Leopoldo Arnaiz impulsa la transición del urbanismo tradicional al digital
![[Img #29171]](https://latribunadelpaisvasco.com/upload/images/11_2025/433_arnaiz.jpg)
Entrevista con Leopoldo Arnaiz Eguren, presidente de Arnaiz, firma referente en planificación urbana y desarrollo inmobiliario global
Las ciudades están evolucionando hacia un modelo en el que la tecnología y la planificación trabajan de la mano. La inteligencia artificial (IA) y los gemelos digitales están revolucionando la forma en que entendemos el urbanismo, al permitir analizar, simular y anticipar los efectos de cada decisión sobre el territorio. Sin embargo, esta transformación también plantea retos importantes: coordinación institucional, resistencia al intercambio de datos y una normativa que todavía no se adapta al ritmo de la innovación. En esta entrevista, Leopoldo Arnaiz Eguren, presidente de Arnaiz, analiza cómo la IA puede ayudar a diseñar espacios más sostenibles, eficientes y habitables.
¿Por qué es necesario replantear la forma en que planificamos nuestras ciudades y territorios?
El territorio transformado por el ser humano es un entramado complejo, donde cada acción puede tener efectos en áreas que parecen no relacionadas. Por ello, es fundamental realizar un análisis profundo que garantice un uso racional de los espacios, integrando aspectos medioambientales, sociales y de infraestructura.
Desde Arnaiz, defendemos que una planificación coherente mejora la calidad de vida, reduce costes y optimiza la gestión del territorio. Sin embargo, el modelo actual de competencias fragmentadas entre distintas administraciones genera conflictos y lentitud. Es momento de reestructurar el sistema, ya sea mediante reformas legales o con el apoyo de nuevas tecnologías que agilicen los procesos y fortalezcan la resiliencia frente al cambio climático.
¿Qué papel juega la inteligencia artificial en este nuevo enfoque del urbanismo?
La IA y los gemelos digitales aportan una capacidad de análisis y predicción que permite tomar decisiones más informadas. Estas herramientas facilitan la simulación de escenarios y ayudan a evaluar el impacto de los desarrollos urbanísticos antes de ejecutarlos, lo que mejora la eficiencia y reduce los errores.
El principal obstáculo sigue siendo la falta de cooperación entre quienes generan los datos y las entidades encargadas de gestionarlos. Paradójicamente, hoy es más sencillo crear bases de datos con imágenes aéreas que aprovechar la información disponible en las propias administraciones. La inteligencia artificial puede servir como puente entre esas fuentes dispersas, unificando y procesando la información territorial de forma integrada.
Los gemelos digitales permiten proyectar la evolución de una ciudada partir de su estado actual. Representan no solo su estructura física, sino también su funcionamiento: energía, movilidad, densidad de población o distribución de viviendas. Gracias a ello, se pueden anticipar problemas y diseñar soluciones más sostenibles.
¿Qué tipos de IA se están utilizando actualmente en la planificación urbana?
En los proyectos Smart Cityfinanciados por los fondos Next Generation, se están aplicando modelos de IA generativa para procesar grandes volúmenes de información. Sin embargo, el salto cualitativo llegará cuando la automatización se utilice para monitorizar los cambios territoriales en tiempo real y evaluar la viabilidad técnica y ambiental de las propuestas.
Un ejemplo destacado es el del Ayuntamiento de Madrid, que está desarrollando un sistema de IA capaz de verificar si los proyectos BIM cumplen la normativa urbanística. Asimismo, la IA se usa en la gestión del tráfico, donde analiza flujos, optimiza semáforos y reduce la congestión, mejorando la movilidad y la seguridad vial.
¿Qué diferencia aporta la IA respecto a las herramientas tradicionales del urbanismo?
El urbanismo ha pasado de ser un proceso puramente técnico a uno digital y participativo. Las herramientas CAD y GIS modernizaron la forma de representar el territorio, pero la IA introduce la posibilidad de prever el futuro antes de actuar, transformando la planificación en un proceso dinámico y adaptativo.
Aun así, la digitalización de los planes urbanísticos todavía requiere respaldo legal. Un precedente clave fue el Programa de Urbanismo en Red, impulsado por Red.es y desarrollado por Arnaiz, que unificó los formatos de información territorial. La IA, como evolución natural, permite automatizar análisis y detectar oportunidades de transformación urbana con mayor rapidez y precisión.
¿Qué ciudades están aplicando la IA con resultados notables?
En Estocolmo, los sistemas inteligentes regulan los semáforos según el tráfico en tiempo real, reduciendo la congestión. En Barcelona, la IA se integra en el modelo de Smart City, fomentando la participación ciudadana mediante aplicaciones que permiten comunicar incidencias en el espaciopúblico.
Singapur, considerada una de las ciudades más avanzadas del mundo, utiliza una plataforma urbana basada en IA que combina datos de tráfico, clima e infraestructuras. Este sistema ha permitido gestionar los recursos con gran eficiencia y planificar su crecimiento de manera controlada.
¿Qué riesgos conlleva delegar decisiones a los algoritmos?
Toda automatización implica riesgos, pero también los tiene no actuar. En el ámbito urbano, las decisiones suelen tomarse tras procesos participativos y con visión a largo plazo. En este sentido, la IA debe considerarse una herramienta de apoyo técnico que complementa el criterio humano, pero no lo sustituye.
¿Cómo imagina el futuro del urbanismo impulsado por la inteligencia artificial?
Para Leopoldo Arnaiz, el futuro del urbanismo será colaborativo, basado en datos y centrado en las personas. La IA permitirá conectar los sistemas territoriales con los cambios del entorno, promoviendo la cooperación entre gobiernos, empresas y ciudadanía. El objetivo será construir espacios y viviendas sostenibles, eficientes y habitables, en ciudades donde la innovación tecnológica esté al servicio del bienestar colectivo.
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Entrevista con Leopoldo Arnaiz Eguren, presidente de Arnaiz, firma referente en planificación urbana y desarrollo inmobiliario global
Las ciudades están evolucionando hacia un modelo en el que la tecnología y la planificación trabajan de la mano. La inteligencia artificial (IA) y los gemelos digitales están revolucionando la forma en que entendemos el urbanismo, al permitir analizar, simular y anticipar los efectos de cada decisión sobre el territorio. Sin embargo, esta transformación también plantea retos importantes: coordinación institucional, resistencia al intercambio de datos y una normativa que todavía no se adapta al ritmo de la innovación. En esta entrevista, Leopoldo Arnaiz Eguren, presidente de Arnaiz, analiza cómo la IA puede ayudar a diseñar espacios más sostenibles, eficientes y habitables.
¿Por qué es necesario replantear la forma en que planificamos nuestras ciudades y territorios?
El territorio transformado por el ser humano es un entramado complejo, donde cada acción puede tener efectos en áreas que parecen no relacionadas. Por ello, es fundamental realizar un análisis profundo que garantice un uso racional de los espacios, integrando aspectos medioambientales, sociales y de infraestructura.
Desde Arnaiz, defendemos que una planificación coherente mejora la calidad de vida, reduce costes y optimiza la gestión del territorio. Sin embargo, el modelo actual de competencias fragmentadas entre distintas administraciones genera conflictos y lentitud. Es momento de reestructurar el sistema, ya sea mediante reformas legales o con el apoyo de nuevas tecnologías que agilicen los procesos y fortalezcan la resiliencia frente al cambio climático.
¿Qué papel juega la inteligencia artificial en este nuevo enfoque del urbanismo?
La IA y los gemelos digitales aportan una capacidad de análisis y predicción que permite tomar decisiones más informadas. Estas herramientas facilitan la simulación de escenarios y ayudan a evaluar el impacto de los desarrollos urbanísticos antes de ejecutarlos, lo que mejora la eficiencia y reduce los errores.
El principal obstáculo sigue siendo la falta de cooperación entre quienes generan los datos y las entidades encargadas de gestionarlos. Paradójicamente, hoy es más sencillo crear bases de datos con imágenes aéreas que aprovechar la información disponible en las propias administraciones. La inteligencia artificial puede servir como puente entre esas fuentes dispersas, unificando y procesando la información territorial de forma integrada.
Los gemelos digitales permiten proyectar la evolución de una ciudada partir de su estado actual. Representan no solo su estructura física, sino también su funcionamiento: energía, movilidad, densidad de población o distribución de viviendas. Gracias a ello, se pueden anticipar problemas y diseñar soluciones más sostenibles.
¿Qué tipos de IA se están utilizando actualmente en la planificación urbana?
En los proyectos Smart Cityfinanciados por los fondos Next Generation, se están aplicando modelos de IA generativa para procesar grandes volúmenes de información. Sin embargo, el salto cualitativo llegará cuando la automatización se utilice para monitorizar los cambios territoriales en tiempo real y evaluar la viabilidad técnica y ambiental de las propuestas.
Un ejemplo destacado es el del Ayuntamiento de Madrid, que está desarrollando un sistema de IA capaz de verificar si los proyectos BIM cumplen la normativa urbanística. Asimismo, la IA se usa en la gestión del tráfico, donde analiza flujos, optimiza semáforos y reduce la congestión, mejorando la movilidad y la seguridad vial.
¿Qué diferencia aporta la IA respecto a las herramientas tradicionales del urbanismo?
El urbanismo ha pasado de ser un proceso puramente técnico a uno digital y participativo. Las herramientas CAD y GIS modernizaron la forma de representar el territorio, pero la IA introduce la posibilidad de prever el futuro antes de actuar, transformando la planificación en un proceso dinámico y adaptativo.
Aun así, la digitalización de los planes urbanísticos todavía requiere respaldo legal. Un precedente clave fue el Programa de Urbanismo en Red, impulsado por Red.es y desarrollado por Arnaiz, que unificó los formatos de información territorial. La IA, como evolución natural, permite automatizar análisis y detectar oportunidades de transformación urbana con mayor rapidez y precisión.
¿Qué ciudades están aplicando la IA con resultados notables?
En Estocolmo, los sistemas inteligentes regulan los semáforos según el tráfico en tiempo real, reduciendo la congestión. En Barcelona, la IA se integra en el modelo de Smart City, fomentando la participación ciudadana mediante aplicaciones que permiten comunicar incidencias en el espaciopúblico.
Singapur, considerada una de las ciudades más avanzadas del mundo, utiliza una plataforma urbana basada en IA que combina datos de tráfico, clima e infraestructuras. Este sistema ha permitido gestionar los recursos con gran eficiencia y planificar su crecimiento de manera controlada.
¿Qué riesgos conlleva delegar decisiones a los algoritmos?
Toda automatización implica riesgos, pero también los tiene no actuar. En el ámbito urbano, las decisiones suelen tomarse tras procesos participativos y con visión a largo plazo. En este sentido, la IA debe considerarse una herramienta de apoyo técnico que complementa el criterio humano, pero no lo sustituye.
¿Cómo imagina el futuro del urbanismo impulsado por la inteligencia artificial?
Para Leopoldo Arnaiz, el futuro del urbanismo será colaborativo, basado en datos y centrado en las personas. La IA permitirá conectar los sistemas territoriales con los cambios del entorno, promoviendo la cooperación entre gobiernos, empresas y ciudadanía. El objetivo será construir espacios y viviendas sostenibles, eficientes y habitables, en ciudades donde la innovación tecnológica esté al servicio del bienestar colectivo.










