Decenas de miles de personas han participado por tercer sábado consecutivo en las protestas masivas que tienen lugar en Francia para protestar contra la imposición totalitaria del certificado de vacunación impuesto por el Gobierno de Emmanuel Macron. Grandes manifestaciones han tenido lugar en más de 200 puntos de 150 ciudades galas, incluidas París, Marsella, Draguignan, Poitiers, Toulouse, Aix-en-Provence, Montpellier, Burdeos, Niza, Metz, Nantes o Pau , entre otras muchas. Según los resultados de un reciente estudio de opinión realizado por Harris Interactive, casi la mitad de los franceses aseguran que apoyan las manifestaciones contra la introducción de un pase de salud. Más de 3.000 policías y gendarmes se han movilizado para supervisar a los manifestantes y asegurar los lugares sensibles.

En las manifestaciones, donde pueden encontrarse numerosos “chalecos amarillos”, los manifestantes cargan contra un pase de salud que consideran "liberticida" y claman, con gritos de "¡libertad!, ¡libertad!" contra lo que consideran "una dictadura".

El pase de salud, que exige estar vacunado para acceder a múltiples ámbitos, ha sido impuesto por el Gobierno de Emmanuel Macron y fue aprobado definitivamente el domingo por la noche, después de seis días de acalorado debate en la Asamblea Nacional y en el Senado. Aplicado ya en espacios culturales y de ocio desde el 21 de julio, su extensión a cafés, ferias, exposiciones, restaurantes y trenes está prevista para el 9 de agosto. Mientras tanto, el Consejo Constitucional (similar al Tribunal Constitucional español) emitirá su decisión sobre la ley el 5 de agosto.