Junto con el hijastro de John Kerry
El hijo de Biden invirtió en una empresa de prevención de pandemias asociada con el laboratorio chino de Wuhan donde pudo haber surgido el coronavirus
![[Img #20269]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/07_2021/6962_hunter-biden.png)
Metabiota, una empresa de análisis, seguimiento y respuesta a pandemias que colaboró con la Alianza EcoHealth de Peter Daszak y el Instituto de Virología de Wuhan, fue uno de los principales patrocinadores financieros de Rosemont Seneca Technology Partners, un grupo de inversión dirigido por Hunter Biden, el polémico hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden (Partido Demócrata).
Rosemont Seneca Technology Partners (RSTP) fue una escisión de Rosemont Capital, una empresa de capital riesgo creada por Biden y el hijastro de John Kerry en 2009. Biden fue director general de la compañía.
Una de las empresas mencionadas en versiones archivadas de la cartera de la firma es Metabiota, una startup con sede en San Francisco que afirma detectar, rastrear y analizar nuevas enfermedades infecciosas, según reveló The National Pulse.
Tal y como se informa desde la web Bles, según los informes financieros, RSTP dirigió la primera ronda de recaudación de fondos de la empresa, que ascendió a 30 millones de dólares. Neil Callahan, antiguo director general y cofundador de RSTP -un nombre que aparece con frecuencia en el disco duro del ordenador de Hunter Biden que fue investigado por el FBI- es también miembro del Consejo de Asesores de Metabiota.
Desde 2014, Metabiota ha sido socio de EcoHealth Alliance como parte de la iniciativa “Predict” de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), que tiene como objetivo “predecir y prevenir las amenazas globales de enfermedades emergentes”. Hay que recordar que el máximo responsable de EcoHealth, Peter Daszak, ha sido recientemente retirado del panel de Lancet Covid-19 debido a los numerosos conflictos de intereses descubiertos como “colaborador desde largo tiempo” del Instituto de Virología de Wuhan donde posiblemente surgió el Covid-19. De hecho, Daszak es una figura clave en los presuntos orígenes del Covid-19 en un laboratorio, ya que su EcoHealth Alliance utilizó fondos públicos para colaborar en la investigación del coronavirus de los murciélagos en Wuhan junto al Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID), dirigido por Anthony Fauci, que en Estados Unidos desempeña el mismo papel que Fernando Simón en España.
Fruto de esta colaboración, investigadores de Metabiota, EcoHealth Alliance y el Instituto de Virología de Wuhan colaboraron en un trabajo sobre las enfermedades infecciosas de los murciélagos en China. Según varias investigaciones, “en el Instituto de Virología de Wuhan, de la Academia China de Ciencias, se realizaron ensayos de RT-PCR sensibles y de amplia reacción”.
Los investigadores de EcoHealth Alliance y Metabiota también colaboraron en presentaciones sobre cómo “convivir de forma segura con los murciélagos” y en estudios que relacionan las nuevas epidemias de enfermedades infecciosas con las instalaciones de comercio de fauna silvestre, como los “mercados húmedos”.
“El comercio de fauna silvestre puede facilitar la transmisión de enfermedades zoonóticas y representa una amenaza para la salud humana y las economías en Asia, destacada por el brote de coronavirus del SARS de 2003, donde un mercado de fauna silvestre chino facilitó la transmisión del patógeno”, señala el documento de 2016.
Metabiota, una empresa de análisis, seguimiento y respuesta a pandemias que colaboró con la Alianza EcoHealth de Peter Daszak y el Instituto de Virología de Wuhan, fue uno de los principales patrocinadores financieros de Rosemont Seneca Technology Partners, un grupo de inversión dirigido por Hunter Biden, el polémico hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden (Partido Demócrata).
Rosemont Seneca Technology Partners (RSTP) fue una escisión de Rosemont Capital, una empresa de capital riesgo creada por Biden y el hijastro de John Kerry en 2009. Biden fue director general de la compañía.
Una de las empresas mencionadas en versiones archivadas de la cartera de la firma es Metabiota, una startup con sede en San Francisco que afirma detectar, rastrear y analizar nuevas enfermedades infecciosas, según reveló The National Pulse.
Tal y como se informa desde la web Bles, según los informes financieros, RSTP dirigió la primera ronda de recaudación de fondos de la empresa, que ascendió a 30 millones de dólares. Neil Callahan, antiguo director general y cofundador de RSTP -un nombre que aparece con frecuencia en el disco duro del ordenador de Hunter Biden que fue investigado por el FBI- es también miembro del Consejo de Asesores de Metabiota.
Desde 2014, Metabiota ha sido socio de EcoHealth Alliance como parte de la iniciativa “Predict” de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), que tiene como objetivo “predecir y prevenir las amenazas globales de enfermedades emergentes”. Hay que recordar que el máximo responsable de EcoHealth, Peter Daszak, ha sido recientemente retirado del panel de Lancet Covid-19 debido a los numerosos conflictos de intereses descubiertos como “colaborador desde largo tiempo” del Instituto de Virología de Wuhan donde posiblemente surgió el Covid-19. De hecho, Daszak es una figura clave en los presuntos orígenes del Covid-19 en un laboratorio, ya que su EcoHealth Alliance utilizó fondos públicos para colaborar en la investigación del coronavirus de los murciélagos en Wuhan junto al Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID), dirigido por Anthony Fauci, que en Estados Unidos desempeña el mismo papel que Fernando Simón en España.
Fruto de esta colaboración, investigadores de Metabiota, EcoHealth Alliance y el Instituto de Virología de Wuhan colaboraron en un trabajo sobre las enfermedades infecciosas de los murciélagos en China. Según varias investigaciones, “en el Instituto de Virología de Wuhan, de la Academia China de Ciencias, se realizaron ensayos de RT-PCR sensibles y de amplia reacción”.
Los investigadores de EcoHealth Alliance y Metabiota también colaboraron en presentaciones sobre cómo “convivir de forma segura con los murciélagos” y en estudios que relacionan las nuevas epidemias de enfermedades infecciosas con las instalaciones de comercio de fauna silvestre, como los “mercados húmedos”.
“El comercio de fauna silvestre puede facilitar la transmisión de enfermedades zoonóticas y representa una amenaza para la salud humana y las economías en Asia, destacada por el brote de coronavirus del SARS de 2003, donde un mercado de fauna silvestre chino facilitó la transmisión del patógeno”, señala el documento de 2016.