El turista español se ha movido tradicionalmente por Europa, si bien no renuncia a destinos diferentes y exóticos. La estabilidad social de un país con un importante atractivo significa la apertura de una nueva oportunidad para hacer turismo. Así se explica porqué cada vez más ciudadanos deciden cambiar su rumbo habitual y viajar a turquia para disfrutar de sus vacaciones. El gran legado cultural e histórico de esta región, la mezcla de culturas, las buenas conexiones directas o motivos sanitarios son los principales factores que explican el aumento del puente aéreo entre Madrid y Barcelona con Estambul y otras zonas de este país.

Los datos así lo reflejan. En 2019, cerca de 240.000 españoles visitaron Turquía, una cifra que significa un importante aumento con los datos anteriores. En la última década, las visitas desde España se han incrementado en un cincuenta por ciento; un incremento exponencial y muy bueno que refleja la buena salud de esta conexión. Es un dato que sigue la línea general del país, que en ese mismo año, el anterior a la pandemia, registró una cifra récord con más de 51 millones de turistas. En la etapa más reciente, en el primer semestre del 2022, el país recibió a más de 16 millones de visitantes, un número muy positivo que se ha incrementado durante los siguientes seis meses, cuando la época del verano tiene una influencia directa en este dato.

La organización de viajes a turquia ha subido entre las agencias de viajes y touroperadores, que han visto en esta región una buena oportunidad para aumentar su volumen de negocio. La vuelta a la normalidad política y financiera ha sido clave para que esta región, situada entre dos continentes, Europa y Asia, presente unos análisis tan positivos. Las posibilidades de llegar desde los aeropuertos españoles hacia los puntos turcos se han multiplicado, otro de los factores decisivos en el aumento de las cifras. Hasta cinco ciudades nacionales tienen una conexión directa con Estambul. A las habituales de Madrid y Barcelona, se suman ahora Valencia, Málaga y Bilbao. Esto se ha traducido en un crecimiento de la oferta que facilita unos precios más competitivos y muchas más facilidades al público.

El viaje al país de origen otomano también persigue motivos sanitarios. Muchos españoles viajan allí para someterse a tratamientos de injerto de pelo y aprovechan la estancia para realizar turismo. Trece Patrimonios de la Humanidad de carácter cultural y dos mixtos son argumentos de peso para visitar un país que presenta una propuesta muy completa, con una mezcla de culturas, áreas urbanas y naturaleza.