Martes, 11 de Noviembre de 2025

Actualizada Martes, 11 de Noviembre de 2025 a las 07:54:20 horas

Tienes activado un bloqueador de publicidad

Intentamos presentarte publicidad respectuosa con el lector, que además ayuda a mantener este medio de comunicación y ofrecerte información de calidad.

Por eso te pedimos que nos apoyes y desactives el bloqueador de anuncios. Gracias.

Continuar...

Pablo Mosquera
Miércoles, 26 de Febrero de 2025 Tiempo de lectura:

La nueva frontera

Kennedy proclamó en su discurso: "Nos encontramos hoy al borde de una nueva frontera: la frontera de los años 1960, la frontera de oportunidades y peligros desconocidos, la frontera de esperanzas y amenazas incumplidas". De la Nueva Frontera que yace con su inspirador en el cementerio de Arlington, destacaríamos lo que supuso de clara ruptura con la presidencia del anciano Eisenhower, representante de la guerra fría.

 

La Nueva Frontera significó un llamamiento a la inteligencia y la creatividad; la promesa de mayores sacrificios en vez de mayores seguridades; la búsqueda de nuevas áreas no exploradas de la ciencia y del espacio; problemas no resueltos de la paz y la guerra; restos inconquistados de ignorancia y prejuicios; cuestiones no solucionadas de pobreza y excedentes.

 

Como afirmaría en alguno de sus discursos más representativos "nuestra tarea consiste en demostrar que la insatisfecha aspiración del hombre por el progreso económico y la justicia social puede alcanzarse mejor si los seres humanos trabajan en el marco de unas instituciones democráticas..." para insistir en esta frase que resume su biografía: "un hombre hace lo que debe, sin importarle las consecuencias personales, los obstáculos, las presiones ni los peligros y éste es el fundamento de toda moralidad humana".

 

Cualquier parecido con el reciente inquilino de la Casa Blanca mera coincidencia. Pero si noto ciertas coincidencias entre aquel tiempo del Paris en que los estudiantes proferían frases que se hicieron letanías para la juventud de mi generación. Tras la segunda guerra mundial los Estados Unidos de América y Rusia se repartieron el mundo. Chocaron en Alemania, y sufrimos la denominada guerra fría con aquel grave incidente que hubieron de resolver los hermanos Kennedy ante la amenazante presencia del armamento ruso en la isla de Cuba.

 

Ha dado comienzo una nueva etapa, hay otra frontera, La Rusia de Putin aspira a recuperar su hegemonía en la Europa Oriental, y no sólo será Ucrania, temo por Polonia y los países del Báltico. En el occidente, el enemigo a batir por el hombre del estropajo en la cabeza es la Unión Europa, es de suponer que sus dominios se concreten en el Continente Americano y que todas aquellas Organizaciones que no han sido "leales" con ambos mandarines -Trump y Putin- sufran las consecuencias. ¡Hay otro orden mundial!.

 

Como amante de la filosofía y defensor del sistema democrático me temo lo peor. Ambos colosos imperialistas desprecian a la democracia, son un obstáculo para sus pretensiones. También es verdad que a la dama no la hemos cuidado. El Sistema Democrático bajo cuyo paraguas nos hemos resguardado de las inclemencias, me recuerda aquellos viejos barcos de madera que terminaron por hacer aguas y quedarse en las rías para que los chatarreros aficionados los fueran despojando de todo lo que aun podía ser vendido al peso, mientras las cuadernas de madera se iban pudriendo ante los ojos nostálgicos de los viejos patrones y marineros que se despedían de ellos con el recuerdo de las orgullosas singladuras en las que habían compartido mar, cielo y vientos.     

 

La Administración del coloso norte americano cada día nos sorprende. Su primer actor convierte en rito a temer la firma de nuevos decretos reultando mucho más que un espectáculo que provoca reacciones en los mercados y dirigentes. Ya nada será igual. Se terminó el respeto a las Instancias de Bruselas. Convertirá a los Estados Unidos de América en el amo y señor de occidente. La vieja Europa puede hasta desintegrarse.

 

Personalmente y como antiguo alumno de la Universidad Complutense de Madrid, nunca fui devoto de yankilandia. No olvido aquella guerra en el Vietnam o como perdonaron al dictador a cambio de la ubicación en territorio ibérico de las bases militares. ¿ Quién sabe...? Pueden hasta regresar a la base sita en mi querida Estaca de Bares...   

 

Estamos avocados a nuevas fronteras, tecnologías, controles, pago de la deuda, pobreza intelectual  y amenazas constantes por tierra mar y aire. Hasta el caballo de la apocalipsis de la guerra volverá a cabalgar con sus hermanos mientras la vieja Europa busca líderes como Adenauer o Churchill a los que echo de menos.

 

En España el calendario y las estridencias del inquilino del ala este en la Casa Blanca le viene a salvar la piel. Los asuntos de las corrupciones familiares y políticas, son pequeñas cosas ante los monstruos que pisarán nuestros derechos y libertades.

 

¡Dios salve a Europa y a su civilización!.

Portada

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.