Cómodamente arropados y dormidos, las imágenes de estos bebés serían absolutamente angelicales si no estuvieran rodeados de pistolas, granadas de mano y parafernalia propagandística del autodenominado Estado Islámico (EI). Expertos musulmanes que luchan contra la actividad “publicitaria” del EI creen que estas fotografías de “bebés futuros yihadistas” que comienzan a aflorar en las redes sociales publicadas por sus padres, terroristas del EI, tratan de lanzar un claro mensaje al exterior: “Estos niños serán un desafío para vosotros”.

Otros expertos citados por el periódico australiano “Daily Mail” explican que, con estas imágenes de horror, los fanáticos del Estado Islámico estarían intentando transmitir la idea de que la “lucha va a ser larga”. “Al colocar junto a los bebés el certificado de nacimiento que el propio EI otorga a los recién nacidos, la organización terrorista está tratando de aterrorizar al mundo con el mensaje de que su presencia será por mucho tiempo”, explica Clarke Jones, un profesor de la Universidad Nacional de Australia experto en terrorismo internacional.

Estas imágenes desgarradoras, que están siendo difundidas a modo de denuncia por activistas que luchan contra el autodenominado Estado Islámico desde ciudades sirias bajo el control de los terroristas, ponen de manifiesto la importancia que para los yihadistas tiene la captación temprana de nuevos miembros, cuya formación para el asesinato y la crueldad comienza a los pocos años de vida.