El tirano Pedro Sánchez ya tiene a punto su plan totalitario de censura para “acabar con la impunidad” de lo que él mismo define como algunos “pseudomedios”. De este modo, el déspota no solamente va a definir qué medios de comunicación son “auténticos” y van a poder existir, sino que, además, también va a precisar qué es lo que es verdad y lo que es mentira y va a tratar de dar calificaciones de “autoridad” a unos medios de comunicación y quitársela a otros. Al igual que sus homólogos chavistas, Pedro Sánchez y sus secuaces no tolera la libertad de expresión y la libertad de prensa y, por ello ha anunciado que presentará en julio un plan de “acción democrática” para "acabar con la impunidad de algunos 'pseudomedios' financiados en buena parte por gobiernos de coalición de ultraderecha entre el PP y Vox", que modificará también la ley orgánica sobre el derecho al honor y a la rectificación.

En una entrevista publicada por La Vanguardia y recogida por Europa Press, Sánchez, popularmente conocido como "el rey del fango", ha asegurado que, en su opinión, hay una desconexión “entre la conversación pública y la publicada” porque "algunos tratan de crear un ambiente irrespirable". En opinión del líder de extrema-izquierda, su nuevo plan tratará de transponer la nueva ley de libertad de los medios de comunicación que aprobó en abril el Parlamento Europeo con la que, entre otros cambios, “se sabrá quiénes son los propietarios de los medios, su financiación y habrá una ‘medición objetiva’ cuando se otorguen subvenciones públicas a medios”. Haciendo gala de su voluntad intervencionista, Sánchez ha confirmado que "nuestra obligación es consolidar unos medios de comunicación plurales, diversos, con información veraz”, ha defendido.

El presidente ha reprochado a PP, Vox y al nuevo partido Se Acabó la Fiesta que propaguen “bulos y desinformación en medios de comunicación”, y ha valorado que existe una "polarización asimétrica" que, a su juicio, proviene del no reconocimiento “por parte de la derecha” de los resultados de las elecciones generales que él mismo perdió. Pocas horas después de realizar estas declaraciones, el ministro de Transportes de Pedro Sánchez, el indefinible Óscar Puente, atacaba al jefe de Prensa de la formación Se acabó la fiesta, Vito Quiles, acusándole de ser “un saco de mierda”.