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Martes, 29 de Noviembre de 2016 Tiempo de lectura:

Objetivo: asesinar a Fidel Castro

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El mafioso de origen francés y agente de la CIA, Michel Victor Mertz fue asignado a la operación ZR/Rifle liderada por William King Harvey desde noviembre de 1961 y cuyo objetivo era asesinar a Fidel Castro. Sin embargo, Harvey afirma que ZR/Rifle comenzó su actividad a principios de 1961 y no en la fecha indicada por el director del CIA.


Sea como fuere, además de Mertz, Harvey reclutó al agente David Sánchez Morales que, por aquel entonces, operaba en la base de la CIA en la Ciudad de México siendo transferido a la famosa estación JM-WAVE que la agencia disponía en Miami. William King Harvey también incorporó a la operación a los mafiosos Johnny Roselli, Meyer Lansky y Santo Trafficante.


Johnny Roselli era el representante de la mafia de Chicago en Hollywood y Las Vegas y amigo personal del magnate Howard Hughes. Tanto la mafia de Chicago como Hughes habían perdido sus casinos y hoteles en Cuba tras ser nacionalizados por el gobierno revolucionario liderado por Fidel Castro que controlaba la isla caribeña desde enero de 1959. Según Edgar Hoover, Johnny Roselli era muy cercano al círculo de Richard Nixon, el adversario de Kennedy en las elecciones de 1960. Los jefes mafiosos de Chicago ordenaron a Roselli que se pusiera en contacto y colaborase con la CIA en sus operaciones para asesinar a Castro.


Durante la dictadura de Batista, Lansky y Trafficante estaban considerados como dos de los principales líderes mafiosos de Cuba. La victoria de los castristas supuso la incautación de todos sus bienes, la abolición del juego y la expulsión del país al ser tildados por el gobierno de La Habana como "extranjeros indeseables". Ambos mafiosos perdieron cientos de millones de dólares con la llegada de Castro al poder y juraron vengarse del dirigente revolucionario. Tras su regreso a Estados Unidos, tanto Meyer Lansky como Santo Trafficante entraron en contacto con la CIA y la Oficina de Inteligencia Naval (ONI) y se ofrecieron para participar en cualquier operación que tuviera como finalidad derrocar a Fidel Castro y su gobierno.

 

Lansky y Trafficante conocieron durante su estancia en La Habana a Jack Ruby, el enlace de la mafia de Chicago en Dallas que asesinaría posteriormente a Lee Harvey Oswald y vinculado políticamente al entonces congresista Richard Nixon. Según William King Harvey, Johnny Roselli convenció a Meyer Lansky y Santo Trafficante para que participaran en ZR/Rifle. Lansky llegó incluso a financiar la operación con un millón de dólares. Harvey estudió las posibilidades y llegó a la conclusión de que la opción más factible era asesinar a Castro mediante envenenamiento.


El primer intento tuvo lugar en marzo de 1961, por lo que parece improbable que fuera Michel Victor Mertz ya que, según el informe de la CIA que confirmó Richard Helms, Mertz pasó el mes de marzo acompañando personalmente el envío por barco de 100 kilogramos de heroína camuflada en un vehículo y, tras la entrega de la mercancía, volvió a París el 27 de marzo trasladándose posteriormente a Frankfurt. El día 12 del citado mes, los mafiosos Sam Giancana, Santo Trafficante y Johnny Roselli se encontraron con los agentes de la CIA Jim O'Connell y Robert Maheu en el Hotel Fontainebleau de Miami Beach. Según Harvey, O'Connell entregó a Roselli 10.000 dólares en efectivo y píldoras venenosas para ser usadas contra Castro.


El investigador Richard Mahoney explicó en su libro "Hijos y hermanos, los días de Jack y Bobby Kennedy", publicado en 1999 que en la noche del 13 de marzo, Johnny Roselli contactó con un cubano llamado Rafael Gener apodado "Macho". Mahoney afirma que el propósito real de Roselli no era asesinar a Castro sino dejar en evidencia a la CIA por emplear mafiosos en sus operaciones. En todo caso, el plan falló y Castro evitó ser envenenado.

 

(*) J. Sáenz de Oca es escritor y autor del libro "Michel Victor Mertz: El francés que asesinó a JFK", de reciente publicación.

 


 

 

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