El ministro francés de Agricultura, Stéphane Le Foll, ha anunciado que para tratar de poner fin a la contaminación de la gripe aviar se están sacrificando todas las aves de granja del departamento de las Landas (situado apenas a unas decenas de kilómetros del País Vasco), el principal centro de producción de patos del país, donde aún quedan unos 600.000.

Le Foll justificó esta medida radical porque "el virus ha progresado del este al oeste" del departamento de las Landas e insistió en que el objetivo es "tratar de estabilizar" la situación, en una entrevista radio-televisada por "RMC" y “BFMTV". Al parecer, con esta decisión, el Gobierno francés pretende llevar a cabo una "acción de profilaxis de forma general y poder a continuación reanudar la producción”.

La decisión del Gobierno va en la línea de lo que habían solicitado los ganaderos, que en una reunión del Comité Interprofesional de Palmípedos, habían pedido un refuerzo de la estrategia de lucha contra esta enfermedad, que se había declarado en Francia en noviembre pasado.

Desde que se identificó la presencia del virus H5N8 de la gripe aviar a finales de noviembre en Francia, adonde llegó de la mano de aves migratorias, se han sacrificado casi seis millones de patos, lo que significa un 15% de la producción nacional.

Según las estimaciones realizadas por el CIFOG, comité que representa a los criadores landeses de aves, las pérdidas producidas por el brote de gripe aviar en la región han ascendido, hasta el momento, a 250 millones de euros. Hay que recordar que las Landas es una de las principales zonas productoras de foie gras y de otros derivados del pato de Francia.