiables indican que, a finales de 2013, serían entre 1.200 y 2.000 personas las que habrían cruzado la frontera del país del Tigris y el Éufrates.
De hecho, la relativamente sencilla accesibilidad de Siria a través de la frontera turca es, para las fuerzas de seguridad europeas, el principal motivo por el que los “combatientes” islamistas afincados en la UE viajan a este país en vez de a otros como Afganistán, Malí, Somalia o Yemen.
La amenaza islamista formada por los “lobos solitarios” (terroristas que trabajan por su cuenta y con apenas conexión con otras organizaciones delictivas) se hizo real el pasado año en la Unión Europea con la desarticulación de planes terroristas en países como Bélgica, Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido. Entre los detenidos, solamente un pequeño número parecía estar conectado a grupos terroristas de fuera de la UE y varios de ellos tenían antecedentes penales.
Europol recuerda que, entre junio y septiembre de 2013, nueve personas fueron detenidas en Ceuta (España), bajo sospecha de pertenecer a una red dedicada al envío de voluntarios a Siria para luchar junto a grupos como “Jabhat al- Nusra” o el “Estado Islámico en Irak y el Levante (ISIL)”. La red había tenido vínculos con cómplices en Marruecos, Bélgica y Turquía, y había enviado con éxito al menos a 12 jóvenes de España y Marruecos a Siria, algunos de los cuales murieron en ataques suicidas o de combate.
El año pasado se produjo una serie importante de arrestos y condenas judiciales en toda Europa, en países como Bélgica, Francia, Alemania, Países Bajos o el Reino Unido, en relación a la organización de viajes a Siria para participar en el conflicto bélico. La Policía Europea cree que muchas de estas personas se habían autofinanciado su viaje a Siria, utilizando para el mismo vehículos alquilados que posteriormente fueron robados y utilizados como medio de transporte hacia la zona de conflicto. En otras ocasiones, los “yihadistas” han viajado utilizando los servicios de bandas delictivas organizadas, que les facilitan documentos falsos; otras veces se han infiltrado en misiones legales de ayuda humanitaria, y en no pocos casos han contado con el apoyo de redes específicas de colaboradores que son las encargadas de introducir a los “combatientes” en los grupos de lucha más radicales.