Obscena injerencia internacional
El Parlamento Europeo presiona al Gobierno y al Tribunal Supremo de EEUU a favor del aborto
En un ejercicio inaudito de injerencia internacional, los diputados europeos, con 364 votos a favor, 154 en contra y 37 abstenciones, han aprobado una resolución en la que interfieren en la política interior de EEUU y presionan al Tribunal Supremo de este país afirmando que esta institución "debe respetar la sentencia del caso 'Roe contra Wade' (1973), que otorga protección constitucional al derecho al aborto en el país".
Los parlamentarios europeos, además, que no tienen límites en su engreimiento político, se permiten instar "al presidente estadounidense Joe Biden y a su Administración a garantizar el acceso seguro y legal al aborto".
Por si esto fuera poco, los eurodiputados reiteran también su exigencia al Gobierno de Texas "para que derogue inmediatamente la ley 8 del Senado estatal" y piden a otros estados de EE.UU. con leyes similares "que adapten su legislación" a lo que, según los europarlamentarios, son "los derechos humanos de las mujeres, protegidos internacionalmente".
En su desvarío intervencionista, los eurodiputados afirman también "que las prohibiciones y otras restricciones al aborto afectan de forma desproporcionada a las mujeres en situación de pobreza. Resaltan la situación de las mujeres que, debido a barreras financieras o logísticas, no pueden permitirse viajar a clínicas de salud reproductiva en estados o países vecinos, y que corren un mayor riesgo de someterse a procedimientos inseguros y potencialmente mortales".
En un ejercicio inaudito de injerencia internacional, los diputados europeos, con 364 votos a favor, 154 en contra y 37 abstenciones, han aprobado una resolución en la que interfieren en la política interior de EEUU y presionan al Tribunal Supremo de este país afirmando que esta institución "debe respetar la sentencia del caso 'Roe contra Wade' (1973), que otorga protección constitucional al derecho al aborto en el país".
Los parlamentarios europeos, además, que no tienen límites en su engreimiento político, se permiten instar "al presidente estadounidense Joe Biden y a su Administración a garantizar el acceso seguro y legal al aborto".
Por si esto fuera poco, los eurodiputados reiteran también su exigencia al Gobierno de Texas "para que derogue inmediatamente la ley 8 del Senado estatal" y piden a otros estados de EE.UU. con leyes similares "que adapten su legislación" a lo que, según los europarlamentarios, son "los derechos humanos de las mujeres, protegidos internacionalmente".
En su desvarío intervencionista, los eurodiputados afirman también "que las prohibiciones y otras restricciones al aborto afectan de forma desproporcionada a las mujeres en situación de pobreza. Resaltan la situación de las mujeres que, debido a barreras financieras o logísticas, no pueden permitirse viajar a clínicas de salud reproductiva en estados o países vecinos, y que corren un mayor riesgo de someterse a procedimientos inseguros y potencialmente mortales".