Una nueva derecha se extiende por el viejo continente
Salvini y Le Pen lanzan un "frente de la libertad" para "salvar Europa"
La "revolución del sentido común"
La nueva derecha europea se extiende por el continente y se prepara para las elecciones que tendrán lugar el próximo mes de mayo de 2019. El líder de la Liga, Matteo Salvini, y la dirigente de la Agrupación Nacional francesa, Marine Le Pen, acaban de lanzar en Roma una "alianza soberanista" para "salvar" Europa.
"Estamos aquí para dar sentido y alma a un sueño de Europa que los burócratas europeos han vaciado. Los salvadores de Europa están aquí, no en Bruselas", proclamó Matteo Salvini, actual ministro de Interior y vicepresidente del Gobierno italiano, quien añadió que las próximas europeas suponen el "final de un camino de la revolución del sentido común que inevitablemente involucra a toda Europa". En palabras de Le Pen: "La UE ha pisoteado los valores de la solidaridad, ahora estamos en un momento histórico, y en mayo lograremos alcanzar una Unión que se construya a partir de nuevos valores contra la globalización".
A su lado, Marine Le Pen explicaba que estamos viviendo un "momento histórico" que verá "emerger una Europa diferente, la Europa de las naciones, del respeto y de la protección".
El proyecto de la "nueva derecha" europea, que se ha bautizado como el "frente de la libertad" luchará para defender un proyecto común para Europa en el que no descartan nombrar a candidatos conjuntos para desempeñar "los roles más delicados" al frente de las principales instituciones de la Unión Europea (UE), aunque ambos líderes rechazaron imponer una única lista. "Cada uno celebrará sus victorias y nos encontraremos en Europa", subrayó el político italiano. El objetivo es crear "una comunidad" europea, que no unión, que "reconozca la libertad de los distintos países".
"Somos veintisiete. Tenemos historias, economías, culturas y exigencias distintas. Pretender decidir todo desde Bruselas es una locura", defendió el líder de la Liga. Esa nueva comunidad protegería su frontera externa e impulsaría la cooperación con África para evitar el éxodo hacia Europa. También defendieron que cada país pueda elegir la "política de disuasión" que considere conveniente. No rechazan la moneda única, pero sí excluyen acuerdos comerciales con otros países "que arruinen a los agricultores locales".
La nueva derecha europea se extiende por el continente y se prepara para las elecciones que tendrán lugar el próximo mes de mayo de 2019. El líder de la Liga, Matteo Salvini, y la dirigente de la Agrupación Nacional francesa, Marine Le Pen, acaban de lanzar en Roma una "alianza soberanista" para "salvar" Europa.
"Estamos aquí para dar sentido y alma a un sueño de Europa que los burócratas europeos han vaciado. Los salvadores de Europa están aquí, no en Bruselas", proclamó Matteo Salvini, actual ministro de Interior y vicepresidente del Gobierno italiano, quien añadió que las próximas europeas suponen el "final de un camino de la revolución del sentido común que inevitablemente involucra a toda Europa". En palabras de Le Pen: "La UE ha pisoteado los valores de la solidaridad, ahora estamos en un momento histórico, y en mayo lograremos alcanzar una Unión que se construya a partir de nuevos valores contra la globalización".
A su lado, Marine Le Pen explicaba que estamos viviendo un "momento histórico" que verá "emerger una Europa diferente, la Europa de las naciones, del respeto y de la protección".
El proyecto de la "nueva derecha" europea, que se ha bautizado como el "frente de la libertad" luchará para defender un proyecto común para Europa en el que no descartan nombrar a candidatos conjuntos para desempeñar "los roles más delicados" al frente de las principales instituciones de la Unión Europea (UE), aunque ambos líderes rechazaron imponer una única lista. "Cada uno celebrará sus victorias y nos encontraremos en Europa", subrayó el político italiano. El objetivo es crear "una comunidad" europea, que no unión, que "reconozca la libertad de los distintos países".
"Somos veintisiete. Tenemos historias, economías, culturas y exigencias distintas. Pretender decidir todo desde Bruselas es una locura", defendió el líder de la Liga. Esa nueva comunidad protegería su frontera externa e impulsaría la cooperación con África para evitar el éxodo hacia Europa. También defendieron que cada país pueda elegir la "política de disuasión" que considere conveniente. No rechazan la moneda única, pero sí excluyen acuerdos comerciales con otros países "que arruinen a los agricultores locales".