¿Es la gravedad una pista de que vivimos en un universo simulado?
![[Img #27946]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/05_2025/8589_captura-de-pantalla-2025-05-03-111658.jpg)
Un nuevo estudio publicado en AIP Advances plantea una sorprendente hipótesis: la gravedad, uno de los pilares fundamentales de la física, podría no ser una fuerza fundamental de la naturaleza, sino una consecuencia de procesos computacionales que rigen un universo simulado.
El físico Melvin M. Vopson, de la Universidad de Portsmouth y el Instituto de Física de la Información, ha desarrollado un modelo que deriva la ley de la gravedad de Newton a partir de principios de teoría de la información, en particular de la llamada segunda ley de la infodinámica, una formulación análoga a la segunda ley de la termodinámica, pero aplicada a la entropía de la información.
Nota: Los suscriptores de La Tribuna del País Vasco pueden solicitar una copia del estudio (en inglés) por los canales habituales: [email protected] o en el teléfono 650114502
Según esta ley, los sistemas tienden a minimizar su entropía informacional con el tiempo. Aplicando esta idea a un universo discretizado —concebido como una red de celdas de información al estilo de una simulación por ordenador— Vopson demuestra que la atracción gravitacional entre cuerpos podría ser interpretada como un proceso de compresión de datos: al agruparse los objetos, se reduce la complejidad del sistema y, por tanto, su carga de información.
"En un universo computacional, es más eficiente rastrear una sola masa que varias dispersas", explica Vopson. Esta idea se alinea con principios conocidos de física teórica, como el principio holográfico y los estudios previos del físico Erik Verlinde sobre la gravedad entrópica, aunque el nuevo trabajo introduce una formulación diferente basada en el entrelazamiento entre masa, energía e información.
La propuesta sugiere que la gravedad no sería una interacción fundamental, sino un efecto emergente de la necesidad de minimizar la complejidad informacional del universo. En otras palabras, la gravedad sería un subproducto de una optimización computacional que gobierna la evolución del cosmos, lo que refuerza la especulativa —pero cada vez más discutida— idea de que vivimos en una simulación digital a gran escala.
Los resultados del estudio abren nuevas vías para comprender fenómenos como la materia oscura, la energía oscura y la termodinámica de los agujeros negros, al tiempo que proponen una fusión entre física, informática y cosmología. Aunque la posibilidad de un universo simulado sigue siendo objeto de debate, Vopson ofrece una elegante conexión entre la gravedad y las reglas de procesamiento de información.
Un nuevo estudio publicado en AIP Advances plantea una sorprendente hipótesis: la gravedad, uno de los pilares fundamentales de la física, podría no ser una fuerza fundamental de la naturaleza, sino una consecuencia de procesos computacionales que rigen un universo simulado.
El físico Melvin M. Vopson, de la Universidad de Portsmouth y el Instituto de Física de la Información, ha desarrollado un modelo que deriva la ley de la gravedad de Newton a partir de principios de teoría de la información, en particular de la llamada segunda ley de la infodinámica, una formulación análoga a la segunda ley de la termodinámica, pero aplicada a la entropía de la información.
Nota: Los suscriptores de La Tribuna del País Vasco pueden solicitar una copia del estudio (en inglés) por los canales habituales: [email protected] o en el teléfono 650114502
Según esta ley, los sistemas tienden a minimizar su entropía informacional con el tiempo. Aplicando esta idea a un universo discretizado —concebido como una red de celdas de información al estilo de una simulación por ordenador— Vopson demuestra que la atracción gravitacional entre cuerpos podría ser interpretada como un proceso de compresión de datos: al agruparse los objetos, se reduce la complejidad del sistema y, por tanto, su carga de información.
"En un universo computacional, es más eficiente rastrear una sola masa que varias dispersas", explica Vopson. Esta idea se alinea con principios conocidos de física teórica, como el principio holográfico y los estudios previos del físico Erik Verlinde sobre la gravedad entrópica, aunque el nuevo trabajo introduce una formulación diferente basada en el entrelazamiento entre masa, energía e información.
La propuesta sugiere que la gravedad no sería una interacción fundamental, sino un efecto emergente de la necesidad de minimizar la complejidad informacional del universo. En otras palabras, la gravedad sería un subproducto de una optimización computacional que gobierna la evolución del cosmos, lo que refuerza la especulativa —pero cada vez más discutida— idea de que vivimos en una simulación digital a gran escala.
Los resultados del estudio abren nuevas vías para comprender fenómenos como la materia oscura, la energía oscura y la termodinámica de los agujeros negros, al tiempo que proponen una fusión entre física, informática y cosmología. Aunque la posibilidad de un universo simulado sigue siendo objeto de debate, Vopson ofrece una elegante conexión entre la gravedad y las reglas de procesamiento de información.