Supone el 4,2% del PIB de la comunidad
La imposición nacionalista del euskera mantiene 56.000 puestos de trabajo en el País Vasco
Un informe elaborado por la consultora Siadeco para el Gobierno vasco ha puesto de manifiesto que las políticas públicas de imposición del euskera desde las instituciones autonómicas han generado su propio sector económico. De este modo, la obsesión de nacionalistas e independentistas (con la aquiescencia indispensable de partidos como el PP o el PSE-PSOE) por implantar en la sociedad vasca el aprendizaje y el uso de un idioma que apenas es la lengua materna de menos de un 10% de los vascos ha impulsado una industria, fundamentalmente educativa y de profesionales y empresas asociadas a la formación y la comunicación, cuyo mantenimiento depende casi exclusivamente de que se siga conservando la coacción del Ejecutivo regional para el aprendizaje y la utilización del vascuence.
La maquinaria económica que se ha alimentado alrededor de la enseñanza y de la utilización forzosa del euskera genera anualmente un total de 2.800 millones de euros, un 4,2% del PIB del territorio.
Tan impresionante es el tamaño de la vorágine empresarial, tanto del sector público como privado, puesta en marcha alrededor de un idioma que apenas habla habitualmente el 13% de los vascos, que el sector del euskera supone el 6,3% del empleo de la Comunidad Autónoma Vasca, con 56.142 puestos de trabajo, 42.724 de ellos directos, 3.748 indirectos y 9.670 inducidos. Esta aportación del vascuence a la economía vasca es similar, en cuanto al PIB, a la de los parques tecnológicos (5%), la educación (5,4%) o el turismo (5,8%).
Un informe elaborado por la consultora Siadeco para el Gobierno vasco ha puesto de manifiesto que las políticas públicas de imposición del euskera desde las instituciones autonómicas han generado su propio sector económico. De este modo, la obsesión de nacionalistas e independentistas (con la aquiescencia indispensable de partidos como el PP o el PSE-PSOE) por implantar en la sociedad vasca el aprendizaje y el uso de un idioma que apenas es la lengua materna de menos de un 10% de los vascos ha impulsado una industria, fundamentalmente educativa y de profesionales y empresas asociadas a la formación y la comunicación, cuyo mantenimiento depende casi exclusivamente de que se siga conservando la coacción del Ejecutivo regional para el aprendizaje y la utilización del vascuence.
La maquinaria económica que se ha alimentado alrededor de la enseñanza y de la utilización forzosa del euskera genera anualmente un total de 2.800 millones de euros, un 4,2% del PIB del territorio.
Tan impresionante es el tamaño de la vorágine empresarial, tanto del sector público como privado, puesta en marcha alrededor de un idioma que apenas habla habitualmente el 13% de los vascos, que el sector del euskera supone el 6,3% del empleo de la Comunidad Autónoma Vasca, con 56.142 puestos de trabajo, 42.724 de ellos directos, 3.748 indirectos y 9.670 inducidos. Esta aportación del vascuence a la economía vasca es similar, en cuanto al PIB, a la de los parques tecnológicos (5%), la educación (5,4%) o el turismo (5,8%).