El presidente de Vox, Santiago Abascal, clausuró recientemente la Asamblea General de la formación rodeado de los miembros del Comité Ejecutivo Nacional y de los vicesecretarios nacionales. En su discurso, Abascal se mostró convencido de que el recorrido efectuado por Vox a lo largo de los últimos años concluirá con el partido en el Gobierno de la nación. "De momento", dijo, “ya le pisamos los talones al PSOE”. Porque “no queremos ser un partido muleta, sino representar a todos los españoles sin distinción”, frente a la izquierda y a los separatistas. Así, Vox se prepara para cuando “se vuelva a dar voz a los españoles” para que el Congreso “se parezca a la nación”. Y es que, ha insistido Abascal, muchos españoles se han sentido engañados, después de que el PSOE “llevara a la dirección del Gobierno a los enemigos de la nación”. Todo ello, además de no haber dimitido después de las tres sentencias que el Tribunal Constitucional ha fallado en favor de Vox al reconocer que el Ejecutivo ha vulnerado los derechos y libertades de los españoles.

Abascal también quiso poner en valor el trabajo que ha hecho Vox "devolviendo la ilusión a los españoles", “tanto a los que nos votaban como a los que no”, y que estaban “hartos de la hegemonía de la izquierda y de los separatistas”. Unos españoles que tenían su libertad “atenazada por la dictadura de la corrección política que se nos imponía, desde un lado y desde otro, y que hemos combatido”. De modo que la formación que preside Abascal ha rescatado el debate sobre la inmigración, la soberanía, el género, etc. Pero, además, Vox ha sido capaz de expulsar de la política, ha celebrado Santiago Abascal, al vicepresidente “más peligroso que ha tenido España en la historia reciente”.

En opinión de Abascal, los problemas que asolan a España son la inflación, el paro estructural y el hecho de que haya “familias que no se atreven a encender la calefacción por miedo a la factura y a no poder llevar comida a su casa”. De este modo, los españoles “han sentido a Vox cerca” porque “estamos con las cosas de comer, mientras los otros están con las obsesiones ideológicas”.

Y es que, tal y como ha recordado Abascal, Vox ha acompañado a los españoles en las calles, en los tribunales y en las Cortes y parlamentos. Y en este punto ha mencionado a los compañeros que “peor lo pasan” y que están en el Parlamento de Cataluña y en el vasco, donde están “los más valientes” y los que “están dando el do de pecho más que nosotros”.