Hoteles Literarios (1)
Las aventuras de James Bond en el Hotel Palacio Estoril
Durante la Segunda Guerra Mundial, la localidad portuguesa de Estoril, cercana a Lisboa, se convirtió en uno de los lugares preferidos por la aristocracia europea.
Durante aquella época, numerosos empresarios, políticos, príncipes, intelectuales, artistas y espías se paseaban por los pasillos de este magnífico y señorial Hotel Palacio. De hecho, este alojamiento fue inaugurado por Salazar en los años 30 del pasado siglo para luego convertirse en el gran cuartel general de los aliados y amigos de éstos en la capital portuguesa. Después de la gran guerra, el Hotel Palacio se transformaría en la prolongación de Villa Giralda y, de alguna forma, en el centro de reunión de muchas familias reales exiliadas, destacando la española, como se puede ver en la Galería Real del Hotel.
Por este motivo no es de extrañar que el escritor Ian Fleming, cliente fiel del hotel, se inspirara en él a la hora de escribir algunas de las famosas novelas de la saga de James Bond. Tanto es así que, en 1969, este hotel sirvió como escenario para rodar una de las grandes películas dedicadas a este personaje, 007 Al servicio secreto de su Majestad. Famosos son también los "Dry Martini" del bar del hotel, su spa y su centro termal.
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Durante la Segunda Guerra Mundial, la localidad portuguesa de Estoril, cercana a Lisboa, se convirtió en uno de los lugares preferidos por la aristocracia europea.
Durante aquella época, numerosos empresarios, políticos, príncipes, intelectuales, artistas y espías se paseaban por los pasillos de este magnífico y señorial Hotel Palacio. De hecho, este alojamiento fue inaugurado por Salazar en los años 30 del pasado siglo para luego convertirse en el gran cuartel general de los aliados y amigos de éstos en la capital portuguesa. Después de la gran guerra, el Hotel Palacio se transformaría en la prolongación de Villa Giralda y, de alguna forma, en el centro de reunión de muchas familias reales exiliadas, destacando la española, como se puede ver en la Galería Real del Hotel.
Por este motivo no es de extrañar que el escritor Ian Fleming, cliente fiel del hotel, se inspirara en él a la hora de escribir algunas de las famosas novelas de la saga de James Bond. Tanto es así que, en 1969, este hotel sirvió como escenario para rodar una de las grandes películas dedicadas a este personaje, 007 Al servicio secreto de su Majestad. Famosos son también los "Dry Martini" del bar del hotel, su spa y su centro termal.