Más sobre el adoctrinamiento educativo
La constante dejación de sus obligaciones por parte de la Alta Inspección del Estado hace que sigamos como estábamos, con unos libros de texto que vulneran de forma flagrante la Constitución Española, sin que nadie mueva un dedo. Con lo cual, la representación del Estado prevarica pues tiene la obligación por juramento de cumplir y hacer cumplir la ley.
Tengo un informe que consta que es de la Subdelegación del Gobierno en el País Vasco, del año 2000, en el que se reflejan los incumplimientos de la legalidad en materia de contenidos, saliéndose de los requisitos constitucionales y estatutarios. Voy a hacer una sucinta descripción de algunos de ellos, a modo de ejemplo, sin pretensión de exhaustividad:
En aquel año, materiales didácticos de editoriales que no tienen veleidades nacionalistas, en principio, como es la editorial Zubia Santillana, para 3º de Primaria, ponen ejercicios como el de ésta editorial, de completar en el mapa de Euskal Herria elementos geográficos. Y en sucesivos capítulos se refiere a paisajes, árboles, industrias, fiestas, personajes, etc, de Euskal Herria. Es bien sabido que ni en la Constitución ni en el Estatuto de Autonomía se contempla la figura política de Euskal Herria que, en el imaginario nacionalista abarca territorios que no son los de la Comunidad Autónoma, invadiendo ámbitos que no le corresponden ni por ley, ni por historia, ni por tradiciones, y que es un planteamiento genuinamente abertzale. Así se adoctrina de forma impune y aberrante a las mentes de niños de 8-9 años.
Pero lo mismo pasa con otra editorial que no se caracteriza por la obediencia nacionalista, o así lo parece, como es Anaya. Así, en el capítulo introductorio al conocimiento del medio para 4º de Primaria, se contemplaba esta presentación que es indicativa de lo que viene en los capítulos respectivos y subsiguientes del libro:
“En cursos anteriores estudiaste qué es el relieve ¿te acuerdas? ¿Qué dirías sobre el relieve de Euskal Herria? ¿Qué dirías sobre su paisaje, sus ríos, sus vías de comunicación? ¿Has hecho alguna excursión por el interior de Euskal Herria? ¿Has visto alguna vez el perfil de un itinerario? ¿Sabes dibujar un perfil?
En esta unidad voy a aprender:
-Conocer mejor Euskal Herria: su relieve, sus provincias, su población, sus vías de comunicación…
-Leer y observar diferentes mapas de Euskal Herria.
-Hacer el perfil de un itinerario.
-Las diferentes formas de viajar por Euskal Herria.
-Analizar una provincia de Euskal Herria.”
Y, efectivamente, a lo largo de toda la materia se desgranan todos los aspectos de un ente jurídico, político y geográfico inexistente, con todo el cuajo, sin que nadie se inmutara ante el atropello. La Subdelegación del Gobierno en Alava contemplaba en su dossier este asunto, y, sin embargo, la Administración del Estado, conocedora obviamente de esta vulneración de la legalidad en los contenidos curriculares, eludió toda actuación, o, eso es lo que parece, pues nada ha cambiado.
Pero no son los únicos casos, pues alguien podría interpretar que son errores, o lapsus por parte de las editoriales, no. Este hecho se repite en otras editoriales, sobre todo, como no podía ser menos, en las que tienen origen u ubicación exclusiva en solar vasco.
No es cuestión de ser prolijos en los detalles y en los ejemplos que se podrían seguir poniendo, hasta el aburrimiento. El informe los recoge. La cuestión es por qué el Estado no interviene o corrige esta aberrante actuación que desborda el ámbito competencial de la Comunidad Autónoma, que vulnera los principios constitucionales, y hace de la educación lo contrario de lo que debe ser ésta, es decir una “comedura de tarro” impresentable e injustificable.
Somos un país muy poco serio. Por eso, todos los informes de evaluación provenientes de instancias internacionales, nos dejan en muy mal lugar, en una posición penosa. Tenemos unos sistemas educativos (no hay sistema estatal fuera de leyes que se vulneran con la impasibilidad del Estado) malos hasta la avaricia, deplorables.
Mi amigo Javier Orrico, catedrático de Lengua y Literatura de Bachillerato, dice en Claves de la Razón Práctica, en el número 237 de este mes: “[…] la posición bochornosa de España en los estudios internacionales PISA, PIAC, PIRLS… y en concreto en el PIAC de 2013 afectando especialmente a los grupos de edad que se educaron por completo en ella. Ni explica tampoco el que los universitarios españoles estén en lectura en peor posición que los bachilleres de Holanda o Japón. Ni que ya a los diez años nuestros niños estén en las últimas posiciones en el informe PIRLS que mide las ‘competencias’ en lectura. Y esto está pasando ahora, hoy, después de 24 años de LOGSE y de un gasto educativo inmenso e inútil”
Ahora bien. La pregunta del millón es por qué las autoridades educativas siguen con el ademán impasible, inasequibles al desaliento. ¿Qué es lo que lleva a nuestros políticos a seguir apostando por la ruina nacional? ¿Habrá algún propósito inconfesable?
Seguiré en sucesivos artículos con esta cuestión de gran importancia, que muy pocos resaltan como uno de nuestros principales problemas. Quizás porque los niños no tienen voz, no pueden quejarse. Y los padres no ejercen su obligación de velar por la preservación de sus intereses, de su educación y de impedir la manipulación de sus inmaduras mentes.
La constante dejación de sus obligaciones por parte de la Alta Inspección del Estado hace que sigamos como estábamos, con unos libros de texto que vulneran de forma flagrante la Constitución Española, sin que nadie mueva un dedo. Con lo cual, la representación del Estado prevarica pues tiene la obligación por juramento de cumplir y hacer cumplir la ley.
Tengo un informe que consta que es de la Subdelegación del Gobierno en el País Vasco, del año 2000, en el que se reflejan los incumplimientos de la legalidad en materia de contenidos, saliéndose de los requisitos constitucionales y estatutarios. Voy a hacer una sucinta descripción de algunos de ellos, a modo de ejemplo, sin pretensión de exhaustividad:
En aquel año, materiales didácticos de editoriales que no tienen veleidades nacionalistas, en principio, como es la editorial Zubia Santillana, para 3º de Primaria, ponen ejercicios como el de ésta editorial, de completar en el mapa de Euskal Herria elementos geográficos. Y en sucesivos capítulos se refiere a paisajes, árboles, industrias, fiestas, personajes, etc, de Euskal Herria. Es bien sabido que ni en la Constitución ni en el Estatuto de Autonomía se contempla la figura política de Euskal Herria que, en el imaginario nacionalista abarca territorios que no son los de la Comunidad Autónoma, invadiendo ámbitos que no le corresponden ni por ley, ni por historia, ni por tradiciones, y que es un planteamiento genuinamente abertzale. Así se adoctrina de forma impune y aberrante a las mentes de niños de 8-9 años.
Pero lo mismo pasa con otra editorial que no se caracteriza por la obediencia nacionalista, o así lo parece, como es Anaya. Así, en el capítulo introductorio al conocimiento del medio para 4º de Primaria, se contemplaba esta presentación que es indicativa de lo que viene en los capítulos respectivos y subsiguientes del libro:
“En cursos anteriores estudiaste qué es el relieve ¿te acuerdas? ¿Qué dirías sobre el relieve de Euskal Herria? ¿Qué dirías sobre su paisaje, sus ríos, sus vías de comunicación? ¿Has hecho alguna excursión por el interior de Euskal Herria? ¿Has visto alguna vez el perfil de un itinerario? ¿Sabes dibujar un perfil?
En esta unidad voy a aprender:
-Conocer mejor Euskal Herria: su relieve, sus provincias, su población, sus vías de comunicación…
-Leer y observar diferentes mapas de Euskal Herria.
-Hacer el perfil de un itinerario.
-Las diferentes formas de viajar por Euskal Herria.
-Analizar una provincia de Euskal Herria.”
Y, efectivamente, a lo largo de toda la materia se desgranan todos los aspectos de un ente jurídico, político y geográfico inexistente, con todo el cuajo, sin que nadie se inmutara ante el atropello. La Subdelegación del Gobierno en Alava contemplaba en su dossier este asunto, y, sin embargo, la Administración del Estado, conocedora obviamente de esta vulneración de la legalidad en los contenidos curriculares, eludió toda actuación, o, eso es lo que parece, pues nada ha cambiado.
Pero no son los únicos casos, pues alguien podría interpretar que son errores, o lapsus por parte de las editoriales, no. Este hecho se repite en otras editoriales, sobre todo, como no podía ser menos, en las que tienen origen u ubicación exclusiva en solar vasco.
No es cuestión de ser prolijos en los detalles y en los ejemplos que se podrían seguir poniendo, hasta el aburrimiento. El informe los recoge. La cuestión es por qué el Estado no interviene o corrige esta aberrante actuación que desborda el ámbito competencial de la Comunidad Autónoma, que vulnera los principios constitucionales, y hace de la educación lo contrario de lo que debe ser ésta, es decir una “comedura de tarro” impresentable e injustificable.
Somos un país muy poco serio. Por eso, todos los informes de evaluación provenientes de instancias internacionales, nos dejan en muy mal lugar, en una posición penosa. Tenemos unos sistemas educativos (no hay sistema estatal fuera de leyes que se vulneran con la impasibilidad del Estado) malos hasta la avaricia, deplorables.
Mi amigo Javier Orrico, catedrático de Lengua y Literatura de Bachillerato, dice en Claves de la Razón Práctica, en el número 237 de este mes: “[…] la posición bochornosa de España en los estudios internacionales PISA, PIAC, PIRLS… y en concreto en el PIAC de 2013 afectando especialmente a los grupos de edad que se educaron por completo en ella. Ni explica tampoco el que los universitarios españoles estén en lectura en peor posición que los bachilleres de Holanda o Japón. Ni que ya a los diez años nuestros niños estén en las últimas posiciones en el informe PIRLS que mide las ‘competencias’ en lectura. Y esto está pasando ahora, hoy, después de 24 años de LOGSE y de un gasto educativo inmenso e inútil”
Ahora bien. La pregunta del millón es por qué las autoridades educativas siguen con el ademán impasible, inasequibles al desaliento. ¿Qué es lo que lleva a nuestros políticos a seguir apostando por la ruina nacional? ¿Habrá algún propósito inconfesable?
Seguiré en sucesivos artículos con esta cuestión de gran importancia, que muy pocos resaltan como uno de nuestros principales problemas. Quizás porque los niños no tienen voz, no pueden quejarse. Y los padres no ejercen su obligación de velar por la preservación de sus intereses, de su educación y de impedir la manipulación de sus inmaduras mentes.