Investigación en "Frontiers in Virology"
Un grupo de investigadores halla que el Covid-19 contiene una pequeña porción de ADN que coincide con una secuencia genética patentada por Moderna tres años antes de que comenzara la pandemia
Una nueva sospecha de que el Covid-19 pudo haber sido manipulado en un laboratorio ha surgido después de que un grupo de científicos haya encontrado material genético propiedad de Moderna en la proteína de pico del virus. Se trata de un pequeño fragmento de código que es idéntico a parte de un gen patentado tres años antes del estallido de la pandemia por el fabricante de la vacuna. Además, el código se ha descubierto en el lugar concreto de escisión de furina del SARS-CoV-2, la parte que lo hace tan eficaz para infectar a las personas y que, a su vez, lo hace diferente de otros coronavirus. Los científicos responsables de este descubrimiento afirman de que existe una posibilidad entre tres billones de que la secuencia de Moderna apareciera aleatoriamente en el SARS-Cov-2 a través de la evolución natural.
(*) Los suscriptores del Club de Lectores de La Tribuna del País Vasco pueden solicitar una copia de la investigación a través de los canales habituales
En el trabajo citado, publicado en la revista científica Frontiers in Virology, los investigadores compararon la composición del Covid-19 con millones de proteínas secuenciadas en una base de datos en línea. Concretamente, el virus está compuesto por 30.000 letras de código genético que contienen la información que necesita para propagarse, conocida como nucleótidos. Es el único coronavirus de su tipo que lleva 12 letras únicas que permiten que su proteína de pico sea activada por una enzima común llamada furina, lo que le permite propagarse entre las células humanas con facilidad. El análisis del genoma original de Covid encontró que el virus comparte una secuencia de 19 letras específicas con una sección genética propiedad de Moderna, que tiene un total de 3.300 nucleótidos. La firma farmacéutica con sede en EEUU presentó la patente en febrero de 2016 como parte de su división de investigación del cáncer, según muestran los registros. La secuencia patentada es parte de un gen llamado MSH3 que se sabe que afecta a la forma en que las células dañadas se reparan a sí mismas en el cuerpo. Doce de las letras compartidas forman la estructura del sitio de escisión de furina del Covid, y el resto coincide con nucleótidos en una parte cercana del genoma.
En el artículo de Frontiers in Virology, dirigido por el Dr. Balamurali Ambati, de la Universidad de Oregón, los investigadores afirman que el código de coincidencia puede haberse introducido originalmente en el genoma del Covid a través de células humanas infectadas que expresan el gen MSH3.
Por su parte, el profesor Lawrence Young, virólogo de la Universidad de Warwick, ha admitido que este hallazgo es interesante, pero afirmó que no era lo suficientemente significativo como para sugerir una manipulación de laboratorio. “Es una observación peculiar, pero no la llamaría una prueba irrefutable porque es demasiado pequeña".
Por su parte, el Dr. Simon Clarke, microbiólogo de la Universidad de Reading, cuestionó si el hallazgo era tan raro como afirma el estudio. "Solo puede haber un cierto número de [combinaciones genéticas dentro de] sitios de escisión de furina. Funcionan como una cerradura y una llave en la celda, y los dos solo encajan en un número limitado de combinaciones. Así que es una coincidencia interesante, pero esto seguramente es solo una coincidencia".
![[Img #21493]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/02_2022/9215_screenshot-2022-02-24-at-16-05-20-scientists-find-genetic-match-between-covid-and-moderna-2016-patent.png)
![[Img #21492]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/02_2022/469_screenshot-2022-02-24-at-16-05-00-scientists-find-genetic-match-between-covid-and-moderna-2016-patent.png)
Una nueva sospecha de que el Covid-19 pudo haber sido manipulado en un laboratorio ha surgido después de que un grupo de científicos haya encontrado material genético propiedad de Moderna en la proteína de pico del virus. Se trata de un pequeño fragmento de código que es idéntico a parte de un gen patentado tres años antes del estallido de la pandemia por el fabricante de la vacuna. Además, el código se ha descubierto en el lugar concreto de escisión de furina del SARS-CoV-2, la parte que lo hace tan eficaz para infectar a las personas y que, a su vez, lo hace diferente de otros coronavirus. Los científicos responsables de este descubrimiento afirman de que existe una posibilidad entre tres billones de que la secuencia de Moderna apareciera aleatoriamente en el SARS-Cov-2 a través de la evolución natural.
(*) Los suscriptores del Club de Lectores de La Tribuna del País Vasco pueden solicitar una copia de la investigación a través de los canales habituales
En el trabajo citado, publicado en la revista científica Frontiers in Virology, los investigadores compararon la composición del Covid-19 con millones de proteínas secuenciadas en una base de datos en línea. Concretamente, el virus está compuesto por 30.000 letras de código genético que contienen la información que necesita para propagarse, conocida como nucleótidos. Es el único coronavirus de su tipo que lleva 12 letras únicas que permiten que su proteína de pico sea activada por una enzima común llamada furina, lo que le permite propagarse entre las células humanas con facilidad. El análisis del genoma original de Covid encontró que el virus comparte una secuencia de 19 letras específicas con una sección genética propiedad de Moderna, que tiene un total de 3.300 nucleótidos. La firma farmacéutica con sede en EEUU presentó la patente en febrero de 2016 como parte de su división de investigación del cáncer, según muestran los registros. La secuencia patentada es parte de un gen llamado MSH3 que se sabe que afecta a la forma en que las células dañadas se reparan a sí mismas en el cuerpo. Doce de las letras compartidas forman la estructura del sitio de escisión de furina del Covid, y el resto coincide con nucleótidos en una parte cercana del genoma.
En el artículo de Frontiers in Virology, dirigido por el Dr. Balamurali Ambati, de la Universidad de Oregón, los investigadores afirman que el código de coincidencia puede haberse introducido originalmente en el genoma del Covid a través de células humanas infectadas que expresan el gen MSH3.
Por su parte, el profesor Lawrence Young, virólogo de la Universidad de Warwick, ha admitido que este hallazgo es interesante, pero afirmó que no era lo suficientemente significativo como para sugerir una manipulación de laboratorio. “Es una observación peculiar, pero no la llamaría una prueba irrefutable porque es demasiado pequeña".
Por su parte, el Dr. Simon Clarke, microbiólogo de la Universidad de Reading, cuestionó si el hallazgo era tan raro como afirma el estudio. "Solo puede haber un cierto número de [combinaciones genéticas dentro de] sitios de escisión de furina. Funcionan como una cerradura y una llave en la celda, y los dos solo encajan en un número limitado de combinaciones. Así que es una coincidencia interesante, pero esto seguramente es solo una coincidencia".