Las Regulación de Medidas de Emergencia del Gobierno canadiense (SOR/2022-21), impuesta por Justin Trudeau como forma de poner cota a las protestas de los camioneros que conforman el denominado "convoy de la libertad",  prohíbe que las personas participen “en reuniones públicas que se puede esperar razonablemente que conduzcan a un quebrantamiento de la paz”.

Pero esta norma no se aplica a “determinadas personas o clases de personas cuya presencia en Canadá", según lo determine el Ministro de Ciudadanía e Inmigración o el Ministro de Seguridad Pública y Preparación para Emergencias, "es de interés nacional”. Entre estas personas eximidas del cumplimiento del Estado de Emergencia se encuentran, según la ley, "indios, refugiados, inmigrantes, solicitantes de asilo y 'residentes temporales protegidos'.
 

Las exenciones marcadas por la ley han dejado a algunas personas preguntándose si la orden de prohibición solo se aplica a los blancos. "¿Por qué los miembros de las Primeras Naciones, los refugiados y los residentes temporales están exentos de la prohibición de 'participar en una reunión pública que razonablemente se puede esperar que conduzca a un quebrantamiento de la paz' ​​como parte de las regulaciones de la Ley de Emergencias?", se ha preguntado el líder del Partido Popular de Canadá, Maxime Bernier.