Busca la remoción forzosa de su junta directiva
Venezuela, en la antesala de un golpe de Estado: Nicolás Maduro apunta a la disolución de la Asamblea Nacional
El presidente bolivariano de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado la posible disolución de facto de la Asamblea Nacional con la remoción forzosa de su junta directiva. Para proporcionar un matiz de legalidad a lo que realmente es situarse en la antesala de un auténtico golpe de Estado, Maduro introducirá una demanda contra la directiva de la Asamblea Nacional a través del Tribunal Superior de Justicia por “usurpar funciones constitucionales” del presidente de la República.
“Mañana mismo voy a meter una demanda contra la directiva de la AN por usurpar funciones constitucionales del presidente de la República, con recurso de amparo inmediato y quiero hacer un juicio histórico para demostrar la traición a la patria que ha tenido esta gente. Ramos Allup ha usurpado funciones constitucionales exclusivas del presidente de la República”, afirmó el jefe de Estado desde Miraflores.
En su intervención, Maduro explicó que el artículo 236 de la Constitución establece las atribuciones del presidente: “Cumplir y hacer cumplir esta Constitución y la ley, dirigir la acción de gobierno, nombrar y remover vicepresidentes y ministros y dirigir las relaciones exteriores de la República y celebrar y ratificar los tratados convenios o acuerdos internacionales”.
Hay que recordar que la Organización de los Estados Americanos ha anunciado que empezará a tomar medidas en contra de Venezuela para defender la democracia en la región, una estrategia reservada para países en procesos de crisis como los golpes de Estado.
El anuncio de la OEA, un grupo que representa a todos los países del hemisferio con excepción de Cuba, inicia un proceso que eventualmente podría conducir a que Venezuela sea suspendida de la organización.
El organismo calificó la situación como una "alteración del orden constitucional" en Venezuela. Sergio Jellinek, un portavoz del secretario general del organismo, Luis Almagro, dijo que Venezuela estaba plagada de “un sistema político sin resultados, donde opera el gobierno por decreto”.
El presidente bolivariano de Venezuela, Nicolás Maduro, ha anunciado la posible disolución de facto de la Asamblea Nacional con la remoción forzosa de su junta directiva. Para proporcionar un matiz de legalidad a lo que realmente es situarse en la antesala de un auténtico golpe de Estado, Maduro introducirá una demanda contra la directiva de la Asamblea Nacional a través del Tribunal Superior de Justicia por “usurpar funciones constitucionales” del presidente de la República.
“Mañana mismo voy a meter una demanda contra la directiva de la AN por usurpar funciones constitucionales del presidente de la República, con recurso de amparo inmediato y quiero hacer un juicio histórico para demostrar la traición a la patria que ha tenido esta gente. Ramos Allup ha usurpado funciones constitucionales exclusivas del presidente de la República”, afirmó el jefe de Estado desde Miraflores.
En su intervención, Maduro explicó que el artículo 236 de la Constitución establece las atribuciones del presidente: “Cumplir y hacer cumplir esta Constitución y la ley, dirigir la acción de gobierno, nombrar y remover vicepresidentes y ministros y dirigir las relaciones exteriores de la República y celebrar y ratificar los tratados convenios o acuerdos internacionales”.
Hay que recordar que la Organización de los Estados Americanos ha anunciado que empezará a tomar medidas en contra de Venezuela para defender la democracia en la región, una estrategia reservada para países en procesos de crisis como los golpes de Estado.
El anuncio de la OEA, un grupo que representa a todos los países del hemisferio con excepción de Cuba, inicia un proceso que eventualmente podría conducir a que Venezuela sea suspendida de la organización.
El organismo calificó la situación como una "alteración del orden constitucional" en Venezuela. Sergio Jellinek, un portavoz del secretario general del organismo, Luis Almagro, dijo que Venezuela estaba plagada de “un sistema político sin resultados, donde opera el gobierno por decreto”.