Los Servicios de Ciudadanía y de Inmigración de Estados Unidos han actualizado su guía política para la inadmisibilidad en este país “por motivos de membresía o afiliación con el Partido Comunista o cualquier otro partido totalitario”.

Las directrices actualizadas, que pueden consultarse con detalle en este documento oficial del Ejecutivo norteamericano, señalan explícitamente que “ser miembro o estar afiliado al Partido Comunista o cualquier otro partido totalitario es incongruente e incompatible con el Juramento de Lealtad a los Estados Unidos, lo cual incluye jurar ‘apoyar y defender la Constitución y las leyes de Estados Unidos’.

El documento concluye que, por lo general, y salvo las excepciones detalladamente recogidas en la norma, “cualquier posible inmigrante que actualmente sea o haya sido miembro o afiliado del Partido Comunista o de cualquier otro partido totalitario (subdivisión o afiliado a éstos), nacional o en el extranjero, es inadmisible a Estados Unidos”.

Esta orden afectaría, por ejemplo, a numerosos miembros del Gobierno español de PSOE-Podemos, formado por personas que directamente forman parte del Partido Comunista, como el ministro de Consumo, Alberto Garzón, o que han expresado de una forma relevante su apoyo a formaciones comunistas, como el vicepresidente Pablo Iglesias o la ministra de Igualdad, Irene Montero. Curioso es el caso de Manuel Castells, ministro de Universidades que en los años setenta participó activamente en la elaboración del programa electoral del Partido Comunista español, y que mantiene una segunda residencia en USA, a la que quizás no pueda volver, según la actualización normativa llevada a cabo por el Gobierno norteamericano.