Turrones artesanos, un manjar para el paladar: ¿cómo diferenciarlos?
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En Navidad, las mesas se llenarán de manjares, en donde no pueden faltar productos como el turrón. En las estanterías de los supermercados es posible encontrar una gran variedad de ellos, pero el sabor y la calidad de los turrones artesanos se imponen sobre cualquier otro dulce en estas fechas.
Todavía encontramos expertos turroneros, como Turrones Iváñez, la turronería más antigua de Bilbao, donde continúan apostando por este tipo de elaboraciones en las que predominan las recetas tradicionales, consiguiendo tabletas exclusivas. En cada bocado consiguen transmitir la esencia de estas fechas, pero también mucho sabor.
Cómo diferenciar entre el turrón artesano y el turrón industrial
Resulta sencillo diferenciar un turrón artesano de uno industrial. Principalmente por los ingredientes, que suelen ser de primera calidad en el caso de los primeros. Trabajan sobre todo con la almendra Marcona, que es de origen español y se presenta como la más adecuada para este tipo de productos. Gracias al aceite que contiene permite darle al turrón un aspecto más untuoso. Su precio suele ser más caro en comparación con otras variedades y por lo limitado de su producción. Otro ingrediente que suelen llevar los turrones artesanos es la miel, por lo general de romero y de azahar.
En lo que se refiere al proceso de fabricación, el Consejo Regulador de Jijona y Turrón de Alicante, aclara que es preciso respetar una serie de pasos ancestrales que se siguen desde hace más de cinco siglos. Todavía se realizan a mano algunos de estos procedimientos, como el volteo de la masa de turrón duro con palas o el extendido del blando.
Aún se conservan diferentes oficios ancestrales como el de maestro turronero, el arrematador o el tostador, que dominan a la perfección el proceso de elaboración de las recetas, con un claro conocimiento sobre las proporciones de los ingredientes o la temperatura.
Los detalles que te permitirán distinguir un turrón artesano
Hay varios detalles en los que debes reparar para identificar a un turrón artesano. En primer lugar nos detendremos en los ingredientes. Los que cuentan con Denominación de Origen cuentan con un porcentaje de almendra mucho mayor que el industrial que se puede adquirir en los supermercados. En el caso del de Jijona, es preciso que tenga un 64% de almendra frente al 61% del de Alicante.
También lo apreciarás en cuanto a los valores nutricionales. Como cualquier otro dulce, siempre hay que consumirlo sin excederse, pero si te decantas por un turrón artesano puedes tener la garantía de consumir un producto rico en proteínas, vitaminas y ácido linoleico. Obviamente resultará más saludable en comparación con otros debido a la utilización de ingredientes de primera calidad.
Por último, el precio también será más elevado, pero es algo lógico si tenemos en cuenta la calidad de los ingredientes y el proceso de fabricación, que suele ser manual y empleando unas técnicas tradicionales que dan como resultado un producto exclusivo y único.
Cuáles son los turrones artesanos que más triunfan
Las turronerías han ido incorporando nuevas variedades de turrones, pero los clientes suelen apostar casi siempre por lo tradicional. Esperan por esta época del año para volver a deleitarse con los sabores únicos que encuentran en estas tabletas. Lo clásico no parece pasar de moda, como demuestra que siempre estén entre los más vendidos. Estos son los que nunca fallan:
- Turrón blando: sin lugar a dudas es el más típico en Navidad. El ingrediente estrella es la almendra, a la que se le incorpora miel y azúcar. Debe dejarse reposar unos días antes de que se corte y envuelva.
- Turrón duro: se le conoce también como turrón de Alicante. Se compone de almendras, miel y claras de huevo.
- Turrón de chocolate: puede llevar chocolate negro, chocolate con leche, avellanas, almendras, praliné y otros distintos frutos secos. Entre los favoritos de los clientes se encuentra el de chocolate con almendras.
- Turrón de yema: la yema de huevo se convierte en la base de este turrón, que suele encantar a los más golosos.
- Turrón de trufa: cada vez tiene más presencia en las bandejas de los dulces en Navidad. Tiene un sabor suave aunque muy exquisito, que le convierte en una opción a tener en cuenta.
En Navidad, las mesas se llenarán de manjares, en donde no pueden faltar productos como el turrón. En las estanterías de los supermercados es posible encontrar una gran variedad de ellos, pero el sabor y la calidad de los turrones artesanos se imponen sobre cualquier otro dulce en estas fechas.
Todavía encontramos expertos turroneros, como Turrones Iváñez, la turronería más antigua de Bilbao, donde continúan apostando por este tipo de elaboraciones en las que predominan las recetas tradicionales, consiguiendo tabletas exclusivas. En cada bocado consiguen transmitir la esencia de estas fechas, pero también mucho sabor.
Cómo diferenciar entre el turrón artesano y el turrón industrial
Resulta sencillo diferenciar un turrón artesano de uno industrial. Principalmente por los ingredientes, que suelen ser de primera calidad en el caso de los primeros. Trabajan sobre todo con la almendra Marcona, que es de origen español y se presenta como la más adecuada para este tipo de productos. Gracias al aceite que contiene permite darle al turrón un aspecto más untuoso. Su precio suele ser más caro en comparación con otras variedades y por lo limitado de su producción. Otro ingrediente que suelen llevar los turrones artesanos es la miel, por lo general de romero y de azahar.
En lo que se refiere al proceso de fabricación, el Consejo Regulador de Jijona y Turrón de Alicante, aclara que es preciso respetar una serie de pasos ancestrales que se siguen desde hace más de cinco siglos. Todavía se realizan a mano algunos de estos procedimientos, como el volteo de la masa de turrón duro con palas o el extendido del blando.
Aún se conservan diferentes oficios ancestrales como el de maestro turronero, el arrematador o el tostador, que dominan a la perfección el proceso de elaboración de las recetas, con un claro conocimiento sobre las proporciones de los ingredientes o la temperatura.
Los detalles que te permitirán distinguir un turrón artesano
Hay varios detalles en los que debes reparar para identificar a un turrón artesano. En primer lugar nos detendremos en los ingredientes. Los que cuentan con Denominación de Origen cuentan con un porcentaje de almendra mucho mayor que el industrial que se puede adquirir en los supermercados. En el caso del de Jijona, es preciso que tenga un 64% de almendra frente al 61% del de Alicante.
También lo apreciarás en cuanto a los valores nutricionales. Como cualquier otro dulce, siempre hay que consumirlo sin excederse, pero si te decantas por un turrón artesano puedes tener la garantía de consumir un producto rico en proteínas, vitaminas y ácido linoleico. Obviamente resultará más saludable en comparación con otros debido a la utilización de ingredientes de primera calidad.
Por último, el precio también será más elevado, pero es algo lógico si tenemos en cuenta la calidad de los ingredientes y el proceso de fabricación, que suele ser manual y empleando unas técnicas tradicionales que dan como resultado un producto exclusivo y único.
Cuáles son los turrones artesanos que más triunfan
Las turronerías han ido incorporando nuevas variedades de turrones, pero los clientes suelen apostar casi siempre por lo tradicional. Esperan por esta época del año para volver a deleitarse con los sabores únicos que encuentran en estas tabletas. Lo clásico no parece pasar de moda, como demuestra que siempre estén entre los más vendidos. Estos son los que nunca fallan:
- Turrón blando: sin lugar a dudas es el más típico en Navidad. El ingrediente estrella es la almendra, a la que se le incorpora miel y azúcar. Debe dejarse reposar unos días antes de que se corte y envuelva.
- Turrón duro: se le conoce también como turrón de Alicante. Se compone de almendras, miel y claras de huevo.
- Turrón de chocolate: puede llevar chocolate negro, chocolate con leche, avellanas, almendras, praliné y otros distintos frutos secos. Entre los favoritos de los clientes se encuentra el de chocolate con almendras.
- Turrón de yema: la yema de huevo se convierte en la base de este turrón, que suele encantar a los más golosos.
- Turrón de trufa: cada vez tiene más presencia en las bandejas de los dulces en Navidad. Tiene un sabor suave aunque muy exquisito, que le convierte en una opción a tener en cuenta.