Cómo hacer un colecho con tu bebé recién nacido
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La llegada de un bebé siempre es una alegría, pero también es verdad que trae grandes cambios a nuestra vida. Por eso hay que pensar en todo lo que necesitamos para disfrutar de esos primeros días con nuestro pequeñín. Una de las cosas que se ha de tener en cuenta es si queremos disfrutar del colecho desde el principio.
El colecho es, simplemente, compartir nuestro espacio de descanso con el pequeño recién llegado. No es necesario que sea en la misma cama, sino que se suelen utilizar la cunas de colecho. Cunas pensadas para que el bebé esté en la misma habitación que los papás. Así, estos pueden estar atentos a sus necesidades y a ofrecerle su cariño de manera inmediata.
Cunas de colecho, una manera de descansar juntos
Las cunas de colecho son una gran idea para tener al bebé cerca en todo momento, incluso cuando se duerme. Es práctico, por ejemplo, a la hora de dar de mamar al pequeño. No hace falta levantarse e ir hasta otra habitación, ya que está junto a la mamá. Esta solo tiene que acercarse a la cuna y acogerlo entre sus brazos.
La tranquilidad que ofrece la cercanía del bebé hace que papás y pequeños descansen mucho mejor, seguros y con la presencia siempre agradable de los papás. Durante las primeras semanas, muchas parejas optan por una minicuna. Es de menor tamaño y permite un mejor acceso al pequeño. Al ser todavía muy pequeño, no se mueve mucho y se limita a descansar y pedir alimento.
En ese momento, solo necesita un lugar confortable para dormir, ya que no se pone en pie ni se mueve mucho. Las minicunas para colecho tienen un diseño práctico, pero hay muchos modelos para elegir y hacer que se ajusten a la decoración del dormitorio.
Cunas de colecho para niños más mayores
Pero no solo se practica el colecho durante las primeras semanas de vida del bebé. Hay papás que prefieren disfrutar de la cercanía del pequeño durante más tiempo. Así que también hay cunas de colecho grandes, pensadas para bebés que ya se mueven, dan un poquito más de guerra y se ponen de pie.
Son cunas de colecho de mayor tamaño, pensadas para bebés que ya se mueven y quieren atención. Todo pensado para que la comodidad y la seguridad estén presentes para que papás y bebé sigan disfrutando de la compañía mutua.
Opciones para vestir la cuna
Para vestir cualquiera de estos modelos, bien sea una minicuna o una cuna de colecho, puedes encontrar una gran variedad de edredones para cunas de bebé. Porque la comodidad y la seguridad no están reñidas con la elegancia de telas y diseños muy diferentes, para vestir estas cunas con la calidad que buscamos para nuestro pequeño.
El colecho puede practicarse desde solo unos meses y después trasladar al pequeño hasta su propia habitación cuando tenga unos meses y exija un poco más de movilidad o mantenerlo durante varios años. En este caso, se necesita una cuna que se adapte a su crecimiento, así que busca el modelo que se ajuste a tus necesidades y disfruta de tu peque durante mucho tiempo.
La llegada de un bebé siempre es una alegría, pero también es verdad que trae grandes cambios a nuestra vida. Por eso hay que pensar en todo lo que necesitamos para disfrutar de esos primeros días con nuestro pequeñín. Una de las cosas que se ha de tener en cuenta es si queremos disfrutar del colecho desde el principio.
El colecho es, simplemente, compartir nuestro espacio de descanso con el pequeño recién llegado. No es necesario que sea en la misma cama, sino que se suelen utilizar la cunas de colecho. Cunas pensadas para que el bebé esté en la misma habitación que los papás. Así, estos pueden estar atentos a sus necesidades y a ofrecerle su cariño de manera inmediata.
Cunas de colecho, una manera de descansar juntos
Las cunas de colecho son una gran idea para tener al bebé cerca en todo momento, incluso cuando se duerme. Es práctico, por ejemplo, a la hora de dar de mamar al pequeño. No hace falta levantarse e ir hasta otra habitación, ya que está junto a la mamá. Esta solo tiene que acercarse a la cuna y acogerlo entre sus brazos.
La tranquilidad que ofrece la cercanía del bebé hace que papás y pequeños descansen mucho mejor, seguros y con la presencia siempre agradable de los papás. Durante las primeras semanas, muchas parejas optan por una minicuna. Es de menor tamaño y permite un mejor acceso al pequeño. Al ser todavía muy pequeño, no se mueve mucho y se limita a descansar y pedir alimento.
En ese momento, solo necesita un lugar confortable para dormir, ya que no se pone en pie ni se mueve mucho. Las minicunas para colecho tienen un diseño práctico, pero hay muchos modelos para elegir y hacer que se ajusten a la decoración del dormitorio.
Cunas de colecho para niños más mayores
Pero no solo se practica el colecho durante las primeras semanas de vida del bebé. Hay papás que prefieren disfrutar de la cercanía del pequeño durante más tiempo. Así que también hay cunas de colecho grandes, pensadas para bebés que ya se mueven, dan un poquito más de guerra y se ponen de pie.
Son cunas de colecho de mayor tamaño, pensadas para bebés que ya se mueven y quieren atención. Todo pensado para que la comodidad y la seguridad estén presentes para que papás y bebé sigan disfrutando de la compañía mutua.
Opciones para vestir la cuna
Para vestir cualquiera de estos modelos, bien sea una minicuna o una cuna de colecho, puedes encontrar una gran variedad de edredones para cunas de bebé. Porque la comodidad y la seguridad no están reñidas con la elegancia de telas y diseños muy diferentes, para vestir estas cunas con la calidad que buscamos para nuestro pequeño.
El colecho puede practicarse desde solo unos meses y después trasladar al pequeño hasta su propia habitación cuando tenga unos meses y exija un poco más de movilidad o mantenerlo durante varios años. En este caso, se necesita una cuna que se adapte a su crecimiento, así que busca el modelo que se ajuste a tus necesidades y disfruta de tu peque durante mucho tiempo.