Balance 2024
Malas calles vascas: más violencia presencial, cibercrimen a la baja y el mapa de la inseguridad
    
   
	    
	
    
        
    
    
        
          
		
    
        			        			        			        			        			        			        
    
    
    
	
	
        
        
        			        			        			        			        			        			        
        
                
        
        ![[Img #28891]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/09_2025/4022_aertzaintza.jpg) El País Vasco cerró 2024 con una ligera subida de la delincuencia: 141.190 infracciones conocidas por la "Euskal Polizia" (Ertzaintza y cuerpos locales), lo que supone un incremento del 2% respecto al año anterior. Tras años en los que el crecimiento del crimen se asociaba sobre todo al mundo digital, el último informe oficial del Gobierno Vasco constata un giro inquietante: la calle se hace peligrosa. Suben las lesiones, las agresiones sexuales y los delitos violentos, mientras que el cibercrimen frena su escalada por primera vez desde 2017.
El País Vasco cerró 2024 con una ligera subida de la delincuencia: 141.190 infracciones conocidas por la "Euskal Polizia" (Ertzaintza y cuerpos locales), lo que supone un incremento del 2% respecto al año anterior. Tras años en los que el crecimiento del crimen se asociaba sobre todo al mundo digital, el último informe oficial del Gobierno Vasco constata un giro inquietante: la calle se hace peligrosa. Suben las lesiones, las agresiones sexuales y los delitos violentos, mientras que el cibercrimen frena su escalada por primera vez desde 2017.
 
En 2023, uno de cada cinco delitos cometidos en el País Vasco tenía que ver con Internet. El auge de las ciberestafas —que llegaron a suponer el 90% de los ciberdelitos— parecía no tener techo. Pero en 2024 esa tendencia se moderó: 26.968 denuncias, un 3% menos que el año anterior, y el peso relativo en el conjunto delictivo bajó del 20% al 19%.
 
En paralelo, los delitos presenciales se incrementaron. La tasa subió a 51 por mil habitantes, con especial protagonismo de los hurtos (33% del total), los robos con fuerza (10%) y los daños (8%). El patrimonio sigue siendo el gran objetivo del delito vasco, pero lo que más alarma social genera es el repunte de la violencia física.
 
Lesiones y armas blancas: el pulso de la conflictividad
 
El capítulo de las lesiones experimentó un crecimiento del 4% en 2024, con un aumento significativo en Guipúzcoa (+15%) y en ciudades como San Sebastián. Los informes señalan que este repunte se concentra en contextos de ocio nocturno y conflictos
 
La violencia sexual es otro de los focos en rojo. Tras el repunte estadístico de 2023, asociado a la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, en 2024 las agresiones sexuales aumentaron un 29%. El crecimiento fue generalizado: +42% en Álava, +28% en Vizcaya y +26% en Guipúzcoa.
 
El informe también recoge una ligera subida en los homicidios consumados (un caso más que en 2023, lo que supone un 14% de incremento en términos porcentuales) y un crecimiento en las actuaciones relacionadas con la Ley de Seguridad Ciudadana: 6.798 expedientes sancionadores, de los cuales la mitad fueron por tenencia de drogas o armas y casi otro 40% por desobediencias y faltas de respeto a los agentes.
 
En total, la policía vasca detuvo o investigó a 50.499 personas en 2024, un 10% más que el año anterior. El aumento fue generalizado en delitos contra el patrimonio, lesiones y agresiones sexuales.
 
Los datos reflejan un fenómeno claro: la presión policial crece porque la conflictividad en la calle también lo hace.
        
        
    
       
            
    
        
        
	
    
                                    	
                                        
                                                                                                                                                                        
    
    
	
    
![[Img #28891]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/09_2025/4022_aertzaintza.jpg) El País Vasco cerró 2024 con una ligera subida de la delincuencia: 141.190 infracciones conocidas por la "Euskal Polizia" (Ertzaintza y cuerpos locales), lo que supone un incremento del 2% respecto al año anterior. Tras años en los que el crecimiento del crimen se asociaba sobre todo al mundo digital, el último informe oficial del Gobierno Vasco constata un giro inquietante: la calle se hace peligrosa. Suben las lesiones, las agresiones sexuales y los delitos violentos, mientras que el cibercrimen frena su escalada por primera vez desde 2017.
El País Vasco cerró 2024 con una ligera subida de la delincuencia: 141.190 infracciones conocidas por la "Euskal Polizia" (Ertzaintza y cuerpos locales), lo que supone un incremento del 2% respecto al año anterior. Tras años en los que el crecimiento del crimen se asociaba sobre todo al mundo digital, el último informe oficial del Gobierno Vasco constata un giro inquietante: la calle se hace peligrosa. Suben las lesiones, las agresiones sexuales y los delitos violentos, mientras que el cibercrimen frena su escalada por primera vez desde 2017.
En 2023, uno de cada cinco delitos cometidos en el País Vasco tenía que ver con Internet. El auge de las ciberestafas —que llegaron a suponer el 90% de los ciberdelitos— parecía no tener techo. Pero en 2024 esa tendencia se moderó: 26.968 denuncias, un 3% menos que el año anterior, y el peso relativo en el conjunto delictivo bajó del 20% al 19%.
En paralelo, los delitos presenciales se incrementaron. La tasa subió a 51 por mil habitantes, con especial protagonismo de los hurtos (33% del total), los robos con fuerza (10%) y los daños (8%). El patrimonio sigue siendo el gran objetivo del delito vasco, pero lo que más alarma social genera es el repunte de la violencia física.
Lesiones y armas blancas: el pulso de la conflictividad
El capítulo de las lesiones experimentó un crecimiento del 4% en 2024, con un aumento significativo en Guipúzcoa (+15%) y en ciudades como San Sebastián. Los informes señalan que este repunte se concentra en contextos de ocio nocturno y conflictos
La violencia sexual es otro de los focos en rojo. Tras el repunte estadístico de 2023, asociado a la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, en 2024 las agresiones sexuales aumentaron un 29%. El crecimiento fue generalizado: +42% en Álava, +28% en Vizcaya y +26% en Guipúzcoa.
El informe también recoge una ligera subida en los homicidios consumados (un caso más que en 2023, lo que supone un 14% de incremento en términos porcentuales) y un crecimiento en las actuaciones relacionadas con la Ley de Seguridad Ciudadana: 6.798 expedientes sancionadores, de los cuales la mitad fueron por tenencia de drogas o armas y casi otro 40% por desobediencias y faltas de respeto a los agentes.
En total, la policía vasca detuvo o investigó a 50.499 personas en 2024, un 10% más que el año anterior. El aumento fue generalizado en delitos contra el patrimonio, lesiones y agresiones sexuales.
Los datos reflejan un fenómeno claro: la presión policial crece porque la conflictividad en la calle también lo hace.









