Oye, mira, que sí, que me acabo de quedar la mar de tranquilo. Por unos días estuve preocupado pensando que iba a pasar unas vacaciones sufriendo, con mal dormir y sin disfrutar esos días playeros con cervecitas bien frescas, con sardinas a la plancha y algún que otro mojito, ante el mal panorama que se presentaba y que los telediarios no paraban de airear. Ná, que ni una buena noticia, todo incertidumbre.

Temí que ese mínimo tiempo en el paraíso terrenal de los pobres mortales que curramos todo el año para disfrutar de un poco de falsa felicidad, ya que sabes que tienes que volver a la rutina de todo el año, se me iba a agriar, pero no, todo va a ir de guachi, como decía una señora sesentona en una cala de Menorca, mientras se contoneaba con sus caídos pechos al aire, comportándose como si fuese una quinceañera. Oye, que a la señora se le veía muy feliz, hasta daba envidia…, pues como ella voy a estar yo este verano, guachi, feliz y completo, que ya estaba bien de malas noticias.

Y es que todos los días he venido devorando las noticias de los telediarios, noticieros y programas afines, incluso el parte radiofónico y los NODOS del cine, con la ansiedad de escuchar esas noticias tranquilizadoras que me dejaran pasar un buen verano.

Con avidez he estado mirando y escuchando los informativos contándonos el drama de Siria, los inmigrantes en patera que se ahogan, los campamentos de refugiados, los incendios de Londres, los atentados con decenas de muertos, el hambre en Africa, la falta de medicinas en las aldeas bombardeadas por los musulmanes rebeldes, lo del jodido Brexit que veremos a ver qué pasa, a Rajoy buscando apoyos para aprobar los presupuestos, ahora que parece un demócrata de siempre, al Pedro Sánchez deshojando la margarita de sus convicciones religiosas "…con Iglesias sí, con Iglesias no,…", al Iglesias con las mociones de censura para ganar notoriedad y evitar seguir cayendo, el suicidio de Blesa, la detención de Villar, la presumible investigación de mi Pili Barreiros, las imputaciones, o como se diga, de Pedro Antonio Sánchez, el expresi de Murcia, …, y así, muchas y muchas noticias, comiéndomelas todas, una a una, día a día, ¡que hartazón!, con lo afligido y angustiado que estaba.

Y cuando ya creí que me iba a ir de vacaciones lleno de sufrimiento y preocupación, ¡zás!, ¡Dios existe!, todos los medios se han hecho eco de las noticias esperadas con ansiedad…, todo está resuelto y muy bien…, ¡qué tranquilidad me ha entrado!, ya me puedo ir de vacaciones a disfrutar a tope con mi barriga cervecera y mi bañador paquetero, como buen español de los años cincuenta.

¿Qué…?, ¿si ha habido un milagro terrenal y todo se ha resuelto?…, pues no sé si ha sido milagro o no, pero no sabes lo a gusto y tranquilo que me he quedado sabiendo que Messi se queda en el Barsa, con mejora de sueldo y sus problemas judiciales terminados, que no veas lo mal que lo "hemos" pasado; Ronaldo sigue en el Madrid y con más sueldo, que ya empezábamos a temer que se pusiera melancólico;  Morata se va del Madrid, pero no al paro, que ya ha encontrado un buen empleo, aunque no lo bien pagado que se merece, al pobre le dan 150.000 euros a la semana; y Neymar ha superado su tristeza y ya no se va del Barsa, eso sí, con un tratamiento de salarios mas alto, que esa medicina parece muy eficaz contra la depresión de estos pobres futbolistas de élite.

Así que ahora ya puedo irme a disfrutar de mis vacaciones sin preocupaciones… y ya volveré.

¿Cómo…?, ¿de las otras noticias de los telediarios?..., pero, ¿qué noticias?..., ¿las que ponen antes de las del fútbol?...,  ¡esas son para rellenar la hora que tiene que durar!, ná un follón, como los quince minutos hablando del tiempo.

… ¡chsss…!, ¡eh!, como decía Mari Trini en su canción, "yo no soy ese”, ¿eh?, pero somos muy de así.