Dentro de las formas de financiación más demandadas en los últimos años se encuentran lo que conocemos como créditos rápidos, donde también están incluidos los minicréditos. Estos poseen una característica muy particular: su obtención se gestiona online, son créditos en línea que puedes hacer desde la comodidad de tu hogar. Una excelente referencia sobre el uso y disposición de créditos en línea es finguru.es

La tendencia del mercado ha sido, en los últimos tiempos marcados por la pandemia, el crecimiento de las solicitudes que buscan obtener un crédito en línea, las peticiones han llegado a marcar un incremento que oscila al alza en los periodos marcados por el estado de alarma, siendo producto de la anómala situación que se vive en todo el planeta. Estos datos los aporta la Agencia Negociadora, fintech especializada en estos temas, según los cuales en el periodo que va del 14 de marzo hasta el 21 de junio de 2020 el incremento fue de un 19% y en el periodo de un poco más de un mes, del 21 de junio hasta el 31 de julio 2020, las solicitudes se ampliaron en un 17%. Pero, además han constatado que igualmente han crecido en un 49% la proporción de operaciones aprobadas frente al número de peticiones hechas. 

La evolución significativa en la financiación, que se ha enfocado en buena medida en este tipo de préstamos, responde al aumento de las mayores necesidades de liquidez a la vez que al incremento de los riesgos de refinanciación, que han motivado las políticas de provisión de liquidez a entidades de crédito del Banco Central Europeo. (Boletín Económico, 4/2020, Banco de España).

Dentro de las características de los préstamos en línea, existen algunas que resultan especialmente atractivas, sobre todo porque permiten obtener el crédito en un lapso de tiempo muy breve para aquellos que los soliciten. Dichos créditos, benefician a las personas que necesiten tener que realizar pagos de inmediato, para afrontar cualquier tipo de urgencia. Pero no sólo es provechoso en estos casos, sino que favorece a cualquiera que desee disponer de tales recursos para otros propósitos.

La enorme demanda de los préstamos en línea y la rapidez con la que se produce su gestión y materialización, ha provocado que entidades financieras de reconocida trayectoria se sumen a la modalidad crediticia. Lo que antes era apenas un producto de empresas que trabajaban con capitales privados, significa ahora una amplia oferta, extendida y comercializada por un número creciente de compañías.

Y es comprensible su auge porque los requisitos elementales que se exigen ante un préstamo de este tipo son: ser mayor de 21 años; se requiere poca documentación (fotocopia de DNI, el número de su cuenta corriente, fotocopia de nómina de trabajo o pensión, en algunos tipos de estos préstamos no se exigen nóminas ni avales….,  etc.); es requerimiento no aparecer en registros de morosos como los listados de ASNEF, y, en algunos casos, es también indispensable residir en España.

Por si no fuera suficiente reclamo, los préstamos en línea poseen ventajas enormes por la flexibilidad de sus condiciones: rapidez en la gestión de sus trámites que se hacen online o, incluso, telefónicamente y, lo mejor, la agilidad que se produce para disponer en nuestras cuentas del importe del crédito solicitado. Dados estos motivos los préstamos personales son una solución a medida para muchas de nuestras necesidades de crédito.