Huida hacia el abismo
Marañón ya se había opuesto a la dictadura de Primo de Rivera, siendo encarcelado, multado y cesado en su puesto de director del Hospital del Rey. Jugó un papel importante en la llegada de la Segunda República: con Ortega y Pérez de Ayala encabezó la Agrupación al Servicio de la República, y fue diputado en las Constituyentes. Luego, renunció a los más altos nombramientos que se le propusieron, desde la presidencia de la propia República a la formación de un gobierno, para dedicarse a su vocación clínica investigadora y docente. En los meses anteriores a julio de 1936, al advertir el extraordinario ascenso de la violencia social, Marañón realizó constantes llamamientos a la responsabilidad, la comprensión, el respeto de la normalidad democrática y la concordia civil, creyendo con optimismo que la conflictividad política y social eran consecuencia pasajera de la «juventud» de la República, y que la reconducción de la situación permitiría continuar desarrollando el proyecto reformista que, junto a muchos otros políticos e intelectuales, había impulsado ilusionadamente cinco años atrás.
Pocos días después, el 30 de julio de 1936, junto a otros intelectuales como Ortega y Gasset, Antonio Machado, Teófilo Hernando, Pittaluga, Juan Ramón Jiménez, Ramón Pérez de Ayala o Ramón Menéndez Pidal, fue obligado entre fusiles a firmar el manifiesto de adhesión a la causa republicana redactado por la Alianza de Intelectuales Antifascistas –formada el 19 de julio por José Bergamín, Rafael Alberti, María Zambrano, Arturo Serrano Plaja, Luis Cernuda y otros–. Los acontecimientos revolucionarios vividos en Madrid en los meses de agosto y septiembre, los asesinatos, le horrorizaron. A mediados de diciembre de 1936, Marañón partió hacia París en compañía de Ramón Menéndez Pidal, con sus familias. Como muchos de aquellos intelectuales liberales de antes de la guerra, Marañón se percató del peligro que llamaron de bolchevización o sovietización del gobierno de Madrid, pero minimizó comparativamente el peligro fascista durante la guerra, del que se derivaría una larga dictadura militar que duraría casi cuatro décadas
Viene a cuenta sobre cómo determinadas circunstancias son ilusorias hasta para las mentes más brillantes. Aun más. Cada día resulta más fácil manipular con huidas hacia delante. Cada tiempo provoca que la sima entre la España oficial y la España real sea más grande y siga creciendo... ¿hasta dónde?. Hasta el abismo. Es aquí donde el sanchismo será estudiado en las universidades futuras como metodología al servicio para la perversión del sistema democrático en el Reino de España.
El "síndrome de final de legislatura" se abre paso en el PSOE. Junts cree que con la investidura de Pedro Sánchez y la aprobación de la Ley de Amnistía "saldan" su deuda. Puede ser que tal estado de ánimo haga coincidir la España oficial con la España real. ¿Para qué sirven los 350 Diputados en Cortes de España, si son incapaces de sacar otra ley que no sea la de la amnistía?. ¿Cómo pueden formar parte del mismo Gobierno dos formaciones políticas PSOE y SUMAR que se enfrentan cada vez con más inquina llegando a provocar graves "disturbios " diplomáticos?
La legislatura del "fango". Reconozcamos dos éxitos. El sanchismo ha conseguido, como los buenos equipos ciclistas, que la oposición chupe rueda y caiga en la trampa y así evitar escapadas creativas en materia legislativa. Y es que sólo se habla de lo que los artistas del sainete cada semana deciden entre bambalinas que será noticia.
El otro éxito está en convertir la política en un charco del que el sabio y soberano pueblo español no quiere saber nada. Mientras, sus señorías a sabiendas de como la televisión les recoge imágenes con caras a veces congestionadas y verbo de patio vecinal en barriada poco afortunada, establecen una regata sobre quién lanza el improperio más grueso bordeando la grosería que la Presidenta de la Cámara tolera y algún día hará sonrojar al investigador historicista del actual periodo en Las Cortes.
"Europa no tiene solución para sus tres grandes obsesiones: inmigración, natalidad y defensa. Las ideas mayoritarias acerca de lo que deseamos, y las herramientas de que disponemos para lograrlo, están terriblemente desacompasadas". Con lo cual me pregunto si la decadencia en Occidente no está llagando hasta el paroxismo. Incluyo los errores de la OMS y la ONU. Y mi pregunta. ¿Puede haber un voto de rabia que haga crecer el espacio de las derechas más duras?.
Por fin, y aunque no le dan cancha mediática, hay 50 socialistas de probado prestigio y servicio a España, un movimiento contra el sanchismo denunciando la falta de ética del sanchismo que recurre a lo que haga falta con tal de mantenerse en el poder. Supongo que a los paniaguados que siguen a Pedro, les importa muy poco, con tal de seguir en la poltrona y mantener privilegios de toda índole. Estos son quienes más han contribuido a pervertir el sistema democrático. Pero me hago una pregunta. ¿A estas alturas del proceso sanchista, quiénes de sus mesnadas siguen creyendo en la democracia o lo que es peor, como sucedió en la Euskadi del plomo, no sólo se hacen trampas en el solitario, es que inventan desde la mentira su propio concepto de democracia?. El cambio por alternancia que llegará más pronto que tarde, deberá refundar o recuperar los conceptos de ética y democracia. No sólo existe una corrupción de bienes, la hay también de ideas.
Los nacionalistas catalanes ya lo han dicho alto y claro. El asunto no está finalizado. No hubo ni a propósito de enmienda. Seguirán caminando hacia la independencia de Cataluña. Pero... ¿España lo va a permitir?. Y cuando digo España me estoy refiriendo a los españoles, a la sociedad civil, a las instituciones que conforman el Estado de Derecho. Incluso a las instancias de la UE. ¿No tendrá un perverso efecto dominó en otros lugares de la Unión?. Sin duda ha comenzado un camino fangoso hacia el abismo.
¡Ah. No quiero dejarlo pasar!. Entre los firmantes- auténticos socialistas- contra la amnistía se encuentran dos buenos amigos con los que desde Vitoria compartí muchos acontecimientos. Se trata de Javier Rojo y Ramón Jáuregui. Gracias compañeros.
Marañón ya se había opuesto a la dictadura de Primo de Rivera, siendo encarcelado, multado y cesado en su puesto de director del Hospital del Rey. Jugó un papel importante en la llegada de la Segunda República: con Ortega y Pérez de Ayala encabezó la Agrupación al Servicio de la República, y fue diputado en las Constituyentes. Luego, renunció a los más altos nombramientos que se le propusieron, desde la presidencia de la propia República a la formación de un gobierno, para dedicarse a su vocación clínica investigadora y docente. En los meses anteriores a julio de 1936, al advertir el extraordinario ascenso de la violencia social, Marañón realizó constantes llamamientos a la responsabilidad, la comprensión, el respeto de la normalidad democrática y la concordia civil, creyendo con optimismo que la conflictividad política y social eran consecuencia pasajera de la «juventud» de la República, y que la reconducción de la situación permitiría continuar desarrollando el proyecto reformista que, junto a muchos otros políticos e intelectuales, había impulsado ilusionadamente cinco años atrás.
Pocos días después, el 30 de julio de 1936, junto a otros intelectuales como Ortega y Gasset, Antonio Machado, Teófilo Hernando, Pittaluga, Juan Ramón Jiménez, Ramón Pérez de Ayala o Ramón Menéndez Pidal, fue obligado entre fusiles a firmar el manifiesto de adhesión a la causa republicana redactado por la Alianza de Intelectuales Antifascistas –formada el 19 de julio por José Bergamín, Rafael Alberti, María Zambrano, Arturo Serrano Plaja, Luis Cernuda y otros–. Los acontecimientos revolucionarios vividos en Madrid en los meses de agosto y septiembre, los asesinatos, le horrorizaron. A mediados de diciembre de 1936, Marañón partió hacia París en compañía de Ramón Menéndez Pidal, con sus familias. Como muchos de aquellos intelectuales liberales de antes de la guerra, Marañón se percató del peligro que llamaron de bolchevización o sovietización del gobierno de Madrid, pero minimizó comparativamente el peligro fascista durante la guerra, del que se derivaría una larga dictadura militar que duraría casi cuatro décadas
Viene a cuenta sobre cómo determinadas circunstancias son ilusorias hasta para las mentes más brillantes. Aun más. Cada día resulta más fácil manipular con huidas hacia delante. Cada tiempo provoca que la sima entre la España oficial y la España real sea más grande y siga creciendo... ¿hasta dónde?. Hasta el abismo. Es aquí donde el sanchismo será estudiado en las universidades futuras como metodología al servicio para la perversión del sistema democrático en el Reino de España.
El "síndrome de final de legislatura" se abre paso en el PSOE. Junts cree que con la investidura de Pedro Sánchez y la aprobación de la Ley de Amnistía "saldan" su deuda. Puede ser que tal estado de ánimo haga coincidir la España oficial con la España real. ¿Para qué sirven los 350 Diputados en Cortes de España, si son incapaces de sacar otra ley que no sea la de la amnistía?. ¿Cómo pueden formar parte del mismo Gobierno dos formaciones políticas PSOE y SUMAR que se enfrentan cada vez con más inquina llegando a provocar graves "disturbios " diplomáticos?
La legislatura del "fango". Reconozcamos dos éxitos. El sanchismo ha conseguido, como los buenos equipos ciclistas, que la oposición chupe rueda y caiga en la trampa y así evitar escapadas creativas en materia legislativa. Y es que sólo se habla de lo que los artistas del sainete cada semana deciden entre bambalinas que será noticia.
El otro éxito está en convertir la política en un charco del que el sabio y soberano pueblo español no quiere saber nada. Mientras, sus señorías a sabiendas de como la televisión les recoge imágenes con caras a veces congestionadas y verbo de patio vecinal en barriada poco afortunada, establecen una regata sobre quién lanza el improperio más grueso bordeando la grosería que la Presidenta de la Cámara tolera y algún día hará sonrojar al investigador historicista del actual periodo en Las Cortes.
"Europa no tiene solución para sus tres grandes obsesiones: inmigración, natalidad y defensa. Las ideas mayoritarias acerca de lo que deseamos, y las herramientas de que disponemos para lograrlo, están terriblemente desacompasadas". Con lo cual me pregunto si la decadencia en Occidente no está llagando hasta el paroxismo. Incluyo los errores de la OMS y la ONU. Y mi pregunta. ¿Puede haber un voto de rabia que haga crecer el espacio de las derechas más duras?.
Por fin, y aunque no le dan cancha mediática, hay 50 socialistas de probado prestigio y servicio a España, un movimiento contra el sanchismo denunciando la falta de ética del sanchismo que recurre a lo que haga falta con tal de mantenerse en el poder. Supongo que a los paniaguados que siguen a Pedro, les importa muy poco, con tal de seguir en la poltrona y mantener privilegios de toda índole. Estos son quienes más han contribuido a pervertir el sistema democrático. Pero me hago una pregunta. ¿A estas alturas del proceso sanchista, quiénes de sus mesnadas siguen creyendo en la democracia o lo que es peor, como sucedió en la Euskadi del plomo, no sólo se hacen trampas en el solitario, es que inventan desde la mentira su propio concepto de democracia?. El cambio por alternancia que llegará más pronto que tarde, deberá refundar o recuperar los conceptos de ética y democracia. No sólo existe una corrupción de bienes, la hay también de ideas.
Los nacionalistas catalanes ya lo han dicho alto y claro. El asunto no está finalizado. No hubo ni a propósito de enmienda. Seguirán caminando hacia la independencia de Cataluña. Pero... ¿España lo va a permitir?. Y cuando digo España me estoy refiriendo a los españoles, a la sociedad civil, a las instituciones que conforman el Estado de Derecho. Incluso a las instancias de la UE. ¿No tendrá un perverso efecto dominó en otros lugares de la Unión?. Sin duda ha comenzado un camino fangoso hacia el abismo.
¡Ah. No quiero dejarlo pasar!. Entre los firmantes- auténticos socialistas- contra la amnistía se encuentran dos buenos amigos con los que desde Vitoria compartí muchos acontecimientos. Se trata de Javier Rojo y Ramón Jáuregui. Gracias compañeros.