Martes, 16 de Septiembre de 2025

Actualizada Martes, 16 de Septiembre de 2025 a las 08:26:21 horas

Tienes activado un bloqueador de publicidad

Intentamos presentarte publicidad respectuosa con el lector, que además ayuda a mantener este medio de comunicación y ofrecerte información de calidad.

Por eso te pedimos que nos apoyes y desactives el bloqueador de anuncios. Gracias.

Continuar...

David R
Sábado, 31 de Octubre de 2015 Tiempo de lectura:

Reyes absolutistas en Cataluña

Forcadell no tiene vergüenza porque cinco meses después de dejar el liderazgo de la Asamblea Nacional Catalana ha sido nombrada presidenta del parlamento autonómico desde cuya tribuna ha lanzado un discurso alucinante, como lo es el hecho de aceptar el cargo cuando todos estábamos hartos de oírla decir que ella no tenía ningún interés en dar el salto a la política profesional; toma ya, presidenta del parlamento, la segunda autoridad en Cataluña, pero... Sra. Forcadell, no se confunda demasiado, autoridad que le confiera el Estatuto de Autonomía que emana de la Constitución de 1978, no es una autoridad ex-novo.

 

Salto cualitativo porque todos sabemos que es, que ha sido y que pretende la ANC, es cierto que nunca lo ocultaron, como lo es que sus propósitos son ilegales, antidemocráticos, egoístas, absurdos y radicales; parten de la base del hecho diferencial, o sea, que "ellos" son diferentes. Recuerda los episodios más oscuros de la historia.

 

Tiene "bemoles" que ella y con ella todos los que aspiran a conseguir la independencia estén utilizando las instituciones oficiales que existen gracias al sistema democrático que quieren destruir, porque se trata de eso, de destruir el marco de convivencia democrática del que nos dotamos todos los españoles en 1978, un marco en el que mujeres y hombres, todos ciudadanos, puedan vivir en condiciones de máxima igualdad y no en condiciones en las que ya viven muchos ciudadanos en Cataluña. Y para ello, por supuesto, no utilizan dinero de su bolsillo, sino el de todos los españoles, el dinero público.

 

Que esta mujer lance la proclama "viva la república catalana" desde la tribuna de la institución autonómica más importante es un insulto a la inteligencia de los españoles y muy especialmente a la mayoría de los catalanes, que no quieren la independencia y que no apoyan un "proceso" que conduce rápidamente al abismo, a la ruptura total de la sociedad, al desastre económico, al aislamiento internacional y que si continúa devendrá en violencia (si es que no está ya presente).

 

El gobierno de la nación está tardando en actuar, dispone de los instrumentos legales necesarios para obligar al estricto cumplimiento de la Ley a cualquier ciudadano, y no los está utilizando, y mientras tanto en Cataluña cada vez más ciudadanos españoles se saltan la Ley con una impunidad que empieza a ser escandalosa. El gobierno observa el incendio, no le hecha gasolina, pero tampoco lo apaga, y puede ocurrir que cuando se vea obligado a actuar forzado por los acontecimientos o presionado por la comunidad internacional, sea demasiado tarde, si no lo es ya.

 

Esta mujer consigue ese cargo, que antaño denostaba y ahora le hace tan feliz, con el imprescindible voto de los diputados de Podemos (5) que se integran en "Cataluña si se puede". Señoras y señores de Podemos, háganselo mirar; pobre Pablo Iglesias.

 

Forcadell dice: "Queremos un marco jurídico propio, rompemos con la etapa autonómica y protagonizamos un momento fundacional", es sencillamente intolerable. Estos personajes lo único que quieren es más y mejor "poltrona" para vivir muy bien y ocultar una corrupción sistémica en Cataluña, y les da igual que el precio a pagar sea el más alto: la democracia, la convivencia y la paz. No quieren una república, quieren ser reyes absolutistas.

Etiquetada en...

Portada

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.