Pide a los ciudadanos que sean “los ojos y los oídos” de la Policía
El jefe de la Policía de Londres reconoce que es prácticamente imposible impedir un nuevo atentado islamista en la capital británica
En un artículo que ha publicado recientemente en la web del periódico Daily Mail británico, el jefe de Policía de Londres, Sir Bernard Hogan-Howe, lamenta profundamente no ser capaz de tranquilizar a los ciudadanos sobre la amenaza del terrorismo islamista. “Que se produzca un nuevo atentado no es una posibilidad, sino una cuestión de tiempo”.
Hogan-Howe explica que atentados islamistas como los que se han producido recientemente en Francia y Alemania “son casi imposibles de detener, en particular debido a sus nuevos procedimientos, que requieren de poca organización y coordinación”.
El máximo responsable policial de Londres reconoce que el estilo de vida británico y la cultura del país no facilita la lucha contra el terror. “La gran mayoría de nuestros oficiales están desarmados y, de hecho, creo que esto nos da una relación mucho más sana con la gente. Nuestros oficiales de barrio son nuestra mejor arma. Ellos son nuestros ojos y oídos”.
Bernard Hogan-Howe reconoce en su texto que, pocas horas después de los terribles acontecimientos sucedidos en París en noviembre del pasado año, “me di cuenta de que el ataque que habíamos presenciado a sólo 200 millas de Londres requería una gran respuesta.
Así que aumentamos el número de agentes especialmente entrenados y equipados para hacer frente a terroristas fuertemente armados”.
En este sentido, el máximo responsable policial asegura que ha aumentado en más de 2.000 el número de agentes armados en Londres y alaba el valor de estos profesionales, que tienen familias y que son conscientes de que las decisiones que tomen pueden ser posteriormente revisadas y examinadas en investigaciones de asuntos internos que pueden durar años”.
En su artículo, Bernard Hogan-Howe insiste en que “la amenaza que todos enfrentamos es muy real. (…) Londres es una ciudad vibrante y es un lugar que todo el mundo quiere visitar y en que todo el mundo quiere vivir. (…) Ayúdenos a mantener esta forma de vida, sean nuestros ojos y oídos contra el terrorismo mientras disfrutan de nuestra ciudad y de nuestras libertades”.
“Estos pueden parecer tiempos oscuros y desesperados”, explica Hogan-Howe, “pero la derrota del terrorismo también pasa por negarse a tener miedo. Por negarse a cambiar nuestras creencias, nuestros valores y nuestro modo de vida. No vamos a ser como ellos. No vamos a odiar. No vamos a ser intimidados. Y por ello nunca nos van a ganar”.
Artículo íntegro (en inglés)
En un artículo que ha publicado recientemente en la web del periódico Daily Mail británico, el jefe de Policía de Londres, Sir Bernard Hogan-Howe, lamenta profundamente no ser capaz de tranquilizar a los ciudadanos sobre la amenaza del terrorismo islamista. “Que se produzca un nuevo atentado no es una posibilidad, sino una cuestión de tiempo”.
Hogan-Howe explica que atentados islamistas como los que se han producido recientemente en Francia y Alemania “son casi imposibles de detener, en particular debido a sus nuevos procedimientos, que requieren de poca organización y coordinación”.
El máximo responsable policial de Londres reconoce que el estilo de vida británico y la cultura del país no facilita la lucha contra el terror. “La gran mayoría de nuestros oficiales están desarmados y, de hecho, creo que esto nos da una relación mucho más sana con la gente. Nuestros oficiales de barrio son nuestra mejor arma. Ellos son nuestros ojos y oídos”.
Bernard Hogan-Howe reconoce en su texto que, pocas horas después de los terribles acontecimientos sucedidos en París en noviembre del pasado año, “me di cuenta de que el ataque que habíamos presenciado a sólo 200 millas de Londres requería una gran respuesta.
Así que aumentamos el número de agentes especialmente entrenados y equipados para hacer frente a terroristas fuertemente armados”.
En este sentido, el máximo responsable policial asegura que ha aumentado en más de 2.000 el número de agentes armados en Londres y alaba el valor de estos profesionales, que tienen familias y que son conscientes de que las decisiones que tomen pueden ser posteriormente revisadas y examinadas en investigaciones de asuntos internos que pueden durar años”.
En su artículo, Bernard Hogan-Howe insiste en que “la amenaza que todos enfrentamos es muy real. (…) Londres es una ciudad vibrante y es un lugar que todo el mundo quiere visitar y en que todo el mundo quiere vivir. (…) Ayúdenos a mantener esta forma de vida, sean nuestros ojos y oídos contra el terrorismo mientras disfrutan de nuestra ciudad y de nuestras libertades”.
“Estos pueden parecer tiempos oscuros y desesperados”, explica Hogan-Howe, “pero la derrota del terrorismo también pasa por negarse a tener miedo. Por negarse a cambiar nuestras creencias, nuestros valores y nuestro modo de vida. No vamos a ser como ellos. No vamos a odiar. No vamos a ser intimidados. Y por ello nunca nos van a ganar”.
Artículo íntegro (en inglés)