Informe
¿Es el momento de comprar una vivienda?
![[Img #9922]](upload/img/periodico/img_9922.jpg)
La crisis económica ha provocado una caída de precios generalizada en el sector inmobiliario. Hoy en día parece que los precios han tocado fondo y empiezan a recuperarse. ¿Es pues un buen momento para comprar una casa? Si bien no existe una manera de responder a esta pregunta de forma matemática, podemos decir que son varios los factores que se inclinan a favor de esta opción.
Los últimos datos del INE muestran por ejemplo como la concesión de hipotecas no ha dejado de crecer en los pasados meses. La reactivación de la economía ha animado a muchos a embarcarse de nuevo en esta aventura, optando por pedir una hipoteca. El dinero vuelve a fluir, y si bien estamos en una situación aún alejada del estado de la economía previo a la crisis, esta empieza a mostrar signos de mejoría.
El stock de casas de bancos sigue siendo muy elevado, y mientras estos intentan quitárselas de las manos, podría ser un buen momento para hacerse con un inmueble a precio de costo. Otra de las razones que podemos tener en cuenta es la caída del Euribor que sigue en valores mínimos y hace por lo tanto a las hipotecas más soportables. Esta situación podría cambiar sin embargo en los próximos meses, por lo que vale la pena aprovechar esta unión de variables que forma un cóctel único.
La subida de los precios de alquiler es otra de las muestras del alza de precios y de la buena salud de la economía española. Son muchos los factores que nos llevan a tomar una visión optimista del mercado, que vivió sus momentos más negros después del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Hemos de ser sin embargo precavidos, y tener en cuenta que la economía aún no ha salido de una zona de peligro, pudiendo replegarse en años futuros.
A pesar de ello, podemos ver luz al final del túnel. Son más los auspicios positivos que negativos y podemos vivir una auténtica explosión económica a corto plazo. La cuestión es comprar mientras siga existiendo sobreoferta y los precios se mantengan en valores mínimos. Es importante a su vez aprender de los errores del pasado y no dejarnos llevar por un mercado irracional, sabiendo salir a tiempo de una manera estudiada.
La crisis económica ha provocado una caída de precios generalizada en el sector inmobiliario. Hoy en día parece que los precios han tocado fondo y empiezan a recuperarse. ¿Es pues un buen momento para comprar una casa? Si bien no existe una manera de responder a esta pregunta de forma matemática, podemos decir que son varios los factores que se inclinan a favor de esta opción.
Los últimos datos del INE muestran por ejemplo como la concesión de hipotecas no ha dejado de crecer en los pasados meses. La reactivación de la economía ha animado a muchos a embarcarse de nuevo en esta aventura, optando por pedir una hipoteca. El dinero vuelve a fluir, y si bien estamos en una situación aún alejada del estado de la economía previo a la crisis, esta empieza a mostrar signos de mejoría.
El stock de casas de bancos sigue siendo muy elevado, y mientras estos intentan quitárselas de las manos, podría ser un buen momento para hacerse con un inmueble a precio de costo. Otra de las razones que podemos tener en cuenta es la caída del Euribor que sigue en valores mínimos y hace por lo tanto a las hipotecas más soportables. Esta situación podría cambiar sin embargo en los próximos meses, por lo que vale la pena aprovechar esta unión de variables que forma un cóctel único.
La subida de los precios de alquiler es otra de las muestras del alza de precios y de la buena salud de la economía española. Son muchos los factores que nos llevan a tomar una visión optimista del mercado, que vivió sus momentos más negros después del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Hemos de ser sin embargo precavidos, y tener en cuenta que la economía aún no ha salido de una zona de peligro, pudiendo replegarse en años futuros.
A pesar de ello, podemos ver luz al final del túnel. Son más los auspicios positivos que negativos y podemos vivir una auténtica explosión económica a corto plazo. La cuestión es comprar mientras siga existiendo sobreoferta y los precios se mantengan en valores mínimos. Es importante a su vez aprender de los errores del pasado y no dejarnos llevar por un mercado irracional, sabiendo salir a tiempo de una manera estudiada.