EE.UU. enviará 3.000 militares a Liberia
Obama dice que el mundo “nunca había visto” una epidemia como la del Ébola. “Es una amenaza global fuera de control"
![[Img #4903]](upload/img/periodico/img_4903.jpg)
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha anunciado un "importante aumento" en la respuesta del país norteamericano en la lucha contra el brote de Ébola en África Occidental, que incluye el despliegue de 3.000 efectivos militares en Monrovia, capital de Liberia, con el objetivo de coordinar los esfuerzos internacionales contra esta "amenaza global". (Leer discurso íntegro - en inglés- de Barack Obama sobre esta cuestión al final de esta información)
Estados Unidos también presentará planes para construir 17 centros de tratamiento, entrenar a miles de trabajadores del sector sanitario, así como para el establecimiento de un centro de control militar para coordinar todos estos esfuerzos. En concreto, estos centros de tratamiento, que serán localizados en los países más afectados por la epidemia, podrán albergar hasta 1.700 camas adicionales. Por su parte, los médicos estadounidenses desplazados a la zona entrenarán hasta a 500 trabajadores sanitarios por semana para identificar y atender a las personas con Ébola. Para cumplir con estos objetivos, Washington ya ha comprometido más de 100 millones de dólares, según la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a lo que se sumarían los 75 millones que anunció la semana pasada para construir instalaciones de tratamiento y suministrar equipos médicos.
Según una información de la cadena CNN, el Pentágono estaría trabajando para derivar 500 millones de dólares de fondos aún no comprometidos hacia el esfuerzo en la lucha contra el Ébola. "Esta es una tarea de enormes proporciones, pero hay esperanza. El mundo sabe cómo luchar contra esta enfermedad. No es un misterio. Conocemos la ciencia y sabemos cómo prevenir su propagación. Sabemos cómo cuidar a los que contraen el ébola. Sabemos que si tomamos las medidas adecuadas podemos salvar vidas, pero tenemos que actuar rápido", ha afirmado Obama.
Durante su visita al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) en Atlanta, el mandatario estadounidense ha reconocido que en África Occidental el Ébola es ahora "una epidemia como no habíamos visto antes". "Si el brote no se detiene ahora, podríamos hablar de cientos de miles de personas infectadas con profundas implicaciones de seguridad para todos nosotros", ha añadido.
"Hombres, mujeres y niños están sentados esperando la muerte en este momento. (...) Esa es la dura verdad, está fuera de control", reitera Obama, antes de afirmar que frente a este brote "el mundo está buscando a Estados Unidos para liderar los esfuerzos internacionales". En este sentido, ha asegurado que el país norteamericano está "dispuesto a asumir ese papel de liderazgo". Obama insiste en que se trata de "una amenaza global" y, por lo tanto, requiere de "una respuesta global", algo que obliga a la comunidad internacional "a moverse más rápido". La próxima semana, Estados Unidos presidirá una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para maximizar la respuesta a la crisis del Ébola.
Los países donde esta gravísima enfermedad está teniendo más impacto son Liberia, Sierra Leona y Guinea.
![[Img #4903]](upload/img/periodico/img_4903.jpg)
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha anunciado un "importante aumento" en la respuesta del país norteamericano en la lucha contra el brote de Ébola en África Occidental, que incluye el despliegue de 3.000 efectivos militares en Monrovia, capital de Liberia, con el objetivo de coordinar los esfuerzos internacionales contra esta "amenaza global". (Leer discurso íntegro - en inglés- de Barack Obama sobre esta cuestión al final de esta información)
Estados Unidos también presentará planes para construir 17 centros de tratamiento, entrenar a miles de trabajadores del sector sanitario, así como para el establecimiento de un centro de control militar para coordinar todos estos esfuerzos. En concreto, estos centros de tratamiento, que serán localizados en los países más afectados por la epidemia, podrán albergar hasta 1.700 camas adicionales. Por su parte, los médicos estadounidenses desplazados a la zona entrenarán hasta a 500 trabajadores sanitarios por semana para identificar y atender a las personas con Ébola. Para cumplir con estos objetivos, Washington ya ha comprometido más de 100 millones de dólares, según la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a lo que se sumarían los 75 millones que anunció la semana pasada para construir instalaciones de tratamiento y suministrar equipos médicos.
Según una información de la cadena CNN, el Pentágono estaría trabajando para derivar 500 millones de dólares de fondos aún no comprometidos hacia el esfuerzo en la lucha contra el Ébola. "Esta es una tarea de enormes proporciones, pero hay esperanza. El mundo sabe cómo luchar contra esta enfermedad. No es un misterio. Conocemos la ciencia y sabemos cómo prevenir su propagación. Sabemos cómo cuidar a los que contraen el ébola. Sabemos que si tomamos las medidas adecuadas podemos salvar vidas, pero tenemos que actuar rápido", ha afirmado Obama.
Durante su visita al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) en Atlanta, el mandatario estadounidense ha reconocido que en África Occidental el Ébola es ahora "una epidemia como no habíamos visto antes". "Si el brote no se detiene ahora, podríamos hablar de cientos de miles de personas infectadas con profundas implicaciones de seguridad para todos nosotros", ha añadido.
"Hombres, mujeres y niños están sentados esperando la muerte en este momento. (...) Esa es la dura verdad, está fuera de control", reitera Obama, antes de afirmar que frente a este brote "el mundo está buscando a Estados Unidos para liderar los esfuerzos internacionales". En este sentido, ha asegurado que el país norteamericano está "dispuesto a asumir ese papel de liderazgo". Obama insiste en que se trata de "una amenaza global" y, por lo tanto, requiere de "una respuesta global", algo que obliga a la comunidad internacional "a moverse más rápido". La próxima semana, Estados Unidos presidirá una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para maximizar la respuesta a la crisis del Ébola.
Los países donde esta gravísima enfermedad está teniendo más impacto son Liberia, Sierra Leona y Guinea.












