¿Se acuerdan del eslogan de Unidad Alavesa?. Queríamos por Derechos Históricos Forales -pacto y libertad- que Álava fuera una comunidad foral en la España de las autonomías. Y conformar una confederación con Navarra y La Rioja. ¡Qué sueños!. A los nacionalistas radicales les indignaba hasta el punto de señalarme como enemigo del pueblo vasco y condenarme a muerte mediante ejecución-ikintza de sus comandos de presuntos gudaris.

Nuestra relación con UPN era de hermanos. Miguel Sanz y Gurrea, amigos a los que acudía para visitar cada vez que alguna oportunidad así lo requería. No se me olvida -ni perdono- el asesinato del concejal Tomás Caballero. Nos fuimos mi hijo Antón, estudiante de Derecho en la Comunidad a darle el pésame a mi "hermano" Miguel Sanz. Aquel navarro, bravo ex alcalde, paisano aguerrido, entre lágrimas me confesó que deseaba no ser el Presidente para salir a la calle y ajustar cuentas a estilo paisano. Mi hijo y yo nos ofrecimos para acompañarle en el desahogo.

Pero desgraciadamente estos sanchistas han vendido Navarra al independentismo o a la anexión para conformar los que pedían en la alternativa KAS: la salida de las FOP y que Navarra fuera Euskadi. Pero van a lograr más. Tal como manifiesta Otegui los chicos de Sánchez están dispuestos a facilitar que Euskadi se gobierne por Bildu con el apoyo del PSE. Y es que el ex alcalde de Valladolid ya les ha dado carta de naturaleza como progresistas y demócratas de toda la vida. De lo dicho se desprende un justo castigo a la estupidez casera -aldea profunda- del PNV que ha confundido los puerros con los espárragos y se llevará un oblea blanca sin consagrar en las elecciones al Parlamento de Vitoria.

No veo hasta ahora reacción. Al menos en los Parlamentos. Me refiero a los Parlamentos regionales que no controlan los sanchistas y socios, en forma de comunicados y llamadas a la sociedad civil para manifestarse en todas las tierras de España. No veo reacción suficiente en el Senado. No he visto una reacción en la Eurocámara dónde el ególatra con tintes papales se ha defendido con la comparación entre Vox y los miembros del Tercer Reich. No veo reacción del poder judicial a los graves insultos que les profieren con nombres y apellidos los golpistas catalanes, ni veo a la Presidencia de las Cortes aplicando el Reglamento para impedir tal vulneración del respeto debido a unos funcionarios públicos que representan a uno de los poderes institucionales en nuestra decadente democracia.        

La división entre las dos Españas vuelve a ser una negra sombra amenazante para la convivencia. No reconozco a estos sanchistas que ocupan el mismo espacio de mis compañeros en el Parlamento vasco: Javier Rojo, Fernando Buesa, Ramón Jáuregui, Jesús Loza, Nicolás Redondo, Teo Uriarte, Onaindía, Lerchundi, etc. Hay que reconocer tres perversos hechos. Cualquier mequetrefe puede ser parlamentario. La pereza, indigencia cultural y falta de escrúpulos más allá del control mensual de la nómina ha dejado a un lado la ética. La falta de iniciativa de la oposición les permite a tal chusma dar cartas para la naturaleza de progresistas, feministas y antifascistas.

Por si les sirve de algo. Le recomiendo a Javier de Andrés -PP- que pierda el complejo y organice un movimiento social que se denomine "Álava, frontera al independentismo". Le auguro ganará con tal las elecciones en el territorio dónde las ganó dos veces UA.     

Sin el cumplimiento de la Constitución comienza el desmoronamiento del sistema democrático y con el conocimiento de la historia de España debería preocuparnos cambiar tiempos de paz y convivencia por tiempos en los que era fácil el enfrentamiento civil en las calles o analizar si lo mismo que lo sucedido en Gaza es respuesta calculada al conflicto en Ucrania, podemos ser laboratorio perverso de alguna potencia fáctica que se proponga desestabilizar la frontera sur de la OTAN mediante luchas internas para recuperar la igualdad de condiciones y exigir el estricto cumplimiento de las sentencias judiciales. Eso añadido a la fobia que sin duda desencadena la conducta de los nacionalistas catalanes en el resto de la nación Española.

No le concedo ninguna verdad a esas afirmaciones a inventario personal para mantenerse en el poder sobre como la amnistía sirve para apaciguar el contencioso de Cataluña con el Estado o la vuelta a la senda del comportamiento cívico evitando repetir los sucesos de un proceso golpista con las calles de Barcelona incendiadas por el radicalismo independentista. Ya han avisado que no tienen propósito de enmienda. Lo volverán a repetir. Ahora con más fuerza al comprobar la debilidad del Estado controlado por el sanchismo y sus socios.