Incluye asignaciones mensuales
Bruselas repartirá entre los refugiados un millón de tarjetas de débito precargadas con fondos “para sus necesidades”
La Comisión Europea repartirá un millón de tarjetas de débito entre las familias de refugiados instaladas en Turquía, a las que transferirá una asignación mensual para que puedan cubrir sus necesidades básicas más urgentes.
Este programa de ayuda directa a los refugiados, que está dotado con 348 millones de euros, permite esquivar a los intermediarios, con lo que se logra "reducir costes" y "maximizar el alcance" de la ayuda a los más necesitados, ha explicado el comisario de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides.
La asignación a cada familia se decidirá en base a sus necesidades específicas y también teniendo en cuenta otros factores como si, por ejemplo, recibe otro tipo de asistencia social.
Bruselas ha diseñado este programa en colaboración con el Programa Mundial de Alimentos, la Media Luna Roja y con las autoridades turcas y espera que las primeras transferencias se hagan "en octubre de este año". "Es un programa único que protege la dignidad de los refugiados y les da capacidad financiera para enviar a sus hijos a la escuela y comprar las necesidades básicas para sostener sus familias", ha explicado el presidente de la Media Luna Roja, Kerem Kinik.
El objetivo es que se alcance el millón de personas adscritas al programa en el primer trimestre de 2017.
La Comisión Europea repartirá un millón de tarjetas de débito entre las familias de refugiados instaladas en Turquía, a las que transferirá una asignación mensual para que puedan cubrir sus necesidades básicas más urgentes.
Este programa de ayuda directa a los refugiados, que está dotado con 348 millones de euros, permite esquivar a los intermediarios, con lo que se logra "reducir costes" y "maximizar el alcance" de la ayuda a los más necesitados, ha explicado el comisario de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides.
La asignación a cada familia se decidirá en base a sus necesidades específicas y también teniendo en cuenta otros factores como si, por ejemplo, recibe otro tipo de asistencia social.
Bruselas ha diseñado este programa en colaboración con el Programa Mundial de Alimentos, la Media Luna Roja y con las autoridades turcas y espera que las primeras transferencias se hagan "en octubre de este año". "Es un programa único que protege la dignidad de los refugiados y les da capacidad financiera para enviar a sus hijos a la escuela y comprar las necesidades básicas para sostener sus familias", ha explicado el presidente de la Media Luna Roja, Kerem Kinik.
El objetivo es que se alcance el millón de personas adscritas al programa en el primer trimestre de 2017.