Vox ha ganado la querella interpuesta contra los ocho responsables de la agresión sufrida por los diputados Ignacio Garriga y Rocío de Meer, junto con miembros de su equipo, el 2 de septiembre de 2020 en el barrio del Raval de Barcelona.

Los agresores han sido condenados por 5 delitos de coacciones, 3 delitos de maltrato de obra y un delito de daños, con agravante de discriminación ideológica conforme al artículo 22.4. La pena impuesta incluye una multa de 20 meses, a razón de 5 euros diarios, lo que equivale a 3.000 euros por condenado, privación de libertad en caso de impago, el pago de las costas procesales y la prohibición de acercarse a 1.000 metros de las víctimas, así como de comunicarse con ellas durante dos años.

La agresión, que incluyó el lanzamiento de piedras, huevos, lejía, petardos y otros objetos, es un reflejo de la creciente violencia por parte de grupos extremistas de izquierda que intentan intimidar a aquellos que tienen una ideología diferente.

«La violencia contra Vox no es aislada ni casual: es constante, creciente y cada vez más violenta. Lo que sufrimos en Cataluña es una campaña organizada para silenciar a Vox, intimidar a nuestros cargos públicos y expulsarnos del espacio público. Y lo más grave es que el Gobierno catalán mira hacia otro lado», han afirmado en varias ocasiones desde la formación.

En este sentido, Vox ha reiterado que no permitirá que se minimice esta violencia ni que se deje sin respuesta actos que vulneran los derechos fundamentales, como el derecho a expresarse libremente.