Tras la constatación por parte de la Agencia Europea del Medicamento de la posible existencia de "un vínculo" entre la vacuna de AstraZeneca y la aparición de trombos, el Ministerio de Sanidad y las comunidades han decidido paralizar la vacunación con AstraZeneca a los menores de 60 años, aunque han dejado en el aire lo que ocurrirá con los que ya han recibido una dosis. Para éstos se barajan dos opciones: no completar la pauta o recibir otro suero.

En la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, todas las autonomías, excepto Madrid, que ha votado en contra porque quería ampliar el límite a mayores de 65 años, y el País Vasco y Ceuta, que se han abstenido, han apoyado la propuesta de Sanidad de reservar AstraZeneca a los mayores de 60, aunque esta inoculación también estaba desaconsejada a los mayores de esta edad.

Por otro lado, los Veintisiete no han alcanzado una posición común sobre el uso de la vacuna de AstraZeneca pese a la llamada de la Comisión Europea para encontrar una respuesta "lo más coordinada posible".