Las familias de tres víctimas del atentado islamista contra una discoteca gay de Orlando (Estados Unidos) que se produjo el pasado mes de junio han presentado una demanda contra Google, Facebook y Twitter por ser, en su opinión, plataformas propagandística del autodenominado Estado islámico.

En su denuncia, según informa “Time”, las familias aseguran que “Google, Facebook y Twitter proporcionan material de apoyo” al autodenominado Estado Islámico. De hecho, las familias aseguran que la utilización intensiva de estas plataformas tecnológicas sirvió a Omar Mateen para radicalizarse y cometer uno de los tiroteos más mortíferos de la historia de Estados Unidos. La demanda añade que, “sin Google, Facebook o Twitter, el crecimiento explosivo del autodenominado Estado Islámico no se hubiera producido”.

El atentado contra la discoteca gay de Orlando, en el que murieron 49 personas y 53 más resultaron heridas, fue cometido por Omar Mateen, que dijo que su crimen era una respuesta a los ataques ataques aéreos estadounidenses contra el Estado Islámico en Irak y Siria.