El 70% de los húngaros está en contra de la admisión de migrantes sirios
Europa del Este se opone a la inmigración musulmana
Una encuesta de Gallup publicada recientemente indica que en Europa Central y Oriental la gran mayoría de los ciudadanos se opone a que los migrantes sirios ingresen en su país. "En nueve de los quince países de la región al menos la mitad de la población creía que su país no debía aceptar a ningún refugiado sirio", señala el informe.
Los húngaros representan el porcentaje más alto entre los europeos que se oponen a que los sirios sean admitidos a su país: siete húngaros de cada diez están en contra de la reubicación de los migrantes. "Esa misma actitud se mostraba similarmente marcada (un 66 por ciento) en Macedonia, el país balcánico que se hallaba en la primera línea de la ola migratoria de 2015 y tuvo que cerrar su frontera con Grecia para mantener fuera a los indocumentados", informó Gallup. "Menos del 8 por ciento de los residentes de los países encuestados en 2016, dijo que su país debía aceptar a todos los refugiados sirios."
La encuesta también reveló que las naciones con una población musulmana considerable, como Bosnia y Herzegovina, Albania y Kosovo, estaban más dispuestas a recibir a los migrantes musulmanes procedentes de Siria. Kosovo fue el país más abierto a aceptar un número limitado de refugiados sirios: el 49 por ciento de los encuestados se manifestó a favor de su acogida. "El dilema ahora, y probablemente en el futuro, será cómo lidiar con la división de Europa sobre ¿qué hacer con los refugiados?" - concluyó Gallup su encuesta.
Los líderes de Hungría, Polonia, Eslovaquia y Chequia - donde la opinión pública se mantiene firmemente en contra de aceptar a los migrantes musulmanes - han rechazado abiertamente la política de la UE que exige que los estados miembros acojan un determinado número de personas.
Los resultados de la encuesta de Gallup se basan en entrevistas cara a cara con 1.000 adultos en cada país, realizadas entre abril y julio de 2016, con un margen de error de más del 3%. "Además del error de muestreo, la formulación de preguntas y las dificultades prácticas en la realización de encuestas pueden introducir errores o sesgos en las conclusiones de las encuestas de opinión pública." - señaló la organización.
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Una encuesta de Gallup publicada recientemente indica que en Europa Central y Oriental la gran mayoría de los ciudadanos se opone a que los migrantes sirios ingresen en su país. "En nueve de los quince países de la región al menos la mitad de la población creía que su país no debía aceptar a ningún refugiado sirio", señala el informe.
Los húngaros representan el porcentaje más alto entre los europeos que se oponen a que los sirios sean admitidos a su país: siete húngaros de cada diez están en contra de la reubicación de los migrantes. "Esa misma actitud se mostraba similarmente marcada (un 66 por ciento) en Macedonia, el país balcánico que se hallaba en la primera línea de la ola migratoria de 2015 y tuvo que cerrar su frontera con Grecia para mantener fuera a los indocumentados", informó Gallup. "Menos del 8 por ciento de los residentes de los países encuestados en 2016, dijo que su país debía aceptar a todos los refugiados sirios."
La encuesta también reveló que las naciones con una población musulmana considerable, como Bosnia y Herzegovina, Albania y Kosovo, estaban más dispuestas a recibir a los migrantes musulmanes procedentes de Siria. Kosovo fue el país más abierto a aceptar un número limitado de refugiados sirios: el 49 por ciento de los encuestados se manifestó a favor de su acogida. "El dilema ahora, y probablemente en el futuro, será cómo lidiar con la división de Europa sobre ¿qué hacer con los refugiados?" - concluyó Gallup su encuesta.
Los líderes de Hungría, Polonia, Eslovaquia y Chequia - donde la opinión pública se mantiene firmemente en contra de aceptar a los migrantes musulmanes - han rechazado abiertamente la política de la UE que exige que los estados miembros acojan un determinado número de personas.
Los resultados de la encuesta de Gallup se basan en entrevistas cara a cara con 1.000 adultos en cada país, realizadas entre abril y julio de 2016, con un margen de error de más del 3%. "Además del error de muestreo, la formulación de preguntas y las dificultades prácticas en la realización de encuestas pueden introducir errores o sesgos en las conclusiones de las encuestas de opinión pública." - señaló la organización.
